|Rápido crecimiento y peligro|

2.3K 208 0
                                    

Ya había pasado una semana de aquella noche donde yo y Austin la pasamos juntos, me arrepentía rotundamente de haber hecho semejante cosa con él, sin embargo era la única solución, Sain supo enseguida lo que había ocurrido, puesto que él quería estar el mayor tiempo posible conmigo para protegerme a mí y el bebé.

Como estábamos comprometidos mis padres no mostraron disgusto alguno cuando les comenté sobre lo que había ocurrido con Austin y también dije que estaba esperando un heredero, estos solo hicieron que la boda que tendríamos se adelantarán, Sain cada tanto aparece cuando ya no hay nadie y pone una mano en mi vientre, yo nunca entenderé el porque cada vez que lo hace sonríe, si el bebé es aún muy chico para sentirse siquiera las patada o cualquier movimiento que haga parecer que está ahí.

Estaba leyendo un libro en mi habitación cuando siento un ruido extraño, por suerte siempre llevaba una espada conmigo por protección. Comencé a mirar toda la habitación semi oscura esperando encontrar el motivo del ruido, pero el silencio volvió a reinar, baje mi espada y la coloque en mis piernas, no dejándome convencer de que todo fue mi imaginación.

Como la persona que se escondía entre las sombras vio que no volvería a bajar la guardia se hizo visible, se trataba ni más ni menos de...

_Xavier - Hable mirándolo fijamente sin mover ni un solo músculo-.

_ Hola princesa, ¿me extrañó? - Lo mire con un profundo odio sin siquiera responder a esa pregunta tan tonta, me levanté de mi lugar mirándolo muy seriamente, este ni siquiera cambió su sonrisa de burla, se quedó mirándome fijamente como burlándose de mí-.

_¿Qué haces aquí? - Pregunte con un profundo desprecio en la voz-.

_¿No puedo venir? Pensé que me quería cerca de usted princesa, después de todo... - Hizo un minuto de pausa mirando hacia el piso, para luego levantar la vista y terminar lo que iba a decir, su mirada se volvió muy fría-.

_ Usted me convirtió en vampiro para servirle siempre ¿no? Aún debo agradecerle - Estas últimas palabras las dijo con la mandíbula apretada al igual que sus puños.

No pude reaccionar hasta que esté vino corriendo hacia mí golpeando a su vez la lámpara que alumbraba el lugar, yo intenté atacar con la espada pero este la tiro a alguna parte de la habitación, tirandome así al mismo tiempo a la cama quedando él arriba mió, yo lo mire algo confundida pero a la vez molesta.

_¿Qué rayos crees que haces? - Le escupí las palabras con todo el odio y desprecio posible-. 

_ Te daré mi recompensa, maldita princesa busca sangre -Cuando vi que buscaba mi cuello para besarlo me comencé a desesperar, él tenía más fuerza que yo y con una mano tapaba mi boca-. 

Técnicamente estaba luchando casi inútilmente pero al menos lograba que no pudiera continuar con lo que hacía, por esa razón se enojó y comenzó a golpearme, yo me removí mucho más que antes buscando escapar de sus brazos cuando siento un golpe que me deja inmóvil. Este maldito acaba de golpear mi panza. 

Peor aún, cuando noto que deje de moverme cuando me golpeó en esa zona este sonrió aún más.

_¿Es tu debilidad? ¿O será algo más? - Yo no quería responder, no iba a responder a lo que este hombre preguntará, este se dio cuenta de que no hablaría, por esa razón se acercó a mí oído y me susurro-.

_ Entonces probemos haber que pasa princesa - Me deje consumir por el miedo, extrañamente temía que lastimara a este bebé-.

Pero no podía hacer nada por más que intentara, desde que llegué al castillo de mis padres tome sangre muy pocas veces, muy poca para la que necesitamos yo y este niño. Pude ver como Xavier sonreía con mucha malicia al tiempo que levantaba su mano derecha y la movió muy rápido para golpear mi panza otra vez, yo sólo pude cerrar los ojos esperando el golpe que nunca llegó. Cuando volví a abrir los ojos estaba Xavier mirando con frialdad a Sain, quien estaba con los ojos rojos llenos de furia, por más que hubiera oscuridad se podía ver el rojo intenso en su mirada, este sostenía el puño que estaba casi en mi panza, en un rápido movimiento Sain lo tiró para atrás a lo que este hizo una pirueta en el aire, logrando no golpearse contra la pared y quedando parando enfrente de nosotros-. 

_ Sain, ¿por qué la defiendes? ¿Acaso estás dispuesto a traicionar a tu hermano? - Este coloco una de sus manos en su cintura y relajo su cuerpo-.  

_Eso que yo sepa no es de tu incumbencia por otra parte yo le jure lealtad a mi princesa, cosa que tu seguramente no sabes que es - Xavier apretó los puños muy fuertemente y luego volvió a hablar-.

_ Yo nunca quise ser un monstruo por desgracia, además jure lealtad al príncipe verdadero de los vampiros - Contestó refiriéndose a Edgar-. 

_Es mentira Xavier - Me levanté con una mano en el estómago ya que estaba un poco a dolorida, era mi lugar sensible sin duda-.

_¿A qué te refieres? - Hablo de nuevo-. 

_Me refiero a que tu me juraste lealtad a mi, esta claro que te hipnotice y no lo hiciste con conciencia, pero no te obligue y tu solo lo hiciste, lo que haces con el príncipe negro es simplemente por venganza-. 

El enojo que soltaba este era evidente, más era su enojo por el hecho de que yo tenía razón, sin aguantarlo más y al quedarse sin palabras este paso a lado de ambos y se fue por la ventana que estaba abierta mostrando la luz de la luna, yo cerré los ojos y lancé un suspiro, cuando los abrí para mi sorpresa Sain estaba arrodillado en el suelo mirando mi vientre, ese acto por parte de él hizo que diera un salto del susto.

_¿Qué haces  Sain? - Le pregunté con una mano en mi pecho-.

_ Estaba viendo si el bebé recibió algún daño - Nos quedamos un rato en silencio mientras él miraba mi vientre con una mano en su barbilla, luego posó su mano en mi panza y sonrió-.

_ Parece que no sufrió ningún daño, sin embargo está algo molesto por el golpe que recibió - Fue extraño el pensar que está molesto por ello-. 

_ Sain, ¿Cómo puedes comunicarte con el bebé si penas tiene una semana como mucho - Hable curiosa-. 

_ Tú también puedes hacerlo puedes hacerlo, nuestros dones no los permite - Diciendo eso él tomó mi mano y la coloco en mi vientre, luego dijo en un susurro que escuche perfectamente-.

_ Intenta meterte en su mente -Yo solo obedecí y lo que escuché fue impresionante, escuche que una voz infantil me hablaba-.

_ Hola mami, ¿estás bien? - Yo mire a Sain para comprobar que él también escuchó eso, a lo que respondió con una sonrisa-.

_Claro que lo estoy, ¿y vos bebé? - Hable sorprendida-. 

_ Lo estoy pero tengo sueño, ya voy a dormir - Aunque fue corta la charla con el bebé quede impresionada, ¿como se podía hacer eso? Sain se levantó caminando hacia la ventana pero yo lo detuve del brazo.

_ Por favor dime cómo es que puedo hacer eso, ¿cómo es posible? - Le pregunté mirando mi panza-. 

_Tu puedes leer mentes, ¿no? Yo tengo un poder parecido, yo puedo concentrarme y saber que es lo que pasa en mi entorno, técnicamente controló todo lo que hago con sólo pensarlo, por esa razón también puedo comunicarme con el niño, no se si entiendes - Respondió sonriendo-. 

_ Entiendo perfectamente o eso creo - Dije confundida-. 

_ Bien, deberías descansar tú también, toma muerde - Al momento que decía eso mostró su cuello para que lo mordiera-. 

Pude verlo en la oscuridad simplemente iluminado por la luz de la luna solamente, me acerque para morder su cuello, cuando lo hice pude ver que soltó un jadeo de dolor y luego un suspiro de alivio, este me abrazó mientras bebía su sangre haciendo que yo también lo abrace. Una vez que termine fui a mi cama mientras él miraba por última vez para luego marcharse, yo no tenía sueño generalmente, al ser vampiro no porque dormir, sin embargo desde que quede embarazada es como si volviera a ser humana. Cerré los ojos y me deje llevar por el sueño.

La Tirana °Editando°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora