Please, love me

Capítulo 5

- Dice mucho de ti que hagas esto personalmente. -Junsu se levantó de su escritorio. - Y descuida, Jaejoong tendrá todo el tiempo necesario para que se recupere. Y me gustaría visitarlo.

- Saldrá en dos días del hospital. Y el horario de visita es de cinco de la tarde a siete de la noche. Myungeun irá hoy también. -Yoochun sonrió desde su asiento. Junsu le agradaba mucho; tan diferente a su primo.

- Entonces ambos saldremos temprano del trabajo para darle algo de alegría a Jaejoong.

- Gracias, señor Kim -dio una pequeña reverencia.

- Por favor, dime Junsu. Y por Jaejoong, yo no tengo ningún problema en ayudarlo para que se encuentre mejor -le sonrió.

- Aun así, le agradezco demasiado. -Yoochun se levantó, y luego de otra reverencia, se retiró de la oficina.

Había ido a hablar con Junsu para pedirle que permitiera que Jaejoong tuviera unos días de descanso y así recuperarse sin ningún problema. Se encontraba algo temeroso, pero descubrió que Junsu era más cálido de lo que parecía.

Nuevamente se topó con Yunho en el elevador, pero ésta vez, ambos iban a tomarlo.

- ¿Jaejoong tendrá vacaciones, acaso? -Yoochun deseó golpear con todo a ese hombre.

- ¿Ahora sí le importa lo que le sucede a mi amigo? -apretó sus manos en puños para evitar cualquier locura.

- No sé por qué debería importarme -Yunho acomodó su corbata, como si fuera una plática más.

- No se haga, señor Jung -dijo con ironía. - Sé muy bien que utiliza a Jaejoong para desahogarse por las noches. Y que no llegó por trabajo aquella noche que Jaejoong y yo decidimos reunirnos en su casa. -Presionó el botón para detener el elevador. - Lo que no sé, es qué tanta mierda le hizo esa noche.

- Cuida tu boca. No estás hablando con cualquier persona.

- Claro que no. Hablo con un maldito violador. Jaejoong no ha querido pronunciar palabra desde que despertó hace dos días -tomó al hombre por el cuello de su camisa. - ¿Todavía se atreverá a decirme que no es asunto mío? Haré que pagues, Jung Yunho -lo soltó, para luego quitar el seguro y que el elevador continuara su curso.

Yunho no dijo nada en lo poco que duró estar dentro con el otro hombre. Yoochun se bajó en su piso y el continuó hasta la entrada del edificio. 

Ese día se había decidido en ir a visitar a Jaejoong. Quería asegurarse que el hombre no mencionara su nombre en ningún momento, pero dada las cosas, ya nada serviría.

De igual forma, se dirigió al hospital. No sabía qué haría o diría; pero su alma le decía que no estaría tranquila hasta que supiera de la situación de Jaejoong.

- Habitación de Kim Jaejoong, por favor. -Solicitó a la enfermera de recepción.

- Lo lamento, la hora de visita no es hasta más tarde. Si pudiera...

- ¿No sabe con quién está hablando? -dijo entre dientes, muy enfadado.

- Disculpe pero son reglas del hospital. Nadie puede entrar sin un permiso especial -la enfermera se levantó de su asiento.

- ¿Sucede algo? -el doctor que atendía a Jaejoong llegó al ver la situación a lo lejos.

- Este hombre quiere ver a uno de sus pacientes, fuera del horario de visita -explicó la mujer.

- ¿A quién busca? -miró curioso a Yunho.

- Kim Jaejoong. Él debe verme -dijo despectivo. Nadie más le prohibiría verlo.