WHEN SHE WAS A VIRGIN

"Chica difícil" #15

¿Qué está pasando aquí?

Yo soy la estudiosa, no él.

Landon es el mujeriego que me obligará a hacer la tarea mientras intenta seducirme.

¡Así no me imaginé esta escena!

Pasaron varios minutos, en lo que el silencio había gobernado completamente la habitación, y de repente, Landon clavó su mirada en mí. Mis ojos automáticamente se encontraron con los suyos. Extrañamente siempre buscaban conectarse con ellos. Tomó su laptop y la giró hacia mí, siempre con esa actitud fría que empezaba a fastidiarme.

—Encontré esto —dijo.

Miré hacia la pantalla. Era un tipo de trabajo que había sido realizado en la universidad de Harvard por la escuela de leyes. Levanté las cejas sorprendida.

—Interesante —pronuncié.

—Y mucho —añadió—. Podemos guiarnos de la estructura de este trabajo para hacer el nuestro. Es la misma temática. Nos servirá de mucho.

—De acuerdo. Es buena idea.

Landon apoyó todo su peso sobre el respaldo de la silla y cruzó los brazos.

— ¿Tienes alguna idea mejor?

—No estoy diciendo que no sea buena. Solo es que... también pensé en un video. Haría más dinámico el trabajo y la exposición.

Creo que esto huele a discusión.

—Perfecto —dijo, para luego volver a sumergirse en su pose de alumno aplicado.

Me siento decepcionada.

Subí nuevamente a mi habitación dejando a Landon en la sala. Tomé de mi escritorio la laptop y el móvil. Bajé y me dirigí a la mesa, en donde la encendí dispuesta a continuar con el trabajo. Al instante, recibí un mensaje en mi red social. Lo abrí curiosa y me sorprendí al ver que era de Landon. Le eché una mirada interrogante.

—Revisa lo que mandé —habló sin despegar un segundo los ojos de la pantalla.

Lo abrí y noté que era una carpeta de diferentes imágenes acerca de la delincuencia juvenil, así como pequeñas frases motivadoras. El nombre del archivo era "multimedia para video". Las miré una a una notando que eran una buena recopilación. Antes que comentara que la información era buena, lo vi levantarse del asiento, guardar la laptop en su mochila y colocar esta en su hombro.

— ¿Te vas? —pregunté.

Odié el tono de mi pregunta, así que le añadí algo más para no sonar tan ridícula.

—Aún no hemos terminado el proyecto.

—Claro que sí —afirmó—. Conozco a un amigo que hace videos increíbles. Te mandé las imágenes para que las revisaras y, a juzgar por tu rostro, creo que hice un buen trabajo. En cuanto a lo teórico, haré una estructura de cada parte que nos toque investigar. Luego, le daremos una chequeada final y nos dividiremos la exposición. Listo, sé práctica, Vega.

Abrí los ojos como platos. No tenía qué decir, pero tampoco quería que él tenga la última palabra.

—Mañana nos reuniremos para ensayar la exposición —hablé.

—No puedo.

Fruncí el ceño. — ¿Por qué?

—Tengo una cita.

Juro que algo se desconectó en mí. —Tendrás que cancelarla. Es un trabajo muy importante.

Sí. Discusión. Discusión. Discusión.