NARRADOR OMNISCIENTE
Jake tuvo una idea despues de eterarse de que mary cantaba, miró la puerta de la casa de Mary con una mezcla de emoción y nerviosismo. Había compartido momentos con su familia, pero esta vez era diferente. Estaba allí sin Mary, con un propósito claro.
Maia abrió la puerta con una sonrisa amable.
—Jake, qué bueno verte. Entra, por favor.
Al cruzar el umbral, vio a Paola, Trini, Luke y Benjamín sentados en la sala. Stefi no estaba, ya que, según Trini, había convencido a Mary de ir al cine sin él.
—¿Tienen algo para mí? —preguntó Jake, intentando sonar relajado.
Paola sacó su laptop y, tras unos segundos, en la pantalla apareció un video. Jake se inclinó hacia adelante.
La imagen mostraba a una Mary más joven, con su cabello rizado alborotado, sentada en el comedor junto a su padre, Josef. Ambos reían mientras él tocaba la guitarra y ella cantaba con una pasión evidente.
—Dios... —susurró Jake.
Josef miraba a Mary con orgullo, marcando el ritmo con la cabeza. En un momento, le guiñó un ojo y dijo:
—Tienes una voz que puede llegar al cielo, mi niña. No dejes que nadie apague esa luz.
Jake sintió un nudo en la garganta. Este era el hombre que Mary extrañaba tanto, el hombre que había llenado su vida de música.
Cuando el video terminó, Maia habló con suavidad.
—Ella dejó de cantar porque le duele hacerlo sin él. Pero creemos que, si alguien puede ayudarla a encontrarle un nuevo significado a la música, eres tú.
Jake tragó saliva, procesando lo que acababa de ver.
—Gracias por mostrarme esto. Quiero que sepa que, cuando esté lista, yo estaré allí.
Trini le sonrió. —Solo ten paciencia con ella.
Luke, que había estado observando en silencio, se cruzó de brazos y habló con un tono más serio. —Mary es terca. Si siente que algo le duele, va a evitarlo a toda costa. Si de verdad quieres que vuelva a cantar, no basta con insistirle. Tienes que recordarle por qué amaba hacerlo en primer lugar.
Jake asintió. —¿Y qué más le gusta? Además de cantar, quiero decir.
Benja, que estaba jugueteando con su celular, levantó la vista.
—Su canción favorita es How Do I Say Goodbye, de Dean Lewis.
Jake arqueó una ceja. —¿En serio?
Benja asintió. —Cuando la escuchó por primera vez, lloró como loca. Dijo que le recordaba demasiado a papá.
Jake guardó esa información en su mente. Tal vez esa canción era la clave.
Luke sonrió con burla. —También le gusta leer hasta que se queda dormida y comer cosas dulces a escondidas.
Jake rió. —Eso sí lo he notado.
Paola se cruzó de brazos. —Si realmente quieres ayudarla, demuéstrale que la entiendes. No la presiones, pero tampoco dejes que se cierre.
Jake los miró con gratitud. Esta familia realmente amaba a Mary, y él también.
—Gracias por confiar en mí. Prometo que haré lo mejor para ella.
Sabía que no podía forzar a Mary a cantar de nuevo. Pero sí podía recordarle que la música no era solo dolor... también era amor.
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💜 Conectar con una mirada 💜
Teen Fictionsinopsis Mary jamás imaginó que un simple fan meeting cambiaría su vida para siempre. Con el corazón lleno de sueños rotos y cicatrices invisibles, conocer a Jake Sanders, el ídolo de su hermanita pequeña stefi, parecía solo un momento fugaz. Pero l...
