Realidades

1.4K 113 7
                                    


Capítulo 4

(Final)

-¿Qué haces acá?-preguntó extrañado.

-¿Por qué no le lo dijiste?. Luhan yo-suspiró-todos empezaron a atacarte y con mi presidencia...

-¿Prefieres a una sociedad, que ser humano con tu hijo?¡DIME!,¡¿Tú estás detrás de todo esto?!-se removió intentando atacarlo pero se vio sujeto por unas cuerdas que ataban sus muñecas.

-No me podía dar el lujo de que mancharas el trabajo por tus niñerías. Luhan no puedes ser gay.

-¡¿Qué?! Una vida, una maldita vida para que me digas que es lo que puedo y qué no. ¡Yo amo a ese chico!¡Yo lo...

-¡YA BASTA XIAO LUHAN!-acto seguido abofeteó a su hijo.-yo..Lu, lo sie...

-¿Y ahora?

Luhan alzó la mirada con su mejilla aún roja, le dolía no por el golpe sino porque su padre sea ahora el que esté detrás de su sufrimiento. Los padres querían que sus hijos sean felices, ¿no?. No podía entender por qué a su padre tanto le interesaba que Luhan sea o no así, era su hijo y aunque fuera difícil debía aceptarlo. ¡Era su sangre!.

-¿Disculpa?.

-Si. ¡Me alejaste de él!-dijo en un hilo de voz con leves sollozos.

-Y así seguirá, soy una persona de guardar apariencias.

-¡¿Cuándo DEMONIOS TE VOLVISTE ASÍ?!¡POR ESO MI MADRE TE ABANDONÓ!

Con un par de señas, dos hombres se le acercaron llevando un pañuelo a su boca y nariz. Una pequeña lágrima corrió por su mejilla, con la vista aún nublada vio cómo su padre iba perdiendo forma y desapareciendo.

Cuando se hubo despertado seguía en la misma habitación, con las manos y pies desatados, teñidos de un color rojizo. Se asombró al ver tanta calidez y penumbra en aquella habitación; hace poco pudo ver el horrible aspecto de un hombre que no parecía ser su padre pero lastimosamente, si lo era.

Se incorporó lentamente del sillón yendo hacia las cortinas que escondían los grandes ventanales. Grande fue su sorpresa cuando corrió una de ellas, tras de este no había absolutamente nada; estaba cerrada con grandes ladrillos que eran incapaz de moverse para permitir dejarle ver lo que estaba fuera.

Un poco extraño corrió hacia la perilla de la puerta, por la que horas antes habían entrado aquellos hombres junto a su padre, estaba cerrada. Forcejeó, tiró de ella, golpeo fuertemente pero eso era en vano. Su padre se las había ingeniado maravillosamente para que su pequeño no pudiera salir de allí.

Luhan empezaba a sentir una gran frustración, se sentía a punto de morir por el comportamiento de su padre. El señor Xiao nunca le había demostrado ese lado suyo, empezaba a dudar que aquella horrible persona fuera el hombre que le dio la vida (técnicamente apoyando en esto). Siempre le importó la felicidad de su familia, ahora dudaba enserio que su madre se haya ido porque quería. Ahora era cuando el pequeño Lu comenzaba a darse cuenta que quizá y después de todo su madre no haya sido tan mala como para irse sin razón y abandonarlo.

Empezaba a sentir un gran cansancio al luchar contra cualquier salida, sin duda su padre había previsto esto.

En su mente solo veía a una sola persona: Oh Sehun. Aquel hermoso joven que lo hizo sentir la mejor persona, le hizo sentir cosas inexplicables que ninguna otra le haría sentir nunca. En ese corto periodo de tiempo Luhan había conocido el verdadero amor y cariño. Ahora era cuando se lamentaba el haber sido tan irresponsable por querer a alguien sin asumir lo que le fuera a pasar.

Life WithinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora