Apolo y Hermes. ¿Buena combinación? (Crónicas Del Campamento Mestizo #1)

Capítulo 16.

Hazel's POV

Espoleo a Arion hasta un claro de Long Island. El caballo inmortal frena en seco. Frank, mi novio, y yo nos bajamos del caballo. Están todos. Nico me abraza.

− Que bien que ya estais aquí.− dice.

Hacemos una ronda de abrazos. Todos mis amigos estan ahí.

− El Campamento sigue igual, ¿verdad?− dice Frank.

− Sobre eso...− empieza a decir Nico. Alguien viene corriendo hacia nosotros

Es una cchica de pelo castaño, largo y ojos del mismo color. Se para y mira hacia atras. Se esconde detrás del caballo.

− Vosotros no me habeis visto.− dice entre jadeos. En ese mismo instante alguien más se nos acerca. Es el doble de Percy.

− Percy, ¿has visto a Elena?− le pregunta.

− Está detrás del caballo.− le dice Leo.

Elena sale corriendo.

− ELFO TRAIDOR.− grita. El chico sale corriendo detras de la chica.− PREPARATE PARA MORIR.

− ¿Va en serio?− le pregunto a Nico.

− A su manera.− dice.− Vamos hermanita.

− ¿Por que corren?− le pregunta Frank. Una voz conocida nos responde.

− Se ha despertado hace cinco minutos y según ella esta debil...− dice. Se acerca. Es Mia.

− Pues yo no veo que esté debil.− comento.

− Es muy cabezota.− dice.− Voy a ayudar a Pablo. Luego nos vemos.

Echa a correr en la misma dirección.

− Seguro que nos teneis muchas cosas que contar, pero el viaje ha sido largo.− le digo a mi hermano.

− Yo me llevo al caballo.− dice Percy. El caballo relincha.− Perdona, Arion. El Sr. D siempre se olvida de mi nombre y no me pongo a insultarle.

Nos reímos. Percy enendía a los caballos porque su padre los había creado. Percy se lleva a mi caballo.

Nico nos guia hasta la Cabaña de Hades.

− Una advertencia. No enfadeis a Elena.− nos dice mientras desempacamos.

− ¿Porque?¿tiene un poder capaz de destruir el mundo?− le pregunta Frank con sarcasmo.

− Es en serio.− nos dice.− Es una amante de las bromas.

− Como los Stoll.− comento.

− Una cosa son los Stoll y otra cosa es Elena.− dice Nico. Oimos a gente gritar. Vemos a esa chica correr delante nuestra, pero el que le sigue es Leo.

− Leo, ¿que pasa?− le pregunta Frank. Leo se para.

− Elena me ha manipulado el cinturon de las herramientas.− dice. Lleva una cuerda para que no se le caigan los pantalones.− Se ha quedado una pieza para poder arreglarlo.

Sale corriendo detras de Elena.

− LEO, SANTA ME ACABA DE ENVIAR UN MENSAJE DICE QUE TE ESTÁ BUSCANDO.− le grita.− SI NOS DAMOS PRISA LE COJEMOS

La gente se ríe.

− Ya entiendo a que viene esa adverencia.− le digo a mi hermano con una sonrisa. Esa niña tiene pinta de ser muy simpatica.

− Yo me voy a dormir.− dice Frank.

− Yo tambien.− le digo.

****

Es la hora de la cena y ya estamos más descansados. En el comedor, Frank y yo nos sentamos con Percy y los demás. Al cabo de un rato, viene Leo.

− ¿Te ha gastado una broma?− le pregunta Percy. Asiente.

− Se ha vengado por lo del chivatazo.− le responde.

− Tiene pinta de ser muy simpatica.− comenta Frank.

− Y lo es.− le dice Leo.− Pero le va las bromas como a sus hermanos, los Stoll.

− Se ve.− digo. Annabeth se levanta sin decirnos nada. Se acerca a la mesa de Hermes y le dice algo a Elena. A lo que ella asiente y le dice algo con una gran sonrisa.

− ¿Que le has dicho?− le pregunta Percy.

− Solo quería saber como se encontraba despues de lo de ayer.− le responde. Veo como Elena se levanta y se acerca a Quirón. Le pregunta algo a lo que este asiente y le dice algo más. Se sienta en su mesa.

− Para darles la bienvenida a Hazel y a Frank vamos a organizar una hoguera después de cenar.− dice.

− Que honor.− me dice Jason.

− Callate Grace.− le digo. Me sonríe.

Terminamos de cenar. Vamos a la cabaña a coger algo de abrigo.

Vamos a la hoguera. Todo el Campamento está allí.

− Dos cosas.− se oye la voz de Elena.− La primera: estoy muy bien y gracias por preocuparos por mi.

Todos se ríen.

− La segunda: a insistencia de muchos voy a tocar algunas canciones con la guitarra.− dice mirando a Annabeth. Frank y yo nos ponemos en primera fila.− Pero yo lo voy a hacer divertido. Toco una melodía y, si la reconoceis, cantais.

− ¿Y si no?− le pregunto. Me mira con unos ojos castaños muy intensos.

− No os preocupeis, si no la tarareo.− nos dice. Coje aire. Y empieza a tocar.

Editado el 16/9/16