4. Casa de Stiles.

En başından başla
                                    

- De eso es lo que quería hablarte-...

- ¿¡Qué?! ¡¿Qué sucede?! ¿Acaso... - Tuve que alejar un poco el celular al escuchar sus gritos. Estaba eufórico. - ¡¿Acaso estas con un espíritu o algo como eso?! No me sorprendería que existieran, oh mierda... oh mierda... 

- ¡Stiles deja de decir estupideces! ¡Claro que no estoy con ningún espíritus, dios! - Le hablé indignado, era un idiota cuando quería. Luego pregunté confundido. - Un momento ¿por qué pensaste en espíritus?

- ¿No es un espíritu? Oh gracias a dios... - Murmuró con alivio. 

- ¿Entonces, te dan miedo los espíritus? Eso no lo sabía. 

- Claro que no. Solo le temo a los espíritus... ¿malvados? Eso es razonable supongo. - Asentí aunque sé que no me veía. - ¡Oye espera! ¡Nos desviamos del tema! ¿Quién viene contigo? 

Hay dos posibilidades sobre lo que le iba a decir: que me adore por llevar a la chica de la cuál está enamorado, a su casa o... que quiera arrancarme la garganta por llevar a la chica de la cuál está enamorado. 

 Suspiré y luego de volver a acercar el celular, en verdad Stiles no paraba de gritar, hablé con inocencia.

Con Stiles nunca se sabe qué esperar. 

- Bianca. Bianca está conmigo y quiere ir a tu casa. 

El otro lado de la línea quedó en silencio por un largo tiempo, tanto que me obligó a ver si no había cortado la llamada. 

- ¿Stiles? ¿Stiles, estas ahí? ¿Stiles? Mi celular dice que la llamada no se cortó pero... un momento, escucho una respiración. ¿Stiles, estás bien? 

Una pequeña risa sofocada, y algo falsa, resonó en mis oídos luego de unos segundos. 

- Oh, perdona Scott. Creí haber escucha-cha-do... creí haber escuchado m-mal. Escuché... escuché... ¿Bianca viene contigo? ¿Y quiere verme? ¿A mi? - Rió un poco más nervioso. 

- En realidad dije que quiere venir conmigo a tu casa, es que no quiere ir sola a la nuestra. De hecho yo también lo prefiero, no falta mucho para que anochezca y no quiero que vaya sola. Pero como no voy a casa ahora porque me llamaste, se ve obligada a acompañarme... entonces, ¿puede? 

Un silencio resonó al otro lado de la línea y suspiré cansado. 

- Stiles, no me obligues a cortarte. Si no quieres que vaya podemos hablar otro día o en la fiesta de esta noche-... 

- ¡No, tenemos que hablar ahora mismo, Scott! ¡Esto es importante, en serio! - Me interrumpió con exasperación.

- ¿Entonces vamos o no? 

- De acuerdo, bien, bien, vengan... - Tragó duro y ruidosamente antes de continuar. - ambos. ¡Oh por dios...! Bianca, va a venir a mi casa... Bianca va a venir a verme.... diablos... - Gimió y me recordó a un perrito llorando. 

- ¿Stiles, estás llorando? 

- No. Sí. Puede. No, más bien no, no tengo lágrimas en los ojos. 

- ¿Qué rayos haces, Stiles? - Murmuré frotándome el rostro con frustración. Stiles era una carga pesada a veces, pero por algo soy su mejor amigo, para soportarle. 

- ¡Solo estoy emocionado! ¿No puedo estarlo? ¡Ella va a venir a verme! 

- No va a ir a verte, va a esperarme mientras tu me dices que es tan importante. Espero que sea rápido, por cierto, ambos tenemos que arreglarnos para la fiesta. 

Impact. {Stiles Stilinski} [Cancelada]Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin