nada en el mundo me haría más feliz...

38 1 0
                                    


-No, no es necesario, además que eres un desconocido para mí y no sería lo correcto.
-Oh, cierto, no me he presentado, - contesta el chico sorprendido-. Perdón, soy un poco distraído, me llamo William pero me dicen Will y no soy un desconocido, llevo algunos años observándote por que te me haces una persona interesante y ahora que te veo en problemas, no puedo evitar perderme la oportunidad de hablar contigo y ayudarte. Así que por favor, déjame ayudarte. Tengo un cuarto preparado para ti por si algún día te llegaría a conocer en persona, aunque yo esperaba que llegaras a mi casa como mi esposa, me conformo con esto.
-¿Qué? ¿Esposa? Estás loco.
Salgo corriendo del lugar y me tropiezo. Me desmayo. Cuando despierto, me encuentro en un lindo cuarto color rosa pastel. Al fondo se escucha música clásica y huele delicioso.
Salgo del cuarto y me encuentro en lo que parece ser una cocina.
-Oh, hola. Qué bueno que despertaste, mientras dormías fui al colegio y ya estas inscrita. Mañana empiezas, este es tu uniforme.
-Grr-gra-gracias. -contesto confundida-. ¿Will..?
-Sí, que pasa Alice?
-¿Tú me deseas?
El me mira como si intentara descifrar mis palabras y al final sólo da un pequeño suspiro.
-Mira, te seré sincero. Hace casi cuatro años, yo andaba en la calle destrozado. Acababa de perder a toda mi familia en un incendio y llevaba días en la calle deambulando, nada me importaba, parecía un vagabundo, pero cuando tu llegaste me diste un emparedado y una sonrisa. La sonrisa más hermosa que jamás había visto y me dijiste "tranquilo, vendrán tiempos mejores". Tal vez para ti eso no fue algo fuera de lo normal pero para mí desde ese día mi vida cambio. Decidí cambiar, regrese a casa, termine mis estudios y cada vez que se me da la oportunidad ayudó a algún necesitado. Así que la respuesta a tu pregunta es no, no te deseo, solo te anhelo, te idolatro, te sueño, te amo y haré todo lo posible por volver a ver esa gran sonrisa en ti cueste lo que me cueste... lo que si nunca te haré es hacerte daño, te lo prometo.
Yo no puedo evitar que se me salgan las lágrimas pobre chico todo lo que paso y no puedo creer que una simple acción tan cotidiana haya cambiado su vida, además que él no me hará daño. Me quedare aquí. Abro la boca, mi rostro está lleno de lágrimas
-Will, ¿aún sigue en pie tu propuesta de que viva contigo?
Él se seca una lágrima que le salió y contesta: -nada en el mundo me haría más feliz.

Despues del hospitalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora