AML (Camren)

Capítulo 9

Lauren

Camila Cabello podía dormirse con una facilidad increíble, lo que resultaba difícil de conseguir era que se despertase.

No puedo culparla, sé que dormir es algo que todos necesitamos y comprendo que esté cansada pero no puedo explicarme cómo es que logra seguir en ese estado a pesar de lo alto del volumen de la música. Ni siquiera cuando Mani -cabe destacar que se encontraba ya bastante bebida- vino a buscarme con la intención de animarme a jugar un poco con el resto de los invitados.

Luego vino Dinah, uniéndose a las peticiones de la morena que parecía ser incluso su mejor amiga en ese momento. No podía creer que Camila no se despertara ni cuando Ally entró a la habitación, las tres chicas saltando prácticamente sobre la latina, que ahora sigue durmiendo en mis brazos, y gritando con el objetivo de levantarla pero obteniendo muy malos resultados.

Cuando finalmente se dieron por vencidas y salieron de la habitación opté por dormir también un poco, aprovechando la comodidad que sentía al tener por lo menos medio cuerpo de Cabello sobre mí.

Aquel "un poco" se convirtió en una hora, y seguramente habría continuado dormida si no hubiese sido por mi celular que comenzó a sonar como loco. Cuando logré contestar a la llamada de mi hermano Camila giró su cuerpo, gruñendo en desacuerdo cuando me moví para poder hablar sin molestarle.

Chris me informó que mi mamá se había dado cuenta de que no estaba y que él intentó hacer que entrase en razón, argumentando que yo debía despejar mi mente de todas las cosas que ocurrieron en los últimos días. También me dijo que sus intentos no dieron resultados y que ahora hasta nuestro papá estaba planeando mi castigo.

Si era honesta, no me importaba en absoluto que tuviese que quedarme en casa por el resto de mi vida, había logrado tener a una Camila dormida contra mi pecho y estoy segura de que eso ha valido la pena.

Luego de terminar la llamada, Keana vino a buscarme, pidiendo que bajase a bailar un rato con ella, diciendo de igual forma que la latina en la cama se encontraría más segura que nunca en la habitación y que nosotras teníamos bastante sin pasar el tiempo.

Mi mejor amiga tenía razón, las últimas semanas nos habíamos visto muy poco, incluso podía asegurar que ella compartió más tiempo con Harry que conmigo este mes y la extrañaba de una manera inexplicable.

Estaba en un verdadero dilema, con la chica de ojos chocolate durmiendo de espaldas a mí y con Keana en la puerta de la habitación.

No fue sencillo, pero ahora estoy aquí; abrazando a Camila por detrás, apoyando mi barbilla en su hombro, oliendo su cabello sin mucha dificultad y disfrutando del contacto de sus dedos entrelazados con los míos.

- Camila. - Susurro contra su oído, intentando hacer que despierte de una buena vez. Tal vez decidí en primera instancia quedarme a su lado pero Keana me ha hecho prometerle que bajaré en unos minutos y sé que no es una persona muy paciente. - Camila. - Repito al no obtener respuesta.

Bufo un poco y levanto un poco mi cuerpo del colchón, separándome por consecuencia de la latina quien gruñe ante la acción. Sonrío mientras la observo, ella apretando mi mano y jalando ésta notablemente con la intención de hacerme volver a su lado.

- Leeern, quiero dormir. - Se queja, su voz denotando su estado al salir bastante rasposa.

Se mantiene con los ojos cerrados y continua su misión de hacerme volver jalando mi mano con más fuerza que antes, rio levemente al notar sus intentos pero ella no parece encontrar todo esto divertido.

- Puedes dormir mientras no estoy, Camila. - Respondo y pongo resistencia para no volver a caer a su lado. No porque me moleste sino porque sé que si sujeto su cuerpo otra vez no querré irme más y le he prometido a Keana alcanzarla en un rato.