~ Capítulo 38 <3

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- hola hija
- hola mamá
- el almuerzo ya está, anda deja tus cosas y baja para comer - está bien.
Subí a mi habitación, dejé mi mochila y entré al baño. Me lavé las manos y el rostro, luego bajé nuevamente a la sala.
Me senté en el comedor, mamá estaba frente a mí.
Empezamos a comer el bibimbap en silencio.
No sé si decirle sobre la cita que tengo con Eunhyuk. Algo me dice que si le digo ella es capaz de hacer una fiesta para celebrarlo pero sino le digo me sentiré mal por ocultárselo.
Cansada de pensar resople.
- que sucede -mamá me miró y dejó los palillos a un lado.
La miré.
- eh... bueno... nada, todo bien -traté de sonreír.
- ¿algo pasó en la universidad? ¿Con Sungmin?
- no, no... con él nada -tan solo escuchar el nombre de Sungmin hace que mi corazón lata más rápido de lo normal.
- entonces...
- ya te dije que nada -metí un pedazo de bibimbap en mi boca.
- _______ me miras con ojos de buscando ayuda y luego no me quieres decir nada.
Suspiré.
Aquí voy.
- está bien, te lo diré pero prométeme que no te alterarás, no gritarás ni mucho menos harás una fiesta
- ¿fiesta? Porque haría eso
- solo promételo
- está bien, está bien, te lo prometo -alzó su mano derecha.
- bien, tengo una cita con Eunhyuk, mañana -lo dije lo más rápido posible.
La miré buscando algún signo de alegría o euforia pero nada, se quedó completamente quieta y muda.
- mamá ¿estás bien?
- vas... ¿vas a salir con Eunhyuk? -asentí -. ¿cómo amigos?
- ah sí... no, bueno es una cita así que supongo que no es como amigos
- ¡ah! -Gritó.
Si, ya empezó la locura.
Se levantó de su lugar y rodeo la mesa para ponerse frente a mi lado y abrazarme muy fuerte.
- mamá me asfixias
- oh _______ es la mejor noticia que me has podido dar, no sabes cuanto esperé por esto -y me abrazó aún más fuerte, si eso era posible.
- mamá... ya no... ya no respiro
- oh lo siento -me soltó -. Pero eso es una gran noticia, tenemos que celebrarlo
- Eh -la miré amenazante -. Mamá me lo prometiste, nada de fiestas
- es que esto es grandioso hija
- lo sé -traté de sonreír.
Ella se dio cuenta.
- ¿no estas feliz?
- Sí, lo estoy pero tampoco es que esté saltando de alegría
- es por... por ese chico ¿tu ex?
La quedé viendo.
¿Es por él? No, no es por él.
Si estoy así es porque tengo miedo de que esa cita no funcione y yo lastime a Hyuk.
- no, no es por él
- ¿segura?
¡Rayos no!
Claro que es por él, en parte claro. No sé por qué siento como si lo estuviera traicionando.
Aún recuerdo lo que me dijo el otro día: "... apenas terminamos hace una semana y tú ya estas besuqueándote con otro".
¿Será rápida la cita con Eunhyuk?
- no lo sé mamá, solo quiero que Eunhyuk no salga lastimado
- y tú también
- sí, yo tampoco quiero salir lastimada
- sabes lo que pienso
- qué -le pregunté.
- creo que esa cita saldrá bien
- ¿tú crees?
- sí, ya verás, solo tienes que divertirte como lo haces con él solo que con un poco más de romance.
La miré y ella me miró, luego me abrazó.
- verás que todo saldrá bien. Deja que tu corazón vuelva a sentir.
¿Dejar que mi corazón vuelva a sentir?
¿Y que hay si por la única persona que quiero que sienta es por Sungmin?

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- puedo pasar -dijo mamá en el umbral de mi puerta.
- claro pasa.
Ella entró.
- prepárate, vamos a salir
- ¿salir? A dónde
- de compras -sonrió.
- ¿de compras?
- sí -sonrió.
- ¿pero por qué?
- ¿cómo que por qué? Hace tiempo que no vamos, además necesitas algo bonito para tu cita
- mamá solo será con Eunhyuk
- pero no es una salida de amigos, es una C - I - T - A -me deletreó la última palabra.
- mamá no es necesario, ya lo tengo solucionado
- ¿ah si?
- sí
- y como irás, ¿con unos jeans y una blusa a cuadros?
¿Cómo me descubrió?
Rayos.
- no, no pensaba usar eso
- entonces
- eh... bueno iba a ponerme unos jeans y una blusa de color entero -le sonreí a medias.
- ay por favor ______
- pero la blusa será sin mangas.
Resopló y me levantó de la silla de mi escritorio.
- vamos y punto final
- mamá
- no digas nada, iremos y ya
- pero ni siquiera tenemos dinero
- claro que si -se detuvo y de su abrigo sacó su billetera.
La abrió y sacó... ¿Una tarjeta dorada?
La miré.
- de donde tienes eso
- solo era para emergencias
- ¿y esto es una emergencia?
- por supuesto así que vamos.
Rendida me dejé llevar por ella.
Salimos de la casa rumbo al paradero.
Una vez ahí esperamos al bus. Diez minutos después llegó, subimos y nos sentamos al fondo.

Pasado un buen tiempo llegamos al centro de Seúl. Nos bajamos del bus y caminamos hasta el centro comercial. Llegamos y entramos.
Miles de tiendas y miles de personas nos rodearon.
- oh, entremos aquí -dijo mamá.
Y aquí empieza mi tortura.
¿Les dije que odiaba ir de compras? Pues sí, lo odio, ir de tienda en tienda, probarte toda la ropa para que al final no compres nada y para colmo los pies terminan doliéndote hasta no más.
Entramos y me vi rodeada de ropa juvenil. Después de todo no estaba tan mal.
Mamá empezó a elegir lo que iba a probarme. Eligio como veinte prendas entre jeans, faldas, polos y blusas.

-________ ya sal
- no quiero -le dije desde el vestidor.
Por ningún motivo iba a salir así.
Esta era la última prenda que me probé y no me gusta nada. El jeans me apretaba mucho y me levantaba demasiado en la parte de atrás y ni se diga de la blusa, tenía un escote profundo y era transparente.
- ________ no me hagas entrar y sacarte
- mamá parezco una chica fácil
- eso lo decidiré yo, ahora sal.
Suspiré profundamente, conté hasta tres y salí.
- listo, aquí estoy
- mmm, date vuelta
- mamá...
- date vuelta.
Bufé y me di la vuelta.
- sí, efectivamente pareces una chica fácil
Rodé los ojos.
- ¿puedo cambiarme?
- sí
- gracias -dije.
Entré nuevamente al vestidor y me cambie rápidamente.
Si, cuanto amaba mi ropa, unos jeans rectos que no me apretaban tanto y mi blusa normal.
Esta era yo.
- apresúrate ______, aún faltan más tiendas -habló mamá desde afuera.
Al parecer aún no termina mi tortura.

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Gracias por leer! :)

Capítulo treinta y ocho, editado :)

La Chica Nerd ©Where stories live. Discover now