La storia della arcana famiglia

Capitulo 8

Maraton 2/3

Tranquila, tranquila, relajate, tienes que calmarte, inhala y exhala, inhala y exhala.

Deacuerdo, esta situacion se esta volviendo cada vez mas y mas molesta, ahora resulta que no puedo irme de aqui "por mi bien", eso agregando que no eh visto a mi abuela, a y casi lo olvido, ahora estoy sentada debajo de un arbol escondida de luca.

¿Porque? Tal parece que me quieren tener bien vigilada para no ocacionar problemas.

Nadie te a dicho eso- dice templanza

Es absurdo que ahora me encuentre con una niñera, sin salir de aqui, nisiquiera me dejaba ir por ahi en la mansion sola.

-Señorita Sakura!- genial, ya me encontro. -Señorita!

Aparto mi vista del cielo y miro en direccion de la voz de mi niñera-temporal. No me a visto al parecer. Talvez deberia dejar de usar la ermita.

No estas del todo recuperada- me regaña esta.

Que no los pueda ver, no significa que no tenga la suficiente energia para no utilizarlos- contesto en mi mente.

Almenos este pequeño inscidente tuvo un lado positivo, al parecer cuando me encontre mas devilitada pero me concentre en hablar con las cartas, logre ya establecer contacto con una parte de ellas, pero atravez de la mente.

Aunque es agotador todo esto, no pude contactar con todas, pero almenos con la mayoria si, algo es algo, ahora solo necesito relajarme y estar calmada para lograr hablar con todas, aunque desgraciadamente tomara un tiempo para que pueda tener mi energia como antes y asi poder hacer que tomen forma fisica. Quisas un par de dias.

-Señorita, ¿Donde estaba? ¿Se encuentra bien?- me extiende una mano ayudandome a ponerme de pie.

-Si lo estoy... o mas bien estaba...

-Porque dice eso, acaso le sucedio algo?- me toma por los hombros acercandose a mi, no se porque pero esa simple accion me pone un poco nerviosa, tiene bonitos ojos devo admitir. -Se siente mal? Necesita que la lleve adentro?

-Q-que, no, solo... necesitaba algo de espacio personal, como ahora- en ese momento el se averguenaa al igual que yo, pero yo almenos desvie la mirada.

Valla cambio, ahora se siente un poco tenso el ambiente entre nosotros.

-Por cierto, es un lindo jardin.- digo en un intento de que esto pase.

-Aqui Mama planta sus rosas, entre otras flores. La mayoria de origen japones.- obio lo note.

Caminamos hasta llegar a un kiosko, es pequeño pero acogedor, aqui cualquiera podria sentarse a disfrutar del aire fresco, o durante la noche una refrescante brisa a la luz de la luna sin ser visto por alguien mas.

Me siento en una de las cillas mientras luca se para a un lado dandome una sonrisa calida, no puedo evitar ruborizarme un poco, asi que agacho un poco mi cabeza.

-Ahm, luca estoy bien asi que, ¿podrias dejarme sola un momento?.

-Lo siento, pero eso es imposible señorita- lo miro seriamente cruzandome de brazos en busca de una respuesta -Usted no se encuentra bien, asi que, mientras se recupera, se quedaria aqui para su cuidado...