- Se está secando, vuelve a la cama - me sorprendió la manera tan dulce que lo dijo.

- No puedo, me tengo que ir. Mi papá no tiene ni idea de donde estoy y estoy segura que me metete en problemas - mi voz sale de manera rápida por culpa de la ansiedad.

Nate camina y deja la bandeja en el buró que está a un lado para después pararse frente a mi.

- Tu papá piensa que estás en casa de tu prima. Ahora, vuelve a la cama y desayuna ¿sí? - me pido de manera cariñosa. Mi corazón no pudo evitar latir con fuerza cuando Nate tomo mi mano y me encamino a la cama.

- Ahora, come - dijo una vez que me encontraba sentada de nuevo en la cama.

Puso la bandeja frente a mi y al sentir el olor llegar a mi nariz sentí asco al instante.

- No quiero comer - digo.

- Phoebe, no puedes no comer. Ayer tomaste demasiado y no comiste tampoco nada. No puedes pasar tanto tiempo sin comer.

- Es que tengo asco. Por favor, no quiero - mi tono sonó más infantil de lo que pensaba.

- Por favor. Aunque sea un poco - insistió sentándose en la cama - Tomate la pastilla y come. Te vas a sentir mejor, te lo prometo - su voz era comprensiva.

Vi lo que había en la bandeja. Hotcakes, jugo de naranja fresco, y a un lado la pastilla. Tome la pastilla y la trague con ayuda del jugo de naranja. Estaba delicioso y calmo mi sed.

- Bien. Ahora, come - su voz sonó ordinativa.

Puse mala cara y partí un trozo de Hotcake para después meterlo a mi boca, masticarlo y tragar. Estaba delicioso, a pesar de el asco que tenía, sabía delicioso. Me anime y comí otro pedazo más.

- ¿Está rico? - me preguntó con una sonrisa al ver que comía otro pedazo.

- mhm - dije alegremente.

Comí un poco más, hasta que me sentí un poco más llena y deje el tenedor sobre la bandeja.

Sentí un poco de incomodidad al ver que Nate no quitaba sus ojos de mi.

- Lamento lo que paso - dije avergonzada de mi misma.

- No tienes por que disculparte, esas cosas pasan. Lo entiendo por completo - ¿Por qué se está comportando tan... dulce? No entiendo su comportamiento.

- Sí, pero no era mi intensión causarte a ti problemas. No era necesario que me trajeras a tu casa, Ava me pudo llevar a su casa, no era necesario.... - me interrumpió antes de que pudiera acabar la frase.

- Dos cosas. Una, Ava se fue con otro amigo tuyo. Dos, no me iba a quedar tranquilo sin saber donde estabas o con quien estabas - me quede sin palabras al escucharlo decir eso, sobre todo al escuchar en el tono amenazador con el que lo dijo. ¿Sera posible que Nate de verdad se preocupe por mi? Me gustaría decir que si, pero una parte de mi se siente insegura sin razón. Decidí ignorar esa pequeña parte.

- Espera...¿Como que se fue con un amigo mio? - pregunte al darme cuenta de lo primero que dijo.

Solo hay un amigo mio con el que se iría. Pero debo de estar alucinando, Ava y Dean nunca estarían juntos.

- Si. No se cual era su nombre, o si si era tu amigo, pero solo se que se fue con algún chico - tal vez es eso. No era Dean. Nate, debió de pensar que el chico con el que se fue era amigo mio o algo.

- Entonce, ¿Como sabe mi papá que estoy aquí y no en otro lugar? - le pregunté.

- Eso fue lo fácil. Tomé tu teléfono y le mande un mensaje a tu papá diciéndole que te quedarías con tu prima a dormir, después de que preguntara miles de cosas y te dijera otras mil veces que te cuidaras, te traje.Por cierto, deberías de ponerle clave a tu teléfono - me explicó con un tono divertido.

- ¿Y por que fue eso lo fácil? - parecía que le estaba haciendo un interrogatorio.

- Por que lo difícil fue cuando te despertaste. Seguías demasiado borracha y no parabas de decir que odiabas el vestido que estabas usando. Que los tacones te estaban matando, aunque ni siquiera estabas caminando. Que me odiabas. Y que era un estúpido por haberte dejado - mis mejillas ardieron, no puedo creer que le dije eso. No puedo creer aun más que no recuerde nada - Al final, vino lo peor. No dejabas de quejarte del vestido, te dije que yo te daba algo de mi ropa. Tu te limitaste a reír y al final simplemente volviste a caer desmayada. Te tuve que cambiar y dejarte en la cama. Me quede despierto gran parte de la noche para supervisar que no vomitaras, o si despertabas de nuevo, pero ninguna de las dos cosas pasaron - cuando por fin termino con su larga explicación, mis mejillas no solo estaban rojas, toda mi cara estaba roja. No puedo creer todo lo que dije he hice ayer. Y al imaginar a Nate viéndome en ropa interior, lo empeora todo. Ningún chico me ha visto en ropa interior, esto es demasiado vergonzoso.

- Hay Dios, lo siento en serio. Yo no quise decir todo lo que dije, es solo que...

- Phoebe, no te tienes que disculpar. Y sobre lo que dijiste ayer, yo no te quise dejar de la manera que te deje. No me fui de Seattle por que te estaba evitando. Es mucho más complicado de lo que piensas - su cara se torno seria al intante.

- ¿Qué tiene de complicado? ¿Por qué es complicado? - mi tono era desesperado.

- Tu vestido ya debe de estar listo. Iré por el y después te llevo a casa - cambio el tea dramáticamente.

Antes de que pudiera decir una palabra más, se levanto de la cama, agarro la charola y se fue de la habitación.

¿Simplemente me va a dejar aquí sin una respuesta? ¿Por qué no puede confiar en mi? ¿Qué esta escondiendo?

------------------

Hola!! Hasta aquí el capítulo. Espero que les guste mucho, es un poco sencillo, pero me gusto de cierta manera.

He leído comentarios y me piden subir el capítulo más rápido, en serio estoy tratando y juro que trataré aun más para lograr subir los capítulos más rápido.

En serio espero que les guste y que comenten y voten. Adoro cuando lo hacen. Los quiero!! Gracias por todo su apoyo, no se que haría si no los tuviera.

Mine ~•~ (Phoebe Grey)~•~Where stories live. Discover now