Serás mío, quieras o no [KrisMin/ Xiuris]

-Mi conciencia, mi infierno-

Yi Fan salió de su cuarto casi 5 minutos después de que los demás se fueron, se paró frente a la puerta de Minseok y se debatió sobre derribarla o no, pero finalmente decidió esperar.
«Tiene que salir»

Se sentó en el sofá y puso una película cualquiera en la televisión. Y esperó.
«¿Enserio voy a dañarlo? ¿Seré capaz de...?» Ni siquiera podía pensar en la palabra violarlo porque automáticamente hacia una mueca reprobatoria, sabía que no estaba bien. Si se atrevía a tocar a Minseok aunque el no quisiera, por supuesto que era una violación y estaría manchándolo para siempre.

La película estaba a punto de terminarse y se prometió a si mismo que sí no salía cuando esta acabará, él regresaría a su habitación y nunca, nunca más, volvería a pensar en siquiera tocarlo. Aunque ahora dudaba en hacerlo, no estaba seguro de querer lastimarlo así, no creía poder soportarlo.

Y entonces una puerta abriéndose fue captada por sus oídos. Se levantó como rayo sin saber lo que hacía y se escondió detrás del sillón. «¿Qué estoy haciendo? ¿Acaso estoy acechándolo como si fuese una presa? »

El pequeño mayor salió después de asomarse y (según él) asegurarse de que Kris seguía en su cuarto.
Moría de hambre y tenía que tomar algo de la cocina rápido, después volvería a encerrarse y asunto terminado, o eso creyó.

Kris lo vio caminar con miedo hacia la cocina, su pequeño cuerpo temblaba ligeramente y tenía los ojos rojos, había estado llorando mucho, sus mejillas y su nariz también tenían un pálido tono sonrosado «Parece un conejito listo para ser devorado »

Y viéndolo así fue como Yi Fan tiró lejos cualquier rastro de razón y amabilidad en su mente. Se levantó de donde estaba y se acercó silenciosamente a la cocina. Lo vio preparándose un café «Siempre toma café, sin importar la hora y verlo sonreír al prepararlo es exquisito »

-Te ves increíblemente deseable cuando cocinas - Comentó con voz ronca y dejándose ver por el mayor.

-¡Kris! - Minseok dejó caer la taza y esta se rompió haciendo un ruido sordo.

-¿Por qué tiemblas Minnie? - Le preguntó con tono malicioso, aunque ya sabía la razón.

Minseok no respondió y trato de rodearlo para salir de ahí, tenía la mirada pegada al piso, pero Kris lo tomó del brazo con fuerza antes de que se moviera más.

-Suel-tame - Pidió el más bajo, con tono quebradizo. Tenía miedo, mucho miedo y Yi Fan lo sabía, podía oler la adrenalina corriendo por su cuerpo, delicioso.

-¿Sabes Minnie? Hace tiempo que he soñado con tenerte así - Yi Fan tiró de su brazo, logrando que el mayor se tambaleara hacia adelante y ambos cuerpos chocaran suavemente - Y ahora es el momento perfecto porque no hay nadie en casa.

-Dejame ir, por favor - Rogó sabiendo que una vez que comenzará no podría detenerlo - Kris bas-ta... Me asustas, yo... Enserio amo a Chennie y...

Sus últimas palabras entraron en la mente del Chino destrozando cualquier consideración que planeara tenerle. «¿Por qué tenías que recordarme que le perteneces a otro? ¡¿Por qué?! »

-Eres un niño malo Minnie. Acabas de decir justo las palabras que no quería escuchar - Minseok tragó duro y sus ojos se abrieron un poco más, Kris estaba susurrándole todo eso al oído y se sentía incómodo - Tendré que castigarte...

Lo tomó de las muñecas y lo empujó hacia atrás haciendo que su trasero golpeara contra la mesa de la cocina. Se inclinó sobre él y beso su cuello con pasión, dejando que su lengua saboreara su piel más de una vez.
Yi Fan disfrutaba eternamente de la sensación del mayor estremeciéndose y luchando por soltarse sin decir una palabra.