Enamorame, si puedes... © (EDITANDO)

Capitulo 34: ¿Adrian?

-Pues que es todo lo contrario a lo que crees. -Murmuro haciéndome fruncir el ceño confundida. No veía lógica por ninguna parte así que seguí escuchando. -Estas saliendo con mi mejor amigo, y estoy enamorado de ti. Es difícil veros juntos y no sentir pinchazos en el corazón. Lo único que podía hacer era evitarte, para olvidarte o que al menos no me doliera pero era imposible si no parabas de enviarme mensajes y metiendo notitas en mi taquilla.

-¿Y lo tengo que pagar solo yo? A el no le evitabas. -Me queje.

-Porque no estoy enamorado de el. -Levanto los hombros.

-¿Vas a seguir evitándome? -Levante las cejas.

-Si. Solo quiero que dejes de intentar estar bien conmigo o buscarme. -Pidió mirándome.

-No voy a dejar de hacerlo. -Dije indignada.

El sonrió levemente. -Lo suponía, eres muy cabezona.

-Dani no... -Pedí mirándole triste.

-Lo siento Emily. -Suspiro caminando hacia atrás antes de girarse e irse.

Dejándome allí, confundida, triste, indignada, con un montón de sentimientos mezclados. Camine por los pasillos  saliendo del insti encontrándome con Alex que me esperaba con un oso de peluche gigante entre sus brazos. Sonrió ampliamente al verme y corrí hacia el.

-¿Y esto? -Pregunte sorprendida.

-Quería hacerte un regalo por navidad. -Me entrego el peluche. -Es para ti, para que te abrace cuando yo no pueda hacerlo.

-¡Que bonito! No hacia falta. -Sonrió abrazando al suave y enorme peluche. Poco mas y seria mas grande que yo. -Es genial.

-Como tu. -Acaricio mi mejilla acercándome a sus labios y juntandolos en un dulce y lento beso. Haciendo que mi corazón diera saltitos y mi cuerpo se estremeciera mientras le seguía el beso. El me besaba con lentitud saboreando mis labios y mordiéndolo con suavidad al separarnos.

-¿Ese era el recado que tenias que hacer? -Pregunte agradecida. No solían hacer cosas tan bonitas por mi.

-Exacto. Eres lo mas importante para mi. -Susurro.

Rodeo mi hombro con su brazo empezando a caminar hacia mi casa mientras yo abrazaba a mi nuevo peluche. -Le voy a llamar Jimmy. -Comente sonriente apoyando mi cabeza en su hombro.

-¿Jimmy? -Rió Alex. Como me encantaba verle sonreír.

-Claro, ¿no te gusta? -Sonreí mirándole ilusionada.

-Si, esta bien. Si a ti te gusta, a mi me gusta. -Rió dándome un besito en la cabeza.

Caminamos hacia mi casa hablando de un montón de cosas, las navidades, de Jimmy, todo lo que haríamos en estas vacaciones... Ya estaban poniendo las luces de navidad por las calles, en los arboles, y poniendo en la plaza principal el árbol de navidad. Se notaba en el ambiente que Santa Claus estaba cada vez mas cerca de llegar. Cuando llegamos a mi calle vimos a una familia mudándose a la casa de al lado de la mía. No sabia ni siquiera que esa casa estuviera en venta o vacía. Nosotros seguimos con nuestra conversación y yo seguía sin soltar al suave de Jimmy cuando oímos una voz llamándome.

-¿Emily? -Oí que decía una voz algo familiar.

Me gire mirando hacia el jardín de al lado de donde provenía la voz. -¿Adrian? ¿Que haces aquí? -Reí caminando hacia el. El chico que conocí en el tren.

El me abrazo fuertemente alegre de verme al igual que yo a el. -Me acabo de mudar.

-Yo vivo en al casa de al lado. -Informe ilusionada separándonos. -Que alegría verte, creí que no volveríamos a vernos.