-Esta bien- le grité mientras seguía bañandome.
Después de unos minutos salí enrollada con la toalla, mire por todos lados esperando que no estuviera Natsu para poderme cambiar placenteramente pero...
-¡Que va! Ya hemos estado juntos- di una sonrisa imaginandome aquellas escenas -Ah! ¿Existirá alguien más que me pueda poner de esta manera?-tan pronto como me hice la pregunta me respondí- No es necesario pensarlo... ¡No existe!- tomé un short amarillo y una blusa blanca, me vestí para depues ponerme unos converse rojos y cepille mi cabello, decidí dejarlo suelto.
Sting:
¿Podemos vernos? Aún no hemos aclarado nada, creo que me merezco una explicación. Estoy yendo a tu casa.-ah- solté un suspiro con pesadez- El momento llegó- dije mientras le contestaba que lo esperaba- El mensaje llegó antes de que natsu se fuera ¿Lo habrá visto? Bueno... no importa- escuche el timbre de la puerta y bajé rápidamente.
-Llegaste- le dije haciendo señas que podía pasar.-No quiero hablar aquí ¿Puedes venir?- su semblante era bastante malo, pareciera como si no hubiera dormido varios días, aunque solo no dejamos de ver hace dos días, aún así... el se veía bastante mal.
-Esta bien- lo había lastimado así que al menos podía hacer esto. Cerré la puerta- ¿A donde vamos?- dije subiendo a su coche.
-¿Recuerdas que promesa hicimos para nuestro aniversario?- Mierda~ Creo que hoy es ese día- No te molestes en contestar- Dio una media sonrisa, pero diferente... en aquel entonces su media sonrisa siempre transpiraban felicidad pero esta vez era tristeza o al menos yo lo veía así ¿Me sentía culpable? Creo que si.
El tiempo siguió y aún no llegábamos a nuestro destino. Recuerdo que cuando Natsu se fue dejándome sola, en ese momento estuvo Sting, y poco a poco fui dejándome querer por él, poco a poco me apoye en su hombro hasta que nos hicimos novios y cuando cumplimos nuestro primer mes el me prometió llevarme a un lugar alejado de Magnolia, cuando el sintiera que me estaba perdiendo me llevaría a ese lugar y trataría otra vez sentirse seguro conmigo. Pero en ese entonces no pensé que fuera a regresar natsu, no pensé que no lo dejaría de amar, jamás pensé esto.
-¿Esta bien que hagas esto?- rompí el silencio que se apoderaba de la situación bastante incomoda ya.
-¿Recordaste? Pensé que no lo harías- dijo sin dejar de ver el camino.
-¿Por que lo haces? Tu mismo te diste cuenta de todo- era duras mis palabras pero no quiero que se prolongue la situación y el sea lastimado... así como yo sufrí.
-...- no obtuve respuesta, se limito a conducir hasta que llegamos a una playa un tanto oculta y lejana de magnolia. Estacionó el coche y bajo hasta la orilla, camine poco a poco hasta que llegue a su lado, mire a todos lados y no había nadie, ha decir verdad tenia un poco de miedo.
-Ya estamos aquí- le dije tratando de hacer que hablara.
-¿Esta bien que haga esto?- repitió lo que le dije hace unos minutos atrás -Primero pregúntate si esta bien lo que tu me hiciste- trage en seco y desvíe mi mirada de su rostro.
-H-hey S-sting- dude un poco- Y-o lo--
-¿Vas a decir que lo sientes?- me interrumpió.- Ese mismo día que llego, ese mismo día estuviste con el ¿Como crees que me siento ahora? Estuve mucho tiempo a tu lado y jamas llegue a estar contigo ¿Porque con el si? ¿Porque solo basto unas cuantas miradas para que te dejaras enredar?- no contestaba solo tenía mi mirada undida en la tierra- ¡¡¡Mírame!!! ¡Dime! ¿¡Por qué!?- lo miré con temor.
-No es que hayan sido las miradas o las palabras... Natsu y yo nos---
-¡Callaté! ¡No menciones eso! ¡No lo digas!- volví a asustarme y me hice hacía atras al ver como sacudio su cabello molesto.- Nunca me dijiste eso a mí, jamas me lo dijiste ¿Crees que es bonito escucharlo que lo pronuncies para otra persona?- me tomó bruscamente del brazo.
-M-me estas lastimando sting- le dije tratando de safarme- S-sueltame- le supliqué.
-¿Qué?- me jalo hacia su pecho-No quiero, no quiero hacerlo- apretó aun más su agarre- No te duele ni la cuarta parte de lo que me esta doliendo a mi ahora verte con otra persona- lo empujaba pero deje de hacerlo cuando sentí unas gotas caer en mi espalda, estaba llorando.
-Perdóname, perdóname, por favor perdóname- lo abrace, a pesar del miedo que sentía no quería verlo así, no cuando el medio mucho amor a cambio de nada- Yo no quería que pasara así, simplemente paso, yo no sabía que iba a seguir sintiendo esto por natsu, yo no quería hacer daño, no a ti- lloraba junto con él, me sentía culpable y miserable, el se había vuelto una buena persona.
-¿Justo ahora tienes lastima?- dijo alejándome de él con tanta fuerza que perdí el equilibrio y caí sentada en la tierra- ¿Crees que necesito tu lastima? ¿Enserio tu piensas eso?- se agacho para estar a mi nivel y mirarme de manera fría- Justo ahora estas sola y nadie podría escucharte ¿Sabes?- cuando dijo eso un escalofrío recorrió mi cuerpo, tenia miedo y ya no era aquel Sting que se preocupaba por mi, ahora los celos y la decepción lo estaban consumiendo.
-¿Qu-e que quieres decir?- Era estúpida la pregunta pero no tenía más que decir, ahora mi cuerpo estaba paralizado.
-Que nadie te puede escuchar- se quizo pegar a mi y traté de deslizarme hacia atrás- no importa... te dije que nadie te escuchara aquí-
-Yo si-
------
Lamento no haber actualizado pero había estado muy enferma :'( pero ahora estoy mejor así que ya actualizare más seguido y comensare con las otras pendientes que tenía.
CZYTASZ
Algo parecido al amor.
RomansUn chico algo despistado cree haber conocido a la única mujer que seria para él "la perfecta" pero no se da cuenta que en su alrededor existe otra persona capaz de hacerle cambiar. Junto con sus mejores amigos algo locos a su manera que comparten el...
Un problema sin resolver
Zacznij od początku