Y por eso te odio

No sé por qué olvidamos enamorarnos cada día

Sé que si te cuento te voy a perder, pero ocultarlo sería empezar con mentiras y también te perdería.

Querido José:

Todo pasó sin darme cuenta, no sé en qué momento nos perdimos y dejamos de hacer esas pequeñas cosas que al otro le gustaban, no sé en qué momento permitimos que la rutina y la monotonía nos atrapara, no sé en que momento comenzaron las peleas que parecían no tener fin, no sé cuándo los celos me dominaron hasta llegar a este punto.

Yo sé que nadie es perfecto y no esperaba que nosotros lo fuéramos. Cometimos errores, demasiados, no sé por qué olvidamos enamorarnos cada día si estábamos locos el uno por el otro. Es difícil ver cómo esa historia de amor terminó, lo único de lo que estoy segura es de que te amé, como una loca. Despertaste en mí algo que las demás personas no pudieron, desde el primer momento que te vi me atrapaste.

Debo confesarte que has sido mi primer gran amor, ese que no se olvida, y no te preocupes, aunque intente olvidarte sé que no lo lograría, porque siempre serás alguien especial. Pasamos por demasiadas cosas que duele saber que no se repetirán más. ¿Será correcto este final entre nosotros?, ¿por qué las peleas diarias nos distanciaron tanto? No fuimos lo suficientemente inteligentes como para poner un alto a esa situación y seguir luchando por lo nuestro. ¿Por qué permitimos que el orgullo y el enojo le hayan ganado al amor? Después de toda nuestra historia de amor, porque así deberíamos llamarla, porque lo fue, después de esos meses

llenos de aventuras, sueños, caricias y miedos, después de esos días buenos y no tan buenos, pasó lo que nunca creí que pasaría, o tal vez sí, no lo sé, simplemente no creí que esto iba a acabar de forma tan repentina.

Las decisiones llegan de sorpresa, dijiste que esto no podía seguir porque solo nos dañábamos, no sé por qué decidiste simplemente ya no intentarlo, decidiste dejar de luchar y seguir sin mí. Es duro ver cómo pasamos a completos desconocidos. Siempre te extraño, a veces menos, a veces más. Hay días en los que quisiera salir por ti y decirte que te amo y que no he dejado de hacerlo ni un poco. Me tomó tiempo aceptar que fue lo mejor, tal vez no estábamos hechos para estar juntos, lo creí muchas veces pero ahora veo que estaba equivocada.

Y te odio por eso

Hoy miro al pasado y soy feliz por haber compartido contigo tantos momentos, unos no tan perfectos pero juntos al final de cuentas. Quiero darte las gracias porque a pesar de que ya no estamos juntos, eres la razón para que sea mejor persona y aprenda de cada uno de los errores que cometí en el pasado. Sé que en estos momentos no me necesitas como yo a ti pero quiero desearte lo mejor, no te odio ni guardo rencor, no podría después de tanto, siempre respetaré tu decisión de dejar ir a la persona que te amó tanto. Espero que los dos podemos encontrar a esa persona que buscamos, yo hoy empiezo a vivir, me libero de todo lo referente a ti, no porque no te quiera, sino porque es momento de empezar a vivir la vida que siempre quise, doy un paso adelante. Suerte amigo.