𝐌𝐀𝐒𝐐𝐔𝐄𝐑𝐀𝐃𝐄 | 𝟏 ━ The Vampire Diaries

Capítulo III «parte uno»

CAPÍTULO III
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"Masquerade"
Parte uno

El ir a buscar vestidos había sido totalmente agotador, debía decir que admiraba a aquellas mujeres que podían pasar horas comprando ropa y accesorios, honestamente eso no era lo mío.
El tiempo estaba encima mío, tan solo me quedaba una hora antes de que Caroline y Bonnie vinieran a recogerme. Me sentía halagada por su gesto de ellas, el ayudar a una total desconocida perdida en este pueblo fantasma, era de mucha ayuda. Además, ellas podrían decirme algunos detalles de los hermanos Salvareños, ¿o eran Salvadores? Ni idea, la verdad no me interesaban en lo absoluto, es más mi curiosidad por saber porqué mis padres deseaban específicamente que acudiera con ellos, jamás había escuchado sus nombres en mis visitas a Mystic Falls.
Me comencé a colocar un vestido corto color negro, eran de los únicos colores que le asentaban bien a mi color de piel, tenía unos toques de encaje en la parte de arriba, con la espalda un poco descubierta. El antifaz era negro con pequeños diamantes de fantasía a los costados; de igual manera, había optado por dejar mi cabello suelto, solamente dándole unas pequeñas ondas en las puntas.
Estaba lista, nada sutil ni tan elegante, pero me agradaba el aspecto que podía lograr, con un buen labial rojo escarlata podías lucir como la mismísima Taylor Swift.
El sonido del claxon se escuchaba afuera de mi ventana, supongo que era la sutil señal de Caroline para decirme que estaba aquí. Tomé mi bolso junto con mi celular, dirigiéndome a la salida de mi departamento.
Al estar afuera puse notar como la brisa dibujaba perfectamente las ondas rubias del cabello de Caroline, mientras ella charlaba con Bonnie, quien su cabello lacio hacía una perfecta silueta sobre sus hombros. Ambas me miraron al escuchar el sonido de la puerta cerrarse, aunque este no fuera tan notorio, me dieron una leve sonrisa. Me acerqué para adentrarme a su auto, el cual era un hermoso Volvo plateado.

—¡Hola! Muchas gracias por molestarse y pasar por mí— dije mientras me deslizaba en el asiento trasero.

—No es nada, ya sabes, tenemos que ayudarnos entre nosotras— dijo Bonnie.

—Por cierto, ¡que hermoso vestido! En verdad que el negro te asienta bien— musitó Caroline mientras encendía el motor del auto y comenzaba a andar.

—Y el rojo te va estupendo— respondí al observar el hermoso vestido de satín rojo que usaba —, por cierto, Bonnie, ese color mostaza de luce fantástico.

—Gracias, Nuvia— musitó Bonnie.

Me había percatado mientras observaba por la ventana que habíamos pasado por la casa de huéspedes, donde Matt me había dicho que se hospedaban Stefan y Damon.

—¿Conocen de casualidad a Stefan y Damon?— pregunté.

Bonnie le dio un pequeño vistazo serio a Caroline.

—Sí, son los Salvatore, vienen de la familia de los fundadores de Mystic Falls, ¿ya los conocías?— preguntó Caroline de una manera muy seca.

—No, bueno, mis padres sí los conocían. Me dijeron específicamente que debía hablar con ellos, no sé la razón, pero me da cierta curiosidad la intención que tengan.

—Vaya, pues, no estoy segura que vayan a ir hoy a la mascarada, han pasado por... tiempos difíciles— musitó Bonnie.

—¿Difíciles?— pregunté.

—La novia de uno de ellos, Elena, falleció... también era amiga nuestra— murmuró de forma seca Caroline.

—Vaya, lo lamento, en verdad. Bueno, tal vez pueda esperar el verlos. No será necesario que los moleste esta noche.

Continue observando por la ventana, viendo como poco a poco se desvanecía el bosque, para dar lugar a una gran mansión blanca, llena de grandes luces doradas al rededor, con un jardín sumamente enorme y hermoso, el cual a un costado había una placa que decía "Mansión Lockwood".

De alguna manera, esta sería una buena noche.