Texting - One Direction

Capítulo 4 "Niños"

-Y... Lou ¿ese milagro que vamos a ir al parque? -le digo mientras cierro la puerta de mi casa.

-Tranquilo Bro, la verdad no sé, sólo se me ocurrió -mete las manos al bolsillo del pantalón -podemos hablar de cosas del pasado, o solo ver si hay chicas lindas por el vecindario -alza una ceja.

-El mismo Tommo de siempre, esta bien, ir al parque me hará sentir como un pequeño niño inocente -sonrió mientras agacho mi cabeza.

-Jamás dejarás de ser el Zayn que conocí desde el inicio, vamos, el que llegue al último es porque es el más feo -grita la última parte mientras se lanza a correr, yo sólo lo imito.

-Este será un día grandioso -susurro -te alcanzaré Lou y me las pagaras niño tramposo -le grito mientras el lanza una carcajada corta.

-Ni en tus sueños Zayn -se voltea y me saca la lengua sin dejar de correr.

Sólo faltan dos cuadras y Louis lleva la delantera por mucho. Convivir con él es muy bueno, siempre me alegra el día.
Louis para en seco a tan solo una cuadra del parque.

-Yo gané, tú pierdes -me mira a los ojos -yo soy guapo y tú aceptas con esto que siempre fuiste feo -Alza los brazos y junta sus manos, haciendo un ademán de agradecimiento -tengo que agradecer a mi entrenador, mi perro, sin él no hubiera podido ganar, también agradezco a Niall, si jamás hubiera robado sus galletas no hubiera podido saber correr tan rápido -se quita una lágrima falsa.

-Pobre Niall, siempre compra su paquete de galletas tú vas a su alacena y le dejas cinco de treinta galletas que contiene el paquete -suelto una leve risa.

-Lo dice la persona que me ayudo a comer todas esas galletas.

-Bueno, es que, compra unas deliciosas galletas pero por nuestra culpa ahora le puso candado a su alacena.

-Cierto, pero Horan me va a prestar sus llaves cuando yo lo desee -hace comillas con sus dedos en la palabra prestar.

-Eres mi ídolo -él sonríe -pero ¿por qué te detuviste antes de llegar al parque?

-Porque alcance a ver que ya están haya Harry y Niall y si nos ven correr nos van a empezar a decir inmaduros y varias cosas que ya sabes o nos van a regañar porque pensarían que nos vienen siguiendo.

-Muy cierto, esta bien, ahora hay que llegar para platicar con ellos, haber que pasa -le toco el hombro y el asiente.

-Y después nuestros merecidos tragos ¿hasta ponernos ebrios? -sonríe.

-Hasta ponernos ebrios y sin saber de nada.

-Bien, ahora vallamos que este día pasará lento y de eso me encargo yo.

Nos dirigimos hacia ellos, mientras le preguntaba a Louis a que bar nos iríamos. Ellos sonrieron al vernos y se levantaron para saludar. Como dijo Louis, este día pasaría lento y eso espero.