13-Propuesta.

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Jamie's POV:

—¿Y? ¿cómo te fue? —preguntó Savannah entusiasmada en cuanto me vio entrar por la puerta.

Yo agaché mi cabeza. No tenía ganas de hablar de lo sucedido.

Evidentemente, Savannah se dio cuenta de que algo andaba mal.

—Si se atrevió a rechazarte, juro que lo acabaré con mis propias manos —sentenció ella.

—Sav —dije interrumpiendola —él no me rechazó —trataba de hallar las palabras adecuadas para describir lo que había sucedido anteriormente —simplemente no le gusto —dije desanimada, decirlo en voz alta resultó mas tormentoso de lo que esperaba.

—O sea que sí te rechazó —dijo Savannah molesta.

—No —hice una pausa, sentía como las palabras que diría a continuación quemaban en mi garganta —él no me rechazó porque ni siquiera fui capaz de confesarle mis sentimientos —dije apenada, a pesar de haberlo visto con otra chica me sentía como toda una cobarde al haber huído.

—¿Por qué demonios no le dijiste lo que sentías? —espetó Sav con confusión e ira en el tono de su voz.

—Porque —las palabras estaban atascadas en mi garganta, me sentía enferma de tan solo pensar en la escena que contemplé minutos antes —porque él estaba con otra chica —solté de golpe. Decirlo en voz alta se sintió más liberador de lo que esperaba.

Hubo un largo silencio.

Necesitaba que Savannah hablara y no me dejara con este silencio.

El rostro de Sav, reflejó una gran sorpresa, acompañada de decepción.

—Lo siento Jamie —dijo ella con pena.

—No lo sientas, tal vez las cosas son mejores así —dije resignada.

(...)

Han pasado dos semanas desde que mi corazón palpitó y se detuvo por Aaron en un mismo día. Aaron no insistió en buscarme, yo traté de llamarlo pero me acobardé. La idea del rechazo era y es, simplemente abrumadora y aterradora.

Nos hemos cruzado una que otra vez en el campus, pero nos ignoramos mutuamente. Era como si después de nuestra última conversación, hubiéramos establecido un pacto no verbal de ignorarnos todo el tiempo.

Desde que Aaron se fijó en mí, o por lo menos desde que nos vieron juntos, me volví más notoria en el radar de los chicos. Lo cual fuera bueno si yo estuviera interesada en una relación, pero ese no era el caso. Lo más frustrante de todo, era que con la única persona con la que consideré una posibilidad de tener algo, al parecer,  no estaba tan interesado en mí, como yo creía. Lo cual hizo que me volvería más fría de lo que era antes.

Y aunque me quemé la garganta al decir esto, lo diré. Lo extrañaba. Su presencia fastidiosa pero entretenida, era algo que se estaba volviendo costumbre.

Salí de mi clase de biología y salí disparada hacia mi dormitorio. El profesor decidió extender la clase lo cual hizo, que me retrasara veinte minutos, para llegar a mi trabajo.

Iba tan rápido y con tanta preocupación que no me percaté que habia chocado con alguien.

~•~

Aaron's POV:

—Lo siento —musitó una dulce voz después de chocar conmigo.

Algo confundido, me sorprendí al ver que la dulce voz pertenecía a Jamie.

Luego de esa incómoda conversación con Jamie , decidí desistir de la idea de acostarme con ella. Había varios motivos para desistir de esta idea pero el principal era que al estar tan pendiente de Jamie descuidé a las demás chicas. Luego de aquella noche con Ariana, recordé lo mucho que extrañaba el sexo y si continuaba con la idea de acostarme con Jamie, iba a pasar una larga temporada sin este.

—Descuida —dije brindándole una sonrisa.

Aunque Jamie ya no fuera mi objetivo, la chica había demostrado ser una gran persona.

Ella sonrió tímida. Hubo un silencio incómodo el cual yo decidí romper.

—¿Apurada? —pregunte sonriente.

Si me lo preguntan a mí, Jamie debería darse un respiro. Ella era como una hormiguita, diligente y trabajadora. Lo cual era tierno e irritante al mismo tiempo.

—Algo —dijo ella esbozando una leve sonrisa.

—¿Vas a tu trabajo?

—Sí.

Mentalmente me golpeé por lo que dije a continuación.

—¿Quieres que te lleve?

Esperaba un no como respuesta, pero increíblemente, ella acepto. Esto era realmente extraño, pero aún más extraño, era el hecho de que yo Aaron Parker, me ofreciera a hacer algo sin recibir nada a cambio.

Antes le ayudaba básicamente porque quería follarla, pero ahora que desistí de esa idea, no entendía del todo, el porqué habia tenido ese impulso de amabilidad con ella.

(...)

Llevaba dos horas sentado en una mesa en la cafetería que trabajaba Jamie. Estaba muy aburrido. Jamie servía y limpiaba mesas con un delantal —el cual le quedaba de maravilla, cabe mencionar —mientras que yo, pasaba el tiempo mirando hacia la pared o la pantalla de mi celular.

En el camino hacia aquí a duras penas sí cruzamos palabra. Jamas pensé que luego de esa noche, el ambiente sería tan tenso entre nosotros.

Estaba navegando en internet, a través de mi celular, cuando vi un anuncio que llamó mi atención. El anuncio citaba lo siguiente:

"XII Edición del concurso anual de danza contemporánea en pareja"

Se trataba acerca de una competencia de baile que se realizaría en un teatro en Manhattan. A una hora de aquí. La competencia sería en dos meses, y lo más interesante del asunto, es que habría un premio de dos mil dólares al ganador.

Una idea cruzo por mi cabeza. Aún no entiendo el porqué, solo sé, que en serio quería llevar esta idea a cabo.

—Jamie —dije llamándola. Ella giró y me miró.

—¿Sí? —preguntó ella acercándose a la mesa donde yo me encontraba sentado.

—Tengo una propuesta que hacerte y me temo que te será imposible decir que no.

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Sigan el instagram de la historia para contenido exclusivo: @dileadiosalainocencia. Les seguiré de vuelta.

Dile adiós a la inocenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora