005. Amiguito.

305 44 10
                                    

Un sonido fuerte sonó. Desperté fuerte y prácticamente salté de la cama. Un sartén había caído al suelo provocado que despertara de manera brusca. Aun con los ojos medio cerrados me senté en el colchón de aire e intenté enfocar la mirada. Puedo apostar que ahora mismo lucia como un muerto viviente. Todo mi rostro estaba arrugado por el sol que entraba a través de la tienda. Pero todo eso quedó atrás cuando unos brazos se agarran de mi cintura y me aprietan fuerte. Me paralice al instante. Intenté no gritar del susto. Repentinamente el sueño había quedado olvidado y ahora lo único que ocupaba mi mente era que algo o alguien me estaba agarrando fuerte. Miré hacia abajo y mi corazón empezó a latir con terror al ver el rostro de un hombre. Un hombre me estaba abrazando.

Qué...

¿Quién coño es él?

Me paralice y por puro instinto y estuve a punto de gritar del miedo a encontrar a alguien dentro de mi tienda, hasta que a mi mente vino el recuerdo de Jongin.

Dios, que idiota soy. Olvidé por completo que ayer había traído a Jongin aquí. Es increíble qué tan mala es mi memoria que ni recuerdo los sucesos del día anterior.

Me quedé viéndolo. Ay, por qué deben haber hombres tan bellos tanto por dentro como por fuera. Espero no tener sentimientos por él en un futuro, o este año podría ser muy malo.

Aleje la vista de su cara a su abdomen... Alto.

¿Está sin camisa? ¿Por qué duerme así? ¿Lo hace a propósito para torturarme?

Lo más probable es que sabe lo que me provoca y por eso lo hace.

Me volví a acostar en el colchón y me incline sobre Jongin y sus brazos, lo único que quería era volver a dormir otra vez en esa posición tan cómoda con él. Pero algo estaba pasando, algo raro.

Lo pensé bien.

Se sentía raro.

Levanté el saco de dormir un poco junto a las sábanas y...

Un pene.

Mucha piel...

Alto. ¿Él estaba desnudo? ¿Le gusta dormir desnudo? Gracias al cielo que al parecer sí.

Intenté no volverme loca e ignorar ese pequeño gran detalle. Bajé lentamente el saco de dormir e intenté volver a acurrucarme en él.

Entonces algo bello pasó: Jongin me abrazó fuerte en sus brazos desnudos, sentí cómo mi cintura era atrapada y rodeada por sus brazos fuertes.

Madre mía Willy.

Tragué saliva sonoramente, esto es un sueño.

Giré mi cabeza para verlo y ahí estaba, con sus ojos cerrados, sus pestañas largas arqueadas, sus labios llenos y voluminosos, su pequeña nariz. El agarré en mi cintura se intensificó y me puso sobre él, nuestros rostros pegados y todo lo demás igual. En cualquier momento me tendrán que llevar al hospital por el infarto que este hombre me provoque. No puedo controlar a mi corazón agitado.

¿Qué debo hacer? ¿Lo despierto? ¿Me quedo así? ¿Aprovecho la oportunidad? ¿Lo violo?

Por culpa de él y su desnudez ahora tengo calor, todo por ver mucho hentai.

Toqué su frente con la punta de mis dedos para despertarlo, lucía como un precioso ángel, pero no podía seguir en esa posición o tal vez me lo violo en cualquier momento.

¿Jongin? él solo gruñó y me apretó más a el, pasó una pierna sobre mi cintura y me atrajo más. OH EM GI, siento su tigre en mí. Sentía mi respiración a mil, intentaba controlar mi corazón lo más que podía y mis movimientos para no montarlo y aprovecharme. O sea, no era nada pequeño. Despierta... susurre intentando controlar mi voz.

Del agua. ➳ Jongin - En edición.Where stories live. Discover now