Danger [Jimin-BTS]

Capitulo 11. Primera Cita.

POV Natalia

Sábado por la mañana, me sentía nerviosa pero feliz, hoy sería mi primera cita con Jimin, genial ahora me siento como niña de secundaria cuando su novio le toma la mano por primera vez, definitivamente esta no soy yo, incluso estaba nerviosa por no saber que ponerme, pero recordé que el vestido de la última vez se lo había quedado Michelle y tendría que verla si quería obtenerlo, bajé por las escaleras y me encontré con mi madre en la mesa de la cocina.

-¿A dónde vas?

-Voy a casa de Michelle.

-¿Saldrás esta noche?

-Tengo una cita...

-¿Con tu novio?

-Sí, con Jimin, vendrá a recogerme.

-Ese chico es muy guapo, me alegra de que estés retomando el buen camino.

No respondí nada, solo me fui, la verdad es que jamás había mantenido una conexión con ella y no me importaba, que no venga después de 18 años a querer hacerse la madre protectora, llegue a la casa de Michelle y pude observarla en el jardín junto al mejor amigo de Jimin, él cuál no conocía su nombre, se notaba que estaban discutiendo, me quede algo escondida detrás de un árbol y se podía escuchar levemente lo que hablaban.

-Por favor Mich, debes entender...

-¿Qué quieres que entienda?, lo que me dices no es verdad.

-¿Por qué te mentiría?

-Si no te gusta que este con Jimin es tu problema.

Jungkook la sujeto por los hombros y se acercó demasiado a su cuerpo.

-Entiende Mich... yo solo quiero verte feliz.

-Y mi felicidad es junto a Jimin, ¡ENTIENDELO!

Jungkook la tenía aun sujetada por ambos brazos y la besó, mi boca se abrió enormemente, pero lo que logró sorprenderme es que mi amiga se haya quedado quieta, sin hacer ningún esfuerzo, disfrutando el beso, lo aparto después arreglándose el cabello y la ropa.

-Vete Jungkook, esto que acaba de pasar jamás sucedió.

Jungkook camino hacia la salida y yo camine rápidamente detrás de 3 árboles continuos para que no me viera, lo vi marcharse en su auto Mercedes Benz S Class hero de color blanco, camine hacia la entrada y pude ver a Michelle sentada en las escaleras de su pórtico.

-¡Hola enana!

-Hola Nat.

Me dedico una sonrisa y la abrace.

-Disculpa por venir sin avisar, pero...

-¿Pero?

-Venia por el vestido negro que compramos la otra vez.

-Ah claro, está en mi habitación, vamos.

Caminamos hacía su habitación, la sentía algo molesta, no sabía si era por mi presencia o por lo que había pasado con Jungkook, me lo entrego y salimos de la casa.

-¿Vas de fiesta?

-Hoseok me invito a cenar...

-¿Qué?

-Quiere hacer bien las cosas.

-Después de tres años de acostarte con él.

-Nunca es tarde, además... es un buen chico.

-Me cuentas después como te fue.

-Claro ¿y tú que harás?

-Nada, estoy peleada con Jimin, así que me quedare en casa.

-Deben resolverlo.

-Ayer le mande un mensaje pero... no me contesto.

-Ya se le pasara, déjalo.

-Bueno Nat, me tengo que ir.

Sé que Michelle se sentía mal, lo note en su mirada y mi culpabilidad se hacía más grande, fui a casa y me recosté la cita sería hasta la noche así que no habría problema, no tenía apuro, pensé en lo que había visto, tendría que contarle a Jimin, después de todo él se enteraría y no tendría que enojarse si engaña a su novia conmigo, probablemente así tomaría más fácil la decisión de dejarla, sé que soy la peor amiga además de eso, la más egoísta.

Me prepare, me puse el vestido negro y unos tacones del mismo color, me maquille levemente y solté mi cabello largo en unos pequeños rizos, bajé pues Jimin había llegado, su cara al verme bajar por las escaleras era de asombro, es verdad ni yo misma me reconocía, tomo de mi mano y caminamos hacia su auto, llegamos a un restaurante fuera de la ciudad, era lujoso pero muy hermoso.

-¿Esta lindo?

-Demasiado- Le di un sorbo a mi agua.

-Podemos ir a mi casa después de cenar.

-Antes me gustaría caminar un poco, ¿podemos?

-Claro, vayamos al parque que había de camino aquí.

La cena estuvo deliciosa, Jimin me hacía reír con sus ocurrencias, ahora entendía lo que Michelle me decía cuando me hablaba de él, era un príncipe, era maravilloso y también era el amor de mi vida.

-¿Nos vamos?

Tomé de su mano y salimos, caminamos por el parque y la distancia entre nosotros se acortaba.

-Te ves increíblemente hermosa Nat.

-Gracias, tú también te ves demasiado bien con ese abrigo.

-¿Tienes frio?

-No...

No me dejo terminar mi respuesta pues me atrapó entre sus brazos, me deje llevar, aquí nadie nos conocía, podía abrazarlo sin ninguna culpabilidad, como me gustaría quedarme así eternamente entre sus brazos y con el bello aroma de su cuerpo, esta noche no la arruinaría por nada y decidí quedarme callada.