Its Just A Game

#36. Pensamientos y "la noche anterior".

-Mason... lo siento.

-¿Sientes qué? –Pregunté un poco frustrado. Solo se encogió de hombros levemente-. ¿Qué es lo que sientes... o lamentas? ¿No poder besarme? Porque estoy seguro que tú también quieres hacerlo, quieres besarme.

-No. Lo siento por ti. Yo no quiero besarte –dijo seca y nada más salió de la habitación cerrando la puerta-.

Reí sin gracia y me volví a acostar.

| Taylor |

De la manera en que lo dije, hasta yo casi me lo creo. Claro que quería besarlo, pero no podía siquiera permitirme el decírselo.

Me fui a lavar mis dientes y luego a dormir aunque no pude, solo pensaba. Pensaba en:

¿Qué mierda acabo de hacer?

| Mason | Nuevamente en la playa.

-Nosotros iremos. ¿Cuidas las cosas?

-Claro –asentí y puse mis brazos detrás de mi cabeza mirando los árboles que me daban sombra, ella se alejó al agua-.

No habían muchas personas cerca, todas estaban en el agua y muy pocas fuera. No había nada de ruido, lo único que se escuchaba, eran las olas y las palmeras moverse un poco. Eso me relajaba. Las playas de manhattan no eran así, siempre estaban llenas de gente y nunca había sombras libres. Hace mucho que no me sentía así de relajado.

Pero claro, mi vida no me permite estos lujos. Siempre llega alguien a arruinarlo. Ryan, en este caso –y en muchos otros-.

-¿Sabes dónde está mi teléfono? –Preguntó acercándose con el cabello mojado, de hecho todo él estaba mojado, pero su cabello goteaba-.

-¿Acaso crees que te hice el inventario? –Dije sin dejar de mirar las copas de las palmeras-.

-Solo preguntaba, idiota –rodé los ojos sin darle importancia-. Deja de hacerte el interesante.

-¿Qué dices? –Fruncí el ceño-.

-Tú sabes. El viaje lo hicimos por Zoe, no por ti, que parte de tu familia viva aquí no significa que todo el mundo tenga que girar en torno a ti. El mundo gira alrededor del sol. Y bueno... Kath me cae muy bien, pero tú eres el problema.

-¿Y a mí... qué me importa? –Me incorporé y me senté-. ¿Piensas que me importa lo que pienses sobre mí? ¿Crees que me hago el interesante? Talvez seas tú y no te das cuenta.

-Dime una sola razón del porqué sería yo.

-Taylor -solté sin pensarlo-.

-¿A esto viene todo? ¿A ella? Ella es MÍ novia y si te molesta tanto consíguete una y aléjate de ella. ¿Entendido? –Me puse en pie, quedando un poco más alto que el, pero a una distancia considerable-.

(°)-Al parecer creo que no entendí bien. Yo no me alejaré de ella para dejarla con un imbécil como tú.

-¿Y tú que eres, eh? ¿Un santo? –Hizo una pausa y miró a la arena, enfadado-. Si tu madre no hubiera muerto en ese accidente de auto, se hubiera matado ella por tener un hijo como tú.

Oh... no le va a ir bien –pensé-.

En menos de lo que había pensado, él ya estaba en el suelo sosteniéndose la nariz y quejándose del dolor, me arrodillé y le pegué en las costillas. Iba a seguir golpeándolo pero me contuve. Solo le patee arena y me levanté.

-No te metas con mi madre ¿Entendido? –Imité su acento canadiense-.

-¿¡Qué demonios te pasa!? –Llegó Taylor con el ceño fruncido, ayudó a Ryan a levantarse y me miró furiosa-.

-¿Le contaste? –No estaba enojado con ella, o al menos intentaba no estarlo. Sí me decepcionó un poco, yo se lo conté con toda confianza-.

-Sí, él me preguntó –se tranquilizó un poco, sabiendo a lo que venía esto-.

Miré el suelo y reí sin gracia.

-¿Te cuento algo? Eras la única persona además de Cameron y un par de amigos, que lo sabía. Pero ya no, olvídalo –pausé-. No importa –dije seco-.

Me sentía mal. Algo no estaba bien.

Caminé a la par de donde estaba mi toalla azul, hacia una tabla de surf que había alquilado por el día. Me agaché para tomarla y me paralicé al escuchar mi nombre. Pero reaccioné y tomé la tabla. La ignoré y empecé a caminar.

-¿Ahora me vas a ignorar?

-Eso lo decidiste tú –le respondí sin mirarla-.

Troté a la orilla y miré a los chicos que seguían dentro. Caminé un poco más y ahora estando más lejos de ellos. Me adentré al agua, que aun haciendo calor estaba muy fría, como siempre. Empecé dar brazadas hasta llegar muy lejos de la orilla. Me sentía abrumado de nuevo, no con esa paz que tuve hace unos cinco minutos.

Quería montar olas, y casi no había, para mi muy mala suerte. Pero logré montar unas pequeñas, luego hubo una más grande. La logré montar.

Nadé y nadé con la corriente y luego me puse de pie en la tabla, hice tan solo un par de trucos porque no recordaba muchos, además no tenía práctica.

La ola fue tan perfecta que pude montar el túnel. Un lugar hermoso y pacífico. Tanto así, que me recordaba a mi madre. Me concentré en mis pies y en mi equilibrio para salir de ahí. Al lograrlo, volví a bajar de la tabla y me concentré en nada en particular. En pensar, prácticamente. Me sentía un poco desilusionado, decepcionado y talvez triste.

Y lo peor era que no sabía por qué.

Talvez fue porque ahora alguien más lo sabía. Talvez porque era él ese "alguien más". O talvez fue porque fue ella quien lo dijo. Porque pensé que talvez en ella, la persona que tanto me gusta, no le iba a contar.

Y sí, ahora descubrí la razón. Estoy enamorado.

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Un nuevo capítulo, espero que les haya gustado. 

Me disculpo por no actualizar tan seguido, pero me gustaría que votaran más, así me impulsan a subir aun más, como en "Papá de Repuesto". 

Y bueno, gracias por leer :) Las quiero. :)