Extraño destino ♥ ★ [Nick Jonas y Tu]

Capítulo 116:

-Nick... -Le nombré deteniéndolo- Gracias. -Asintió con su rostro serio y se despidió de Joe quien estaba en un silencio absoluto desde mi comentario en el auto.
-Nos vemos. -Me dijo cortante para luego caminar hacia la entrada. Le miré apenada, realmente le dolió lo que le dije.
-Oye, espera... -Dije alcanzándolo. Me miró y yo tomé su brazo con urgencia temiendo que se me escapara.- Lamento lo que dije, no era enserio.
-Da igual.
-Realmente no quise decirlo... -Nick, a punto de responderme de mal forma, miró hacia un costado y resoplo conteniéndose.
-Ve con Joe. Te llevará a casa con Alex.
-Nick... -Con mi mano acaricie su mejilla lentamente. Él estaba tenso y se notaba mucho.
-Deja de tocarme __________.
-¿Por qué? -Pregunté sin dejar de hacerlo.
-Porque estoy enojado.
-Yo también lo estoy. -Baje mi mano hacia su remera y miré con dedicación como jugaba con ella.
-__________, hay paparazzis y no quiero hacerte quedar mal. Deja de tocarme. -Subí mi mirada mientras detenía toda acción que estaba realizando. Él quería apartarme de él.
-De acuerdo. -Dije con un nudo en la garganta mientras dejaba caer mis manos. Me sentía humillada.
-Gracias. -Le miré con lágrimas en los ojos y di media vuelta para volver hacia donde estaba Joe.
-¿Podemos irnos? -Murmure mientras limpiaba una lágrima.
-Viven peleando por tonterías. -Comentó. Yo traté de limpiar mis lágrimas con disimulo ante las cámaras sobre mí.
-¡Se enojó por una tontería!
-Está planeando este viaje para ustedes hace mucho ______. Le dolió que dijeras eso. ¿Sabes el milagro que hizo para convencer a Alex?
-No quise decirlo en serio. Simplemente estaba enojada.
-Ve a hablar con él. No dejes que se vaya sin ti, y menos si se van peleados así.
-No quiero ir sola. Hay fotógrafos...
-Vamos, te acompaño. -Asentí. Joe colocó la alarma al auto y con mi valija en mano me acompaño donde Nick estaba hablando con un señor. Joe lo saludo y luego miro a Nick.- Bro, no peleen, no lo dijo en serio y sé que lo sabes.
-No la voy a obligar a venir si no quiere. Problema de ella.
-No seas así. Recuerda lo que te dije hace un rato. Ten paciencia ¿Sí? -Nick rodó sus ojos y luego me miró a mí quien tenía la mirada en el suelo apenada.
-No hay entrevistas. Aléjese. -Comentó el hombre de recién a unos paparazzis.
-Debo irme
-Nick. -Lo regaño su hermano.
-No quiere ir conmigo Joe, entiende.
-Si quiero... -Susurre.
-Dijo que sí. Anda, vayan. -Nick iba a comentar algo seguramente ofensivo pero no lo hizo. Simplemente dio media vuelta y yo lo seguí por detrás. Una chica lo detuvo para sacarse una foto y yo me quedé alejada de la situación. Aquel hombre nos alcanzó. Yo simplemente me despedí de Joe sabiendo que éste sería un largo viaje.

Tengo miedo. Ya estábamos en el Jet privado de Nick pero aun así tenía miedo. ¿Y si hay turbulencias? Me quise relajar y buscar una posición cómoda en éste lugar pero no había caso.
-Deja de moverte tanto. -Se quejó Nick tratando de dormir. Estaba cruzado de brazos y dándome la espalda ignorándome por completo.
No le hice caso. Seguí moviéndome sin parar, ¿Y si escuchaba música? Tal vez así podría relajarme un poco.
-No se puede dormir así. -Resoplo. Pidió un poco de vino y le trajeron dos copas aunque está de más aclarar que no me ofreció. Tampoco me importa, no me gusta el vino.
-Quiero escuchar música. -Dije enojada mirándolo.
-Bueno. -Dijo sin sacar la mirada del vino en su copa. Se lo llevó lentamente a sus labios y lo degusto.
-Me parece de mal gusto lo que haces.
-¿Qué cosa ___________?
-Ignorarme.
-Bueno.
-Que idiota.
-Umju.
-Idiota. -Repetí furiosa de que me ignore. Lo peor que me pueden hacer es ignorarme. Lo detesto.
Me crucé de brazos y haciéndome bolita me di la vuelta hasta darle la espalda. ¿Es que acaso no era yo la enojada por no haberme dicho de su viaje? ¿En qué momento cambiaron las cosas? No entiendo nada.
Le miré de reojo y lo vi concentrado con su celular. Hacía como si nada.
-Nick... -Le nombré en un susurro. Un nudo en mi garganta se formó al no obtener respuesta alguna- ¡Nick! -Me estaba desesperando al no escucharlo hablarme y ver que estaba con su celular ignorándome como si no existiera.
Volví a mirar hacia la ventana e inevitablemente comencé a llorar. Lloraba silenciosamente para que no me escuchase, no me gusta que se den cuenta de que lloro. Lo peor de todo es que yo sabía que esto iba a pasar. Yo sabía que él me ignoraría, no nos hablaríamos en todo el viaje y... Seguramente estaría todos los días sola en un hotel y en una ciudad que desconozco.
-¿Quieres vino? -Preguntó de la nada. Sabe que no me gusta y llegué a pensar que tal vez lo preguntaba a propósito. Por esa misma razón no le respondí. Por eso y porque si le contestaba notaría que estoy llorando.
Escuché el sonido de un mensaje entrante en su celular y por unos minutos no me habló más. En cierto modo lo agradecí. Suspire tratando de relajarme y dejar de llorar en vano, sorbí por la nariz como acto involuntario dándole a entender que estoy llorando. Me odie por ello si soy sincera.
-Queda poco. ¿Segura no quieres? -Realmente se había tomado toda la botella él solo?- No veo la hora de llegar y tirarme en la cama...
-Que bueno. -Comenté. Mi voz sonó media ronca y como tengo la nariz tapaba parecía que estaba con un resfrío al hablar.
-Te estás perdiendo toda la vista por llorar ¿Sabes? -Preguntó. Se sentó a mi lado y señaló por la ventana- Allí, ¿Ves? -Le miré unos segundos y miré donde me decía. Un montón de edificios de alguna cuidad se dejaban apreciar a ésta altura en el aire. Era tan bello...
Me sobresalte cuando me extendió un pañuelo. Lo tomé y limpié las lágrimas que habían quedado.
-Estamos discutiendo mucho últimamente. No aquí por favor.
-Tú eres el que me ignora.
-Ya no más, no aquí.
-¿Y qué? ¿Pretender que nada pasó?
-¿Pasar? ¿Qué pasó? -Me miró con diversión cuando le arquee una ceja.
-Nada pasó.
-Pasó una bella vista y no la apreciaste. Mira... Te muestro. -Así fue el resto del camino. Algo incómodo, él haciéndose el desentendido en cuanto a nosotros y simplemente me hablaba como conocida suya. Si me preguntan estoy segura de que lo hace porque estuve llorando y no aguanta escucharme y verme hacerlo. Cuando lleguemos al hotel seguro todo cambiará.

Me ayudó a desabrochar mi cinturón en cuanto llegamos, había sido bastante estresante mi segundo viaje en avión, más con éste ambiente tenso entre Nicholas y yo.
-_______... -Me nombró deteniéndome- Habrán muchos paparazzis y gente esperando afuera.
-¿Qué con ello? -Pregunté sin entender su punto.
-No te separes de mí. No respondas nada. ¿Sí? -Asentí algo aturdida. Ya bastante de malas estaba con haber tenido que viajar con estos tacos incómodos como para encontrarme con esto ahora.

Nick me ayudó a bajar, me sostuve de él al instante en el que comenzó a caminar, ya veo que me caigo frente a las cámaras y paso la peor vergüenza del mundo por no haber utilizado casi nunca tacos en todos mis años de vida.
Nicholas iba llevando nuestras valijas y unos hombres, junto con el que había saludado Joe antes de irnos estaban junto y detrás de nosotros por seguridad.
-Estoy nerviosa. ¿Quieres que te suelte? -Pregunté al pensar que tal vez no quisiera que estemos pegados frente a las cámaras.
-Descuida. -Dijo serio. Se lo notaba algo estresado- Simplemente sigue caminando, ¿Si? -Le miré y dudosa asentí para luego ver a lo lejos todos los paparazzis esperándolo. Algunas, muchas, fans vinieron a pedirle una foto. El negó algunas mientras me miraba de reojo. ¿Lo hacía por mí?
Por supuesto que se nos abalanzaron los hombres con sus cámaras en busca de fotos y con miles de preguntas. Me tape la cara como podía mientras miraba el suelo y me dejaba guiar por Nick.
-Ya casi llegamos. -Me comentó. Un auto lujoso nos estaba esperando. Nick me abrió la puerta y me hizo entrar para poder relajarme.
Al no verlo entrar miré hacia afuera y le vi hablando con uno de los hombres que nos acompañaba y cada tanto sacándose alguna que otra foto con sus fans.
Las valijas las guardaron en el baúl y unos cinco minutos después ingreso Nick para luego emprender el viaje al hotel.
-¿Estás bien? -Tenía la mirada fija en el suelo mientras mi mente reproducía lo sucedido hace unos momentos.
-Sí. Gracias.
-Lo peor ya paso.
-Eso espero. -Me sonrió levemente para no hablar más hasta que llegamos. Nos bajamos en un hotel precioso. Era increíble y la gente muy amable.
Ingresamos y Nick pidió la llave de un cuarto ya reservado y se la entregaron inmediatamente, gracias a Dios ya podía tirarme en la cama y... Si tengo que admitirlo fue lo primero que hice.