WHEN SHE WAS A VIRGIN

"Compañeros de trabajo"#25

Lo miré a los ojos temiendo pronunciarlo, porque entonces no había marcha atrás —Seré papá.

Marlon se desplomó sobre el sofá apoyando todo su peso sobre su espalda.

 —Ahora sí estás más que jodido —me dijo.

¿Jodido?

Cómo podía considerar esta noticia.

Cómo asimilar el hecho de que iba a ser padre. A partir de ahora mi vida iba a depender de un pequeño ser humano en desarrollo. Un pequeño que me iba a llamar padre hasta el fin de mis tiempos.

Pero ... no puedo evitar sentirme raro. ¿Landon Cooper papá? ¿En qué aspectos de mi vida tendré que cambiar? Mi carrera apestaba pero tenía que concluirla.

Y ... oh mierda la música.

Mi lista de prioridades acaba de romperse e irse a la basura, para ser reemplazada por un papel blanco que decía "Positivo".

¿Se puede considerar a eso estar jodido?

Yo creo que no.

Y más si es con Annie.

Mi Annie.

No me había percatado que estaba en un trance cuando vi la mano de Marlon deslizarse de arriba abajo en frente de mi nariz.

 —¡Reacciona Landon! ¡¿Qué mierda harás?! Tu chica tendrá un hijo tuyo. Consideraría decirte que huyeras, pero juzgando lo idiota que estás por ella, solo me queda apoyarte en todo lo que necesites. Menos en cambiar pañales  —hizo una mueca de asco— en eso te jodes tú solo.

Reí.

Aunque ni siquiera mi risa se sentía real en estos momentos.

—Primero ayúdame a no seguir comportándome como un idiota con Vega —tomé un cojín y se lo tiré con fuerza en la cara  —y segundo, claro que me ayudarás con los pañales imbécil.

 —¿Le dirás que ya lo sabes? —preguntó frotándose la nariz por el dolor.

 —N-o lo sé. La última vez que la vi me mandó por el retrete. Pero ... esto lo cambia todo ¿Verdad?  —miré esperanzado a Marlon. Él inclinó la cabeza hacia un lado .

 —Si ella te rechazó sabiendo que tendrán un hijo no creo que le importe mucho tu apoyo en estos momentos —alzó un dedo— lo primero aquí, es que compruebes tu inocencia frente a Annie. ¿Estás seguro que no pasó nada entre Carly y tú?.

—Muy seguro  —respondí.

 —Bien, entonces tienes que demostrárselo.

 —¡¿Cómo carajos voy a hacer eso?! —respiré profundo. Traté de calmar mis ansias de llamar a Annie y decirle que ya sabía toda la verdad. Me sentía desplazado de mi propia historia, es decir, ella estaba actuando de una manera muy egoísta.

¡¿Acaso me consideraba tan miserable para creer que no querría a mi hijo?!

—¡Mierda! —gruñí ante un repentino recuerdo. Me levanté del sofá y empecé a dar vueltas como un maniático  — ¡Le dije que usé protección!. ¡Seguro me cree un maldito mentiroso!.

Marlon frunció el ceño mientas frotaba la barba de su mentón.

—Entonces existe la posibilidad de que el hijo no ...

 —¡Cierra la boca! ¡No digas eso!  —si no conociera a Marlon desde que tengo 5 años, le hubiera partido la cara en este preciso instante.

Levantó las manos en señal de disculpa  —Perdón. Solo era un comentario.