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Desde que tengo trece años o tal vez más he deseado un tatuaje, cuando veo a las personas con esos hermosos diseños y colores en su piel las ganas aumentan cada vez más, sin embargo mis padres no aceptan tal idea pero pienso que tal vez cuando sea mayor de edad pueda hacérmelo, y como soy una persona obediente «Cosa que a veces detesto» le pregunto a mis padres, como era de esperarse recibo un “No te tatuarás mientras vivas bajo nuestro techo, podrás hacerlo cuando seas totalmente independiente y vivas sola”.

Me esperaba una respuesta así, agotada de siempre hacer lo que mis padres quieren me encierro en mi habitación y me coloco los audífonos, me tumbo en la cama y aterrizo en las acolchadas y suaves almohadas, la música de mi banda favorita comienza a sonar e inunda mis oídos mientras tengo la mirada perdida en el techo de la habitación y mis manos descansan tranquilamente en mi abdómen, estoy en una especie de trance cuando de repente escucho que en la canción mencionan algo sobre un tatuaje secreto, inmediatamente se me enciende la luz y se me ocurre una fantástica idea; y lo mejor de todo es que mis padres jamás se enterarán.

De un salto salgo de la cama y voy a mi armario, de allí saco unos ajustados pantalones negros, una camisa blanca, un suéter rosa claro con estampado floreal, mis converse rosa claro y me cambio; no creo que salir por todo Londres con sudadera y pantalón de chandal sea buena idea, una vez cambiada me cepillo un poco el cabello y me hago una alta coleta de caballo, me aplico máscara para pestañas, brillo labial y después de unos minutos tomo mi teléfono y lo guardo en el bolsillo de mi pantalón, salgo de la habitación y bajo corriendo las escaleras.

-Mamá iré a casa de Ellie, te veo luego -aviso mientras tomo el pomo de la puerta principal para salir.

-Está bien, cuídate -grita desde la cocina y yo salgo rápidamente antes de que me diga algo más.

Ellie Wells y yo somos mejores amigas desde la infancia por lo que mi madre la conoce lo suficiente y me deja hacer cualquier cosa con ella. En el camino saco mi teléfono y le marco a Ellie.

*¿Diga? -contesta con la voz soñolienta y yo reprimo una carcajada por haberla despertado*

*Ellie, Ellie, Ellie, ¿A que no adivinas? -chillo por la línea y pego pequeños saltitos en el camino*

*¡Skylar, amiga de mi alma, te he dicho miles de veces QUE NO ME GRITES EN EL PUTO TELÉFONO!*

*Parece que alguien no está de buen humor*

*Me despertaste, tú también reaccionas igual cuando te despierto de tu preciado sueño -se excusa mi rubia amiga*

*Bueno bueno al punto, te llamaba para contarte que me haré un tatuaje*

Aparto el teléfono de mi oreja aguardando por los gritos de mi mejor amiga pero nunca llegan, sólo hay un silencio profundo y me pregunto si todavía sigue en la línea.

*¿Ellie sigues ahí?*

*¡¿QUÉ?! ¿Cómo? ¿Tus padres te dieron permiso? Pero si acordamos que nos haríamos nuestro primer tatuaje juntas, maldita zorra*

Y ahí está mi mejor amiga.

*Obviamente no idiota, voy a tatuarme sin que ellos se enteren*

*¿Y cómo vas a hacer para que no sepan?*

*Fácil, un tatuaje secreto, por eso te he llamado necesito que me ayudes a pensar en un lugar de mi cuerpo que mis padres jamás verían*

*Bien... ¿Qué te parece atrás de la oreja?*

*No creo que sea el mejor lugar. ¿Te acuerdas cuando me hiciste un tatuaje de mentira atrás de la oreja con un bolígrafo y mi madre lo notó apenas me vio?*

*Tienes razón, aunque te habría quedado perfecto uno allí. ¿Y en la cadera o la espalda?*

*Y todavía lo quiero pero me lo haré más adelante y no allí tampoco, sin duda mis padres me verían el tatuaje cuando usara traje de baño*

*Deberías hacerte uno en el trasero y ya está -bromea -Piensa rápido antes de que te arrepientas Sky*

*¿Sabes? Uno en el trasero no estaría mal*

*¡Me estás jodiendo! ¿Me quieres decir que vas a dejar que te vea el culo un desconocido?*

*No es para tanto Ellie, además sólo me verá una vez y después de eso nunca más*

*Eres tan arriesgada... ¿Y qué si es un viejo que se masturba viendo traseros? ¿Dejarás que te vea de todas formas?*

*Estás muy paranoíca, no será un viejo y no follaremos, sólo me haré el maldito tatuaje y listo*

*Prométeme que cuando te lo hagas seré la primera en verlo*

*Lo juro, de todas formas hoy tengo que ir a tu casa porque le dije a mi madre que estaría contigo*

*Un momento... ¿Eso quiere decir que vas a ir a tatuarte ya? -eleva el tono y yo muerdo mi labio inferior*

*De hecho en este mismo momento voy a entrar en la tienda, te llamo luego, te amo adiós*

Me despido y corto la llamada, si no lo hacía nunca terminaríamos de hablar, guardo el teléfono de nuevo en mi bolsillo y tomo un largo respiro; mi mejor amigo Jace un día me dijo que él venía a hacerse sus tatuajes aquí y que cuando quisiera un tatuaje fabuloso viniera aquí así que con la palma de mi mano empujo la puerta de vidrio y esta cede de inmediato haciendo sonar una campanilla a su paso, ahora tengo toda la atención de las personas sobre mí, mi mirada va hacia el mostrador en donde hay una chica con cabello rosa, obviamente con tatuajes en su piel y algunos piercings; digna de trabajar aquí. Me acerco al mostrador y la chica me recibe con una gran sonrisa.

-Buenos días -saludo y ella me mira atentamente -Vengo por un tatuaje.

-Buenos días, ¿Tiene cita previa? -pregunta y frunzo el ceño.

Nadie dijo nada sobre una cita.

-No sabía que había que sacar una cita -admito y arrugo el gesto.

-No se preocupe le buscaré un lugar -dice mientras teclea en su computadora -Es la primera vez que vienes por acá ¿Cierto? -me mira de pies a cabeza.

Me entra el pánico. ¿Y si sospecha que soy menor de edad? No quiero ni pensar en eso, asiento rápidamente y ella sonríe.

-Tenía que ser porque nunca te había visto, además te ves demasiado fresa para estar en un lugar como este ¿Por qué quieres hacerte un tatuaje? -inquiere muy interesada.

Un alivio recorre todo mi cuerpo y expulso todo el aire que no sabía que estaba conteniendo, por suerte no sospecha nada.

-Bueno todos deberían tener uno ¿No? Me fascina la idea de compartir mis sentimientos y emociones mediante un tatuaje, esta es mi primera vez y créeme que estoy nerviosa pero es más el deseo de contar con una creación totalmente única en mi piel ¿Sabes?

-Eres simpática, apenas te conozco y ya me caes de maravilla -carcajea mientras le da vueltas al piercing de su nariz -Parece ser que es tu día de suerte, tengo un lugar libre para hoy -me guiña un ojo.

-Muchas muchas gracias, chica -le dedico una sonrisa de agradecimiento.

-Lila, soy Lila, si quieres puedes pagar cuando salgas...

-Soy Skylar y mucho gusto de conocerte Lila -canturreo y ella asiente.

-Es todo un placer, puedes esperar en los asientos de allá -señala los asientos de cuero negro -En unos minutos te atienden.

Asiento y me voy a sentar, a mi lado hay un chico rubio, tatuado y con varias cadenas en sus pantalones, noto que me mira por el rabillo del ojo y deja escapar una carcajada. ¿Pero qué tienen todos conmigo hoy que se burlan? Miro alrededor y lo comprendo; es por mi atuendo y mi aspecto, las personas que están aquí no suelen llevar ropa tan pintoresca como la mía, ignoro el hecho de que tengo varias miradas posándose sobre mí y trato de relajarme.

Nada, absolutamente nada va a hacer que yo salga de aquí sin mi preciado tatuaje.

Tattoo |Z.M|Where stories live. Discover now