Two worlds collide

44: leve sonrisa

Narrado por Ann:

Jamas había tenido una crisis nerviosa, realmente siempre había mantenido cada situación de mi vida bajo control.

Pero no esta vez, me sentía tan...responsable.

De el dúo Evans yo era la problemática, la que acababa con la paciencia de cada persona que se cruzaba en su camino, la que hacia que todos la abandonaran o la detestaran.

Ahora también me sentía responsable de que las personas nos odiaran.

Baje las escaleras sin demostrar lo mal que me sentía, me había vestido como lo hacia antes de que todo cambiara.

Medias, short, camiseta sencilla y tacos altos.

Esta era la verdadera Ann.

-Buenas tardes- dije al entrar a la cocina, papá sonrió y beso mi mejilla en cambio Leah solo levanto dos sobres y me señalo una silla frente a ella.

No tuve opción, me senté en la silla y acepte un vaso de jugo de naranja que me paso papá.

Iba a tomarlo cuando me puso una pastilla en frente.

-Evitemos otra crisis.

Lo mire y arquee mi ceja, no era un estúpida niña para que el quisiera cuidarme.

-Si querías tratarme como una niña no deberías habernos dejado, muy tarde John- aparte la pastilla y me termine el jugo para ver como Leah me miraba con desaprobación.-¿Que?

-Ya todos saben que no eres una perra, deja de fingir, Anabette.- rodee los ojos y señale los sobres.

-¿Para quien son esos?

-Para ti, los mios ya los he abierto.- asentí y tome el primero, era de nuestro instituto.

-Dime que no es una expulsión porque este año no he hecho nada para romper las reglas.- la vi reír levemente y negar con su cabeza.

-No, nada malo.- abrí el sobre para encontrarme con una invitación al baile de graduación- Tenemos que ir.

-Tienes razón, con pareja o no, iré a ese baile.- la vi sonreír y pasarme el siguiente sobre, este era...esperen, ¿universidad de Washington?- Oh mierda-

-Lo se, ese sobre me causara unos nervios de muerte- abrí el sobre lo mas rápido posible y lo leí.- ¿Que dice?

-No lo se.- bromee.

-¡Ya dilo!- se lo pase y vi como comenzó a chillar emocionada- ¡Nos quedaremos!¡Ambas lo haremos!

-Lose- sonreí, no sintiendo la misma emoción que sentiría si Ethan estuviera conmigo para decirme un "sabia que lo lograrías" tal como lo había prometido.

"-He aplicado para entrar en la Universidad de Washington.-Comenté mientras lo veía jugar con el anillo que tenía ese día en mi mano derecha.

-Lo lograrás.- Afirmó con una pequeña sonrisa.- Y yo estaré allí para decirte un "Sabia que lo lograrías".

Sonreí antes de estirarme y besarle levemente.

-Gracias por creer en mi."

Al final, si rompió la promesa fue por mi culpa.

-Iré al café, ¿vienes conmigo?- ella tomó su bolso y asintió.

-Llamare a Cameron, Marie me dijo que se van esta noche a Nueva York y quiero arreglar todo con el antes de que se vaya.

-¿Tanta confianza tienes?- pregunte al ver como tecleaba en su teléfono, hizo un mohín con sus labios antes de sonreír.

-Aceptó verme, ¡vamos! ¡Mueve el trasero!- ella fue hasta la puerta e iba a seguirla cuando el brazo de papá se interpuso en mi camino.

-Quiero hablar contigo luego, ¿vale? No todo es como tu crees, no fuiste el motivo de que yo me fuera- baje la cabeza y asentí, todos merecían una oportunidad de dar su versión de los hechos.

-Cuando vuelva hablaremos- respondí, base su mejilla y me dispuse a seguir a Leah.

(...)

-Buenas noches- salude, dando mi mejor sonrisa cuando subi al escenario que tanto tiempo me había acompañado- Hoy voy a cantar una canción que debería haberlo hecho...hace varias semanas.

Comencé a tocar justo cuando veía a Leah sentarse en una de las primeras mesas junto a Cameron.

-No creo que el asiento del pasajero
me haya sentado alguna vez tan bien
El me cuenta sobre su noche
yo cuento los colores de sus ojos.

¿Cuantas veces me había sucedido con Ethan? Cerré los ojos y continúe tocando.

-Nunca se ha enamorado
Lo jura, mientras se toca el pelo con sus dedos
Yo me rió, porque espero que sea mentira
No creo que nunca cruce su mente
El cuenta un chiste, y yo finjo una sonrisa
pero yo se todas sus canciones favoritas.

-Y podría decirte
que su color favorita es el verde
Le encanta discutir
nacido en los noventa
Su hermana es preciosa
el tiene los ojos de su padre
y si me preguntaras si le amo
mentiría.

Lo nuestro se había terminado, ya no me valía de nada mentir.

-Mira alrededor de la habitación
inocentemente da la verdad
no me debería de gustar su caminar
¿no sabe que me ha gustado por tanto tiempo? 

-El lo ve todo en blanco y negro
no deja que nadie le vea llorar
y yo no dejo que nadie me vea deseando que fuese mio.

Aunque...ahora todos lo sabrían y podía apostar, que Cameron le diría la canción que cante.

-Y podría decirte
que su color favorita es el verde
Le encanta discutir
nacido en los noventa
Su hermana es preciosa
el tiene los ojos de su padre
y si me preguntaras si le amo
mentiría.

-El permanece ahí, luego se va
Dios, si solo pudiera decir
que estoy suspirando por el.

El nunca te lo dirá, pero toca la guitarra
Creo que el puede ver a través de todo, excepto de mi corazón
Mi primer pensamiento cuando me despierto es
Dios, el es precioso.

Si podría decirte
que su color favorita es el verde
Le encanta discutir
nacido en los noventa
Su hermana es preciosa
el tiene los ojos de su padre
y si me preguntaras si le amo
si me preguntaras si le amo...
mentiría.- termine de tocar para escuchar varios aplausos, recorrí el café con la mirada para verlo detrás de la barra con una leve sonrisa que intentaba esconder.

¡Se supone que el no estaría!

Sentí mi cara arder así que solo baje del escenario y sin importarme nada fui directo a la mesa de Cameron y Leah.

-Arreglensen todo lo que quieran pero los matare por decirme que el no vendría esta noche, me han hecho pasar vergüenza y lo pagaran tarde o temprano.

-También es agradable verte, Ann- bromeo Cameron, le mostré mi dedo corazón mientras sonreía con ironía- Lo siento pero si vas a cantarle, el debe estar presente.

-¿Acaso estar separados por un par de días les ha afectado? Los matare, el no me perdonara, el no es tan bueno como Cameron.

no espere que me respondieran y fui directo detrás de escena mientras sentía su mirada justo sobre mi, una vez que logre llegar detrás de escenario deje escapar un suspiro y tome mi bolso dispuesta a irme.

¿Que había hecho?

El se iría y yo quedaría pensando en lo idiota que fui al cantar esa canción estúpidamente romántica frente a el...aunque tal vez que supiera lo que siento no fuera tan malo.

La sonrisa no parecía mala señal.