Juntos.

6.5K 398 565
                                    

¡Hola! ¿Cómo han estado? Extrañaba mucho pasarme por aquí :')

Wattpad el otro día me dio el susto de la vida cuando vi todas mis historias resubidas pero con tan solo una parte en ellas, juré haber perdido todo ;-; Wattpad no te quiero mucho </3

Bueno les explico sobre esta historia, la verdad no tenía idea a donde iba, ya que no tenía una trama hecha o pensada, pero para que entiendan mejor; tan solo son pequeños momentos en donde los chicos demuestran el amor que se tienen el uno al otro con cosas minimas, acciones y esas cosas.

No se si me explico ;-;

Otra aclaración es que los chicos son adultos, ya en la universidad/trabajo.

Y bueno, no las aburro más, pueden comenzar a leer.

Espero les guste <3

(No tuve mucho tiempo de revisar, así que si hay errores más tarde los arreglo uvu )

~•~•~•~•~•~•~

El atardecer caía lentamente, pintando el cielo de varios y llamativos colores. Luces se iban prendiendo en cada esquina, como en cada casa también, haciendo que las ventanas se iluminaran con un claro resplandor.

El hogar de los Marsh se encontraba completamente iluminado; la televisión se encontraba encendida pero totalmente olvidada. Al parecer los chicos que se encontraban presentes en ese hogar, estaban muy concentrados haciendo otra cosa.

—¡Esto es estupido! —

—¡No, no lo es! Tu eres estúpido. —

—Stanley...—

Ambos jóvenes estaban intentando hacer una receta que habían visto en internet. Claro, obviamente allí se había visto muy fácil y simple; mezclar algunos ingredientes, revolver, amasar y calentar.

Sencillo.

Eso era lo que habían pensado desde un principio y no podian estar más horriblemente equivocados.

Su claro error se podía notar fácilmente por los rastros de harina esparcida por toda la habitación; ni hablar de sus prendas de vestir o sus cabelleras. Además de que a cierto pelinegro sin querer se le quebró no uno, sino, tres huevos; mientras cierto chico de cabello rebelde había agregado más azúcar de lo debido.

Sin contar que extrañamente un paño fue trágicamente quemado. No se pregunten el porqué; ni ellos saben la respuesta.

—Vamos ayúdame, no te quedes ahí parado, Stan. — Se quejó el pelirrojo que se encontraba amasando la última porción de masa de las galletas que estaban preparando.

—¿Con que? Esa es la última que queda. —Rió el de ojos azules a lo infantil que había sonado su novio, negando lentamente con una sonrisa en sus labios al escuchar de respuesta una pequeña queja por parte del otro. Lo observó un momento mientras se limpiaba las manos con un paño, notando todos los restos de harina en su rostro, cabello y ropas. — Mírate, estas todo sucio, un chef no puede estar así. — Comentó mientras se acercaba, pasando el paño suavemente por su rostro.

Kyle se sorprendió un poco; estaba concentrado en terminar luego, pero dejó que Stan limpiara de su rostro. — Un chef... ¡Al final termine haciendo más que tú! Fue tu idea, tu tonta idea, tú debiste haber hecho todo. —Bufó, mirando con molestia al otro, sintiendo sus brazos algo cansados de tanto amasar.

—¿Y dónde está la diversión en eso? No es entretenido si no lo hago contigo. —Fingió tristeza para luego sonreír al ver las mejillas del otro tornarse de un tenue color rojizo.

One - Shots | StyleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora