¿Y si los dueños de las posadas no hubieran echado a Wei Ying?
Una sola acción cambio el destino de Wei Wuxian.
Pertenecer, Wei Wuxian encontró un lugar al que pertenece. No fue maltratado, fue amado y cuidado.
Fue criado lejos del mundo del cult...
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Wei Wuxian comenzaba a hacer su trabajo cuando una mano toco su hombro.
—Tenemos un problema Wei Ying.
Wei Wuxian suspiro y se volteo para verlo.
—Tenemos que darnos prisa para salir de aquí, JinXin. Encárgate tú.
—Lo sé, pero es importante.
Wei Wuxian se cruzó de brazos y suspiro. —¿Ahora que pasa?
Luo JinXin suspiro cansado tocándose un poco los ojos. —estos imbéciles no quieren venir.
Wei Wuxian se cansó y miro a Zhao ZhuLiu que solo rodaba los ojos.
—Esto se está complicando, en cualquier momento vendrán más cultivadores Wen a saber porque diablos su estúpido señor no ha regresado. Tenemos que darnos prisa. —Zhao ZhuLiu hablo.
Wei Wuxian se acercó hasta los herederos y cultivadores con sus dos compañeros detrás de él.
Estos al verlo se callaron.
—No me gusta cuando me causan problemas—Wei Wuxian los miro serio.
—No podemos confiar en ti. —Jiang Cheng hablo. —eres un cultivador que utiliza la energía demoniaca.
—A mi no me interesa si confías o no en mi, mi único trabajo es sacarlos a todos de aquí con vida para que vuelvan con sus familia, así que te lo repetiré nuevamente. Si quiere morir aquí, hazlo, pero hazlo tu solo. Tú no eres nadie en mi vida como para que yo te de explicaciones de que tipo de cultivo tengo. —Wei Wuxian desvió la mirada. —de haberles querido hacer daño lo hubiéramos hecho, pero no es así, así que tienen mi palabra de que saldrán de aquí con vida para reunirse con sus familias, pero eso dependerías que ustedes quieren salir de aquí con vida. De lo contrario no puedo hacer nada más.
Wei Wuxian volvió a darse la vuelta y volver a la espada que saco del caparazón.
Wei Wuxian camino alejándose un poco para revisar el lugar y sentir si había alguna otra fuente de energía resentida. El grito de uno de los cultivadores lo alerto.
Cuando volvió vio a todos sus compañeros apuntando a los herederos. Estaban molesto.
Wei Wuxian estuvo por preguntar cuando vio a uno de sus compañeros agarrarse el brazo, estaba herido.
—¿Qué demonios paso? —pregunto angustiado.
—ShiXiong, estos idiotas nos atacaron. —Uno de los cultivadores de ZhuHai Yanling respondió.
