𝗫:𝗚𝗼𝗼𝗱 𝗟𝘂𝗰𝗸, 𝗕𝗮𝗯𝗲

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La impotencia y la frustración se notaban en los ojos oscuros, rompiéndole el corazón a la contraria.
Luffy solo quería a alguien que también la llamara "cariño". Era algo que Sanji no iba a darle.

-Quiero terminar con esto. Sé que me amas, y quieres resistirte a eso, pero ambas sabemos que tendrías que detener al mundo para detener el sentimiento-Soltó firme, intentando no dejarse caer por esos preciosos ojos azules-. Buena suerte, nena-Se fue dejando a la rubia ahí parada, que derramaba lágrimas en silencio.

...

"Dos mujeres que se besan es algo anormal, es repugnante, desagradable."

Recordó aquellas palabras acompañadas de golpes e insultos. Dicha frase que le repetía su padre desde aquella vez que la encontró besándose con su mejor amiga de la infancia a los once años.

Tenía miedo, Sanji temía ser considerada asquerosa por los demás.
Pero no podía evitarlo, Luffy era su perdición, con aquella personalidad hiperactiva y alegre, junto a su belleza salvaje que cada vez la encantaba más.

Pero el temor que siempre la atormento seguía ahí. Cada vez que la besaba, cada vez que la abrazaba, cada vez que le entregaba su cuerpo podía pensar en la gente observandolas, despreciandolas.

No quería ser un asco para la gente, y tampoco quería que Luffy fuera considerada un asco. La amaba mucho, pero no podía.

Intentó besar a cada hombre en el bar, esperando así poder detener aquel sentimiento. Bebía trago tras trago, intentaba tener algo con un chico, sin embargo no sentía nada al ser tocada o besada por ellos, no sentía lo mismo que sentía cuando lo hacía Luffy.

Podía seguir inventando excusas estúpidas o decir que simplemente ella era así, pero no podía recuperar a Luffy.

Desde ese día cambió todo entre ellas. Ya no había besos compartidos, miradas cómplices, ni risas traviesas y juguetonas, todo se había roto por su culpa.

...

Sentía las cálidas manos de Monkey recorrer su cuerpo con ternura mientras ella enredaba sus dedos en los costos cabellos negros. Ambas riendo mientras bailaban salsa en casa de la menor, intercambiando besos entre carcajadas y juntando sus cuerpos.

Luego las dos sentadas en la mesa, veía como la de cicatriz comía alegre, saboreando su comida con felicidad y diciéndole cumplidos que la hacían sonrojar.

Para después verse acostadas en la cama durmiendo abrazadas compartiendo la desnudez, envolviendo sus cuerpos entre sus brazos.

Despertó de repente, viendo el reloj a su lado que indicaba la media noche. Observó detrás de ella y vió a su esposo Gin durmiendo a su lado. Ambos dándose la espalda.

Siempre que durmió con Luffy jamás se dieron la espalda.

Se sentó en la cama, dejándo su cabeza emtre sus manos mientras pensaba. ¿Qué estaba haciendo con su vida? Casi no hablaba con la mujer que sabía que nunca dejó de amar, se casó con un hombre que jamás quiso por la presión que le metía su familia de tener un matrimonio.

Vivía infeliz, no era más que una esposa atrapada en una vida que odiaba.

Pensó en todos los años anteriores a aquella noche en el bar. En todas las cosas hermosas que vivió con Luffy, recuerdos bellos que nadie más podría darle. Las lágrimas se derramaron al recordar el día de su boda, cuándo minutos antes de salir al altar se encontró con la azabache.

Y se lo confesó, le dijo que jamás iba a dejar de amarla, que todo eso era en error y que jamás iba a detener el sentimiento que ella le había provocado.

La morena, hermosa con su vestido rojo, sonrió con tristeza y los ojos humedecidos.

-Sabés que odio decirlo, pero te lo dije-

"Te lo dije" aquella oración se repitió en su mente.

Estaba perdida.
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Estaba perdida

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Qué onda?

Pobres de mis Sanji y Luffy, las entiendo a las dos.

¿Qué les pareció? Me floreció la inspiración hoy, nomás soy una lesbiana dolida escribiendo sobre dos lesbianas dolidas y me inspiré en una canción de una lesbiana dolida, fue tremendo.

Conste que avisé que no había final feliz eh.

Gracias por leer 💕

♡•P͜͡e͜͡q͜͡u͜͡e͜͡ñ͜͡o͜͡s͜͡ M͜͡o͜͡m͜͡e͜͡n͜͡t͜͡o͜͡s͜͡ D͜͡e͜͡ A͜͡m͜͡o͜͡r͜͡•♡Where stories live. Discover now