Capítulo 6: Aquí Houston

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"El que dice una mentira no sabe qué tarea ha asumido, porque estará obligado a inventar veinte más para sostener la certeza de esta primera. - Proverbio Judío."

Un mensaje parpadeó en la pantalla de mi teléfono.

Un texto de Shannon.

Deslicé un dedo por la pantalla y toqué el globo para poder leerlo.

Tierra llamando a Will, ¿me escuchan?

Sonreí y tipié.

Aquí Houston.

Su respuesta fue instantánea.

¿Dónde has estado metida? Si no te conociera, estaría pensando que tienes otra mejor amiga.

Solté una risita.

Ja.Ja.Ja. Graciosa. Sabes bien que últimamente tengo que tomar un turno para tener un poco de tu atención.

Vi como tecleaba furiosamente.

Te prohíbo que digas eso, y como prueba que no es así, mañana pasaremos todo el día juntas.

Creo que no va a ser posible.

¿A qué te refieres?

Estoy segura que aunque no tengas algo de la junta estudiantil, algo ocurrirá.

Y yo estoy segura que estás evitándome.

Y... ahora cuéntame una de vaqueros.

Bien, tal vez no lo hacía a propósito pero si se me daba la oportunidad de ir por un pasillo contrario, la tomaría. Sin embargo, creo que ya era tiempo de revelarle lo que me está carcomiendo en este momento.

Casi fue demasiado fácil escribirle el siguiente mensaje. Casi.

... ¿Te puedo llamar?

En respuesta a ello, empezó a marcar.

- ¿Qué sucede?

- Está bien, ¿Recuerdas el incidente con la Sra. Ryan?

- Ajam.

- ¿Y el del pervertido de ayer?

- El tipo que le gustó tu traje de baño.

- Sí, ese mismo.

- ¿Qué tiene que ver todo eso? - Preguntó escéptica.

Di una respiración profunda y lo solté todo

- A eso voy.

Murmuró una especie de afirmación

- En fin, estaba en la clase de la señora Ryan, como siempre no podía callarse ni un solo segundo, y en medio de ella, entró el chico nuevo, todo arrogante y despreocupado.- Tú creerías que le echó una lata sobre el respeto hacia su clase y a sus compañeros, como debería tomar en cuenta los consejos de alguien mayor. ¿Cierto?

- Sí, supongo. – Podía sentir como al otro lado de la línea Shane se encogía de hombros.

Me quedé en silencio para darle más importancia al asunto.

- Pues no, la mujer estaba tan distraída comiéndoselo con los ojos, que no lo hizo.

La voz de Shane se apagó y la línea quedó en silencio.

- Mentira.

- Nop.

Otro silencio.

- Eso no es cierto.

- Claro que lo es.

- Estás mintiendo.

Gruñí molesta.

- Sabes que no miento.

- Cálmate, William. Sólo estoy... conmocionada.

- Pero, eso no es todo.

- ¿Hay más?

- ¿El porqué llegué tarde?

- Ah, claro. – Sonó como si le quitara importancia después del interesante dato que le había lanzado antes. Como lo siguiente era lo más vergonzoso, traté de hablar rápido.

- Bien, no sé si sumaste dos más dos, pero el chico nuevo, es el mismo chico de los bastidores. Me reconoció, se burló de mí en uno de mis muy conocidos actos de torpeza... Ryan, también; luego se sentó a mi lado y en vez de ayudarme a parar, se puso a ver mi trasero. Y... no sé cómo rayos sucedió pero... ahora le tengo que mostrar la escuela.

- Vaya...

- Sí. No creo que me guste el chico Inglés, se supone que él debería ser el castigado, no yo. Supongo que no soy lo suficientemente linda.

Ella rió.

- Creo que lo eres para el chico Ingles, seguro le gustas.

Solté un bufido incrédulo.

- Sólo me vio una vez, Shannon, ni que fuera una modelo de Victoria's Secret, si así fuera el castigado sería él, no yo. Y si fuese cierto lo que dices, sé que se le pasará con el tiempo, sólo está estirando para atacar. - Suspiré derrotada.- De cualquier modo, no sé cuándo tengo que verlo de nuevo, pero tengo que hacerlo sino quiero perder con la Sra. Ryan; sabes lo tedioso que son sus charlas para ganar créditos extra.

- Vale. - Respondió poco convencida.

- Deja de sonar como si no me creyeras, además, no creo que de verdad me busque, probablemente mañana encuentre una chica dispuesta a hacerle el favor.

Rió como si lo que le acabara de decir fuese lo más divertido del mundo.

- Está bien como digas,- Dijo en tono jocoso.- supongo que de esa manera podremos pasar el día juntas.

- Si es que nadie te necesita. – Agregué rápidamente.

Ella respondió listilla.

- Si es que él no te necesita.

Gruñí mitad frustrada y mitad molesta. Porque la verdad, no tenía idea qué planes traería consigo aquel chico. 

AWAKEWhere stories live. Discover now