TURNED (HunHan)

Capítulo 12

Era el día de la luna azul.

Luhan no había vuelto desde su primera visita, y no habían conseguido un plan. Ni siquiera Minseok pudo encontrar una forma de salir. En ese punto, Sehun estaba empezando a desquiciarse. Si no hacían algo – y pronto – Yifan y Luhan se emparejarían.

Era tarde por la noche cuando la puerta de las escaleras se abrió. Sehun se sentó, esperando a Zitao o a Yixing, que los habían estado vigilando por turnos. Pero no fue así. Sehun vio eso al instante, cuando Jongdae se detuvo delante de su puerta.

-¿Qué estás haciendo?- Sehun preguntó, observándole con cautela mientras desbloqueaba su celda.

-Te voy a llevar con mi líder.- Dijo Jongdae, y el estómago de Sehun se hizo un nudo. ¿Yifan iba a matarle, ahora que luna azul estaba tan cerca que Luhan no podría escapar?

Jongdae abrió la puerta e hizo un gesto a Sehun para que saliera. Sehun miró por el pasillo, esperando ver a Yixing o a Zitao como refuerzos.

-Estoy solo.- Dijo Jongdae. –No pienses que eso significa que puedes intentar algo. Ya sabes lo rápido que soy. Te noquearía antes de que terminaras de atacarme, y eso haría mi trabajo más complicado.-

-No quiero exactamente hacer tu trabajo fácil.-

Jongdae sonrió. –Sí, sí quieres.-

Antes de que Sehun pudiera decir nada a eso, Jongdae fue a la celda de Jongin. Desbloqueando la puerta, la dejó abierta y miró hacia el pasillo, llamándoles por encima del hombro. –Daros prisa. Y cerrad la puerta detrás de vosotros.-

-¿Qué?- Minseok preguntó mientras Jongdae pasaba por delante de su celda. -¿No estoy invitado?-

-Me temo que no.- Jongdae le dijo. –Incluso si el líder te quisiera, te han ordenado no dejar la habitación.-

Minseok le sonrió. –Pero igualmente no me dejarías salir, ¿verdad?-

-Yifan tiene razón; eres listo.- Jongdae hizo un gesto con la mano a Sehun y a Jongin para que se dieran prisa antes de marcharse por el pasillo.

Minseok, aun mirando por la ventana de su puerta, sacudió la cabeza y se dijo a sí mismo. –Lo sabía.-

-¿Sabías qué?- Sehun preguntó.

-No importa. Lo descubriréis pronto.- Minseok los saludó, mientras Jongdae acababa. –Daros prisa. No queréis perder vuestra oportunidad.-

-¿De qué estás hablando?- Jongin preguntó, mirando a Minseok de forma escéptica.

-¿No lo habéis descubierto todavía?- Minseok puso los ojos en blanco. -¿Qué estoy diciendo? Por supuesto que no lo habéis hecho. Sois dos de las personas más idiotas que conozco.- Minseok hizo un gesto con la barbilla hacia Jongdae, que estaba esperándoles impaciente al lado de la puerta de las escaleras. –Os está sacando de aquí.-

-¿Por qué nos estás ayudando?- Jongin demandó mientras subían las escaleras.

Jongdae le sonrió, entonces se llevó un dedo a los labios. –Si queréis salir de aquí, deberíais callaros.-

Jongin bajó su volumen, pero siguió hablando. -¿Cómo eres capaz de liberarnos? ¿Yifan no os ha ordenado no ayudarnos?-

-Ordenó a Luhan no ayudaros. ¿Por qué preocuparse de ordenárselo también a la parte de la manada que siempre ha sido fiel a él?-

-Si eres tan leal, ¿por qué nos estás ayudando?-

De nuevo, Jongdae sonrió. Alcanzaron la cuarta planta. Haciendo una pausa, Jongdae escuchó fuera de la puerta antes de guiarles por el pasillo. Sehun escuchó también, pero no pudo captar nada. La planta estaba vacía.