Capítulo 23: Ella

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Llegar a "Caruzo" después de un buen tiempo no ayudaba con el hormigueo que sentía en mi estómago por los nervios.

Vería a Luke. Y eso provocaba que el hoyo en mi estómago creciera. Lo extrañaba. Luke siempre fue un excelente amigo, y no sabía porque había desaparecido de mi vida de la nada.

O quizá sí, pero necesitaba aclarar las cosas entre nosotros.

Entré y lo ubiqué en seguida, esos ojos verdes y piel canela lo podría distinguir en cualquier lugar.

De repente contuve mis ganas de correr a abrazarlo. Así que caminé con cautela hacia él.

-Hola.- Dije casi al frente.

Luke dudó en alzar la vista pero lo hizo.

Me sentí aliviada cuando una sonrisa se dibujó en su rostro aunque segundos después se borró.

-Vaya, vaya ¿A quién tenemos por aquí?- Dijo terminando de anotar una orden y caminando hacía la cocina.

-Le dije a Kim que vendría a visitarlos, por cierto ¿Dónde esta ella?-Pregunté buscándola con la vista

-Oh, acaba de salir pero supongo que regresará pronto.- Respondió él encogiéndose de hombros mientras buscaba los ingredientes de la orden.

-¿Seguirás ignorándome?- Murmure mientras lo ayudaba a sacar las cosas.

-¿Tu novio volverá a amenazarme?-Dijo él en tono molesto mientras se dirigía al horno.

-Luke para empezar tú lo amenazaste, pero no vengo por eso. Quiero arreglar las cosas contigo. Eres mi amigo y te echó de menos.- Murmure cambiando el peso sobre mis pies.

Luke respiró hondo y tomó casi un minuto para responder.

-Tambien te echo de menos Lía.- Dijo casi frustrado.

Me acerqué y le di un abrazo, él me correspondió él abrazo de tal manera que por poco y me rompe los huesos.

-Tranquilo fortachon, me vas a romper algún hueso y no creo que te vayas a hacer responsable de ello.- Dije soltándolo mientras él reía y se concentraba en su orden.

Estar bien con Luke se sentía mejor.

-¿Quieres que te ayude en algo?- Pregunté buscando algún mandil.

-Ni lo pienses Lía. Me quedaré sin empleo si regresa Kim y mira que tienes intenciones de volver.- Bromeó mientras comenzaba a cocinar.

Yo reí entre dientes.

-Bien, iré a la tienda, ¿Quieres que te traiga algo?-Pregunté mientras buscaba dinero en el bolsillo trasero de mi pantalón.

-Si.- Respondió sin dejar de concentrarse.-A ti.-Agregó y pude observar una pequeña sonrisa en su rostro.

Rodeé los ojos.

-En seguida vuelvo.- Dije y caminé fuera del local. El mini super se encontraba a casi 5 calles de ahí, así que saqué mis audífonos y lo conecté al reproductor de música.

Al llegar al lugar me dirigí a los refrigeradores y me detuve entre dos de ellos, aun no decidía qué comprar, un café helado sería bueno, o tal vez una malteada.

-Apostaría por la malteada.- Dijo una voz femenina a mi lado.

Fruncí el ceño mientras volteaba a mirar a la chica que estaba a lado de mí.

-Oh, es que vi que estabas indecisa, sólo quise ayudar.- Dijo encogiéndose de hombros.

Esa chica se me hacia increíblemente conocida, pero en aquel momento no relacionaba su parecido con nadie.

-No te preocupes, creo que tomaré la malteada. Gracias.- Dije dedicándole una sonrisa.

-¿Vives cerca de aquí?- Preguntó mientras ella sacaba una bebida de gas.

-Eh, no.-Respondí mientras caminábamos a la caja.- Trabajaba cerca y vine a visitar a mis compañeros.- Agregué colocando la malteada sobre la caja.

-Oh si, yo vine a pedir trabajo. ¿Dónde trabajabas?-Preguntó mientras esperaba a que me cobraran.

-En la fonda que esta cerca de aquí, "Caruzo".- Contesté pagando la malteada.

Ella abrió los ojos como plato mientras pasaba su producto.

-Mierda, yo iré a pedir empleo ahí.- Dijo mirándome aún sorprendida.

Yo fruncí el ceño, no sabía que Kim estaba contratando, pero de igual manera sonreí, mientras ella pagaba lo suyo.

-Es un lugar increíble, te encantará. Todos son muy amables.-Dije mientras salíamos de la tienda.

-Si lo sé, un viejo amigo mío trabaja ahí...-Dijo ella destapando su bebida

-¿Ah sí? ¿Quién?- Pregunté intrigada.

-Luke. No sé si lo conozcas.- Respondió mientras yo casi me atraganto con la malteada.

Mi celular sonó de repente, era Ethan. Le hice una seña a la chica para que me disculpara un momento.

-Hola.-Murmure.

-Hola hermosa, ¿Dónde estás?- Preguntó al otro lado de la línea.

-Estoy cerca del trabajo de la tía Kim, y ¿tu?- Pregunté mordiéndome un labio.

-Voy para tu casa, ¿Quieres que pase por ti? Te tengo una sorpresa...-Dijo y pude notar la emoción en el tono de su voz.

-No, yo voy para allá... -Lo interrumpí de inmediato con la misma emoción que él transmitía al otro lado de la línea.

-Esta bien, te espero.- Dijo y casi podría apostar que estaba sonriendo.

-Llego en seguida...-Dije sonriendo tambien.

-Lía...- Murmuro Ethan del otro lado del teléfono.

-Dime.-

-Te quiero.- Agregó y yo sonreí como una tonta.

-Yo también Ethan.- Dije sin dejar de sonreír.

La chica a mi lado me mir6o de manera extraña, y luego sacudió la cabeza como si algo se hubiera asomado en su mente.

Me imagine que me veía ridícula haciendo esto pero no me importó en lo más mínimo.

-Tengo que irme.- Le dije a la chica a mi lado.-Discúlpame con Luke, dile que volveré mañana sí me es posible.- Agregué buscando un taxi con la vista.

-Claro yo le digo. Por cierto ¿Cuál es tu nombre?-Dijo deteniéndose mientras yo le hacía señas a un taxi.

-Soy Lía.-Respondí aun agitando mi brazo.

-Mucho gusto, yo soy Charlotte.- Dijo sonriente y continuó su camino mientras el taxi se detenía frente a mí.

Con cada latidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora