34.No quiero saber nada de ti.

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Poco a poco siento que mi corazón se desgarra por segundos. Siento que la respiración se me corta. Toda mi vida he vivido en una cruel mentira. ¿Acaso yo merezco esto?.

Eso es lo que piensa mi cabeza mientras que busco y desordeno toda la casa. 

¿Que que estoy haciendo? Derek Y Marta , se fueron a trabajar. Nora se fue también a comprar comida. Marta (Es mi madre) Pero no me siento a gusto llamándola así después de todo esto. No se merece que la llame así o si quiera que le diga que a echo bien escondiéndome esto por años. Por ahora no he encontrado nada, pero quiero buscar a mi verdadero padre. Sé algo de Scott, Paúl es su verdadero padre. Y no el mio, la suerte nunca , jamás a estado a mi lado.

Scott me llamó, diciéndome que le perdonara, pero no puedo perdonarle. Se comporto como un verdadero imbécil conmigo. Él sabe toda y cada una de la verdad y no me quiso decir nada. Yo pensaba que los hermanos estaban para apoyarte y decirte la verdad. Pero él a cambiado conmigo desde que vinimos a vivir con Paúl.  Solamente le dije cinco palabras para que terminara la conversación " No quiero saber nada de ti". Ahí finalizo todo, mi hermano me mintió junto a mi madre. Tampoco creo en darle una segunda oportunidad , quizás el tiempo lo diga. Pero no lo creo más que nada porque me a dejado sola en esto.

Sigo buscando en todos y cada uno de los cajones del cuarto de Marta. Pero no aparece nada.Nada de nada.

Me siento en la cama frustrada y agotada. De repente una bombilla se enciende en mi cabeza. Mi tía Adeline. Ella seguro que me podrá decir algo. Adeline, es una de las tías más enrolladas que podréis conocer. Vive en Miami, seguramente si la llamase... y le diga que quiero pasar una semana allí..

Si, exactamente.

Saco el móvil y pongo el número de Adeline.

*Llamando a Adeline*

Piiiiiii.........................

Piiiiiiiiiiiiiiiiii..........................

Pi................................

Piiiiiiiiiiii..........................

-¡Cariño! ¡Por fin llamas!.-Dice una tía alegre.

Pongo los ojos en blanco y suelto una risa.

-Tía,¿Como va todo?.- Pregunto moviendo los dedos nerviosa.

-Genial azucarillo, ¿Y que tal todo con mi hermana y Derek?.-Me pregunta alegre.

-Genial...Todo va bien.-Le miento.

-Oh,¿Y a que se debe tu llamada ?.-Me pregunta.

-Es que como me dijiste hace tiempo de ir allá....Pues pensé que me podría ir una semana o dos.-Le digo finalmente.

-¡Eso sería maravilloso!-Grita emocionada.

Mi tía tan feliz como siempre.

-¿Y me podría ir mañana mismo?.- Le pregunto.

-¡Claro que si Bombón!.-Me dice entusiasmada.

-Pues Gracias, mañana nos veremos.-Le digo.

-Cariño, creo que vendrás de madrugada por los pasajes , seguramente te recoja mi novio.

-Claro, no pasa nada.

-Es porque estoy trabajando bombón.

-Vale, no importa.Hasta Mañana, te quiero.

-¡Adiós , Bombón!.

*Llamada finalizada*

¿Algún día dejara de ponerme motes cursis? Lo dudo.

Escucho voces en el pasillo, así que salgo para ver quien es. En esta zona es raro que se escuchen voces, es una calle demasiado tranquila.

Abro la puerta de casa y no puedo evitar reírme.

-NAAAAAAAAAAASH DALE MÁS FUERTE.-Dice Mathen.

-ATRÁS HIJOOOOO DEL DIABLOOOO-Dice Nash cargando a su perrita y dándole con una maleta a otro perro que intenta morderle.

-NAAAAAAAAASH, MÁS FUERTE. MATALOOOO-Grita Mathen.

Yo me río.

-Maddox , ya basta- Digo.

El perro para de intentar morderle a Nash y se va.

Los dos caen rendidos al suelo.

Por cierto,¿Como me han encontrado?..

Mathen se levanta y coge sus cosas. Y Nash lo mismo.

-Te he encontrado-Me dice, pero no me deja hablar- Y esta vez no te dejaré ir-Dice Mathen cogiéndome la cara con las dos manos.

Yo solo asiento con la cabeza. Le quiero y quiero que este a mi lado.

Le digo que pasen a los dos antes de que formen otro espectáculo.

Le ofrezco que se sienten y después de hablar un rato le explico en un breve resumen lo que a sucedido.

-Oh..lo siento-Dice Nash.

-Te ayudaremos a buscar a tu padre.-Dice Matt firme.

-¿Estas loco?-Dice Nash.

-No , y todos iremos acá tu tía-Dice Matt.

-Mu-Muchas Gracias-Digo quitándome las lágrimas de los ojos.

-Yo voy a ver si hay alguna tienda cerca-Dice Nash.

Nosotros asentimos.

Una vez que se va Nash. Mathen se acerca a mi y con sus pulgares me limpia todo rastro de lágrimas. Me besa los ojos y termina por los labios.

Me besa los labios con delicadeza,como si de una muñeca de porcelana se tratase. Yo envuelvo mis brazos alrededor de su cuello para profundizar el beso. Me muerde el labio y de ahí sale un jadeo que aprovecha para hacer una batalla de lenguas. Me coloco a horcajadas de él. Él me sujeta de los muslos y sube las manos por encima de mis vestido. El beso se vuelve más apetecible, feroz ,salvaje. Como si necesitáramos más el uno del otro. No se en que momento hemos terminado en la cama. Y el encima de mi.

Y.......................

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¡Ese Boxeador es mío! © P A U S A D A Donde viven las historias. Descúbrelo ahora