Enigmatic

Capítulo XXIII

Enigmatic.

- Los expertos dicen que estoy delirando. Dame una terapia, soy una burla andante. Pero estoy sonriendo a pesar de todo.- Teraphy de All Time Low.

Capítulo XXIII:

Mi cordura poco a poco comenzaba a abandonarme, dejándome fuera de sí, la mayoría del tiempo. Las drogas estaban consumiendo mi piel, volviéndola seca y creando bolsas de color morado debajo de mis ojos.

Según Dana, me veía «muerta»

Sin duda, el exceso de medicación en vano, estaba matándome. Pero no estaba muerta.

No todavía.

Los pacientes comenzaron a entrar uno a uno, llenando la sala de voces y algún que otro parloteo. Junto a mí se sentaron dos desconocidos, que podía jurar que no había diferencia entre ellos. El cabello de ambos era radioactivamente naranja, de un color zanahoria que a cualquier llamaría la atención.

Vi que Logan Meson se sentaba junto a uno de estos mellizos, a mi derecha.

Vi entrar al encargado del taller. — ¡Buenos días, chicos! — Saludó Charles, con una amplia sonrisa. Los pequeños bellos canosos de su barba hasta parecían hacerlo ver más feliz. Realmente admiraba (y a veces odiaba) el amor y la integridad con la que solía trabajar. Parecía disfrutar el estar entre un par de suicidas y algún que otro loco. — ¡Vamos a empezar! Tengo un taller muy interesante para todos. Aline, querida, ¿me haces los honores?

Aline se había puesto de pie, cuándo la puerta se abrió revelando a un devastado y súper jodido tétrico de cabello azul. Lo ignoré completamente, mirando mis botas color cacao.

Solía imaginarme la vida junto a Kyle Moons. Solía imaginarme que hubiera pasado si yo nunca me hubiese querido suicidar. Nunca hubiese entrado al Hospital. Nunca hubiese conocido a Tyler Doller. Y probablemente, ahora, estaría felizmente casada con el chico que me había amado cómo a nadie.

Mordí mi labio, limpiando una pequeña lágrima que amenazaba con salir de mis ojos.

Odiaba ser tan sensible. Tan débil. Tan patética.

— ¡Justo a tiempo, Jason! — Exclamó Charles con alegría, para luego mirarme a mí. — ¿Quieren sentarse juntos? Puedo hacer que...

— No. — Respondió Logan. Lo miré con el ceño ligeramente fruncido y luego contesté yo:

— No hace falta. Gracias.

Charles ignoró por completo nuestra corta conversación y le indicó a Aline que prosiguiera. La chica blanca se presentó rápidamente y cuándo tuvo intenciones de volver a sentarse, Charles añadió:

— ¿Te gustaría contarnos algo que haya marcado tu semana, Aline?

Ella hizo una mueca y yo sabía que iba a mencionar a Maddie. — Mi mejor amiga va a irse de este Hospital, y no voy a volver a verla nunca más.

La miré, realmente esperaba que comentara algo sobre su encuentro con Maddie. (Que por cierto, tenía que preguntarle sobre el tema, cómo buena mejor amiga que soy).

— Oh... — Asintió Charles, también haciendo un mohín. — Por lo menos, está curada y sana, ¿no?

La chica blanca asintió con la cabeza, y cualquiera (incluso Charles) sabía que no quería hablar más del tema. Por lo que simplemente murmuró un: — Prosigan.

Todos se presentaron y cuándo me llegó el turno, dije:

— Emma Slenn, intento de suicidio, dos meses.