The Last Whisper || Larry Stylinson

Capítulo 12

Louis se relajó bajo los brazos de Nicholas. Dio un suspiro y se arregló la ropa. Fingiendo tranquilizase.

-¡Me importa una mierda que el este mirando!

Se acercó a Mark, lo agarro del pelo y con su mano libre comenzó a darle fuertes golpes. Louis tenía los nudillos llenos de sangre, al igual que la cara del morocho.

-¡Vas a tener que hablar en algún momento si no quieres morir!

Lo golpeó por última vez con todas sus fuerzas y salió de la sala. Nicholas lo seguía por detrás, igual que Jensen y Harry. Entro a su oficina y encendió uno de sus amados cigarrillos, el estrés se estaba apoderando de todo su cuerpo. Antes de que su jefe entrara por la oficina, le ordeno a Nicholas que se quedara con Harry y no lo perdiera de vista ni un segundo.

-Louis, ¿Obtuviste algo?

-El maldito no dijo nada, pero estoy seguro de que lo va a hacer.

Louis termino su cigarrillo rápidamente y lo apago sobre el escritorio de Nicholas, dejando una marca negra.

-Lo dejaremos solo esta noche aquí, estará supervisado por los mejores guardias de la agencia. Puedes tomarte la noche si quieres, Harry podrá irse a casa junto con un comisario.

El ojiazul suspiro, agarro su chaqueta y se largó del lugar, ignorando los comentarios innecesarios de todos en el edificio.

Solo quedaba una rebanada de pizza a las 12 de la noche. Louis estaba con Robert en su departamento, sentados en frente del televisor y la consola de juegos.

-Estuve tan cerca de verle la cara a El Jefe, no podía creerlo.

El Jefe, tal como lo dice su apodo, era el que dirigía una de las más potentes juntas de narcotráfico en el país. Nunca se sabía de su vida o de su ubicación. Se aparecía una vez al mes para renovar los puestos, cobrar deudas y hacer correr sangre. Obviamente Louis sabia de esto, había trabajado para el más de 3 años junto con la pandilla. Pero estando tan cerca a ser su mano derecha, lo dejo todo.

El ojiazul estaba totalmente concentrado en el videojuego, movía todo su cuerpo al compás del mando. Llevaba la delantera en la carrera mientras que Robert se encontraba en el quinto puesto.

-Eso es importante, nunca nadie le vio el rostro.

Louis contesto sin sacar la vista de la pantalla, estaba a metros de la meta.

-Ahora soy el proveedor de la pandilla. Manejo el dinero y la mercancía, ¡Es increíble!

Robert soltó el mando, rindiéndose. Louis había ganado la carrera, se levantó y saco lo que quedaba de la pizza.

-Nunca me ganaras Robert, supéralo.

Señalo con la pizza a su amigo antes de darle una mordida. Agarro el queso que estaba cayendo de la pizza con un dedo y se lo llevo a la boca.

-Siempre me quedare con la última pizza si no mejoras en las carreras.

Louis apago la consola y terminada su pizza salió al balcón con Robert a fumar.

-Ten cuidado en lo que te adentras Robert. Te tocara matar gente ahora.

El ojiazul prendió el cigarrillo de su amigo y luego el suyo.

-He matado gente antes Louis. No le tengo fobia a la sangre o cosas por el estilo.

Robert apoyo la espalda en la barandilla del balcón y se llevó el cigarrillo a la boca, soltando todo el humo lentamente.