¿Y si los dueños de las posadas no hubieran echado a Wei Ying?
Una sola acción cambio el destino de Wei Wuxian.
Pertenecer, Wei Wuxian encontró un lugar al que pertenece. No fue maltratado, fue amado y cuidado.
Fue criado lejos del mundo del cult...
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Cuando Wei Ying despertó se sentó en la cama.
Habían pasado dos noches desde que ahora se quedaba con los Li.
Los señores Li habían sido muy amables con él. Según le habían dicho En la mayoría del tiempo toda la familia Li pasaba tiempo en la posada, limpiando o cocinando alguna que otra cosa. Pero eso no era todos los días, otros días la señora Li y sus hijos se quedaban en casa, o al menos eso le habían comentado.
La pequeña puerta de la habitación fue abierta. La hija mayor de los Li lo miraba seria, traía en sus manos un cubo de agua en las manos, Wei Ying solo se estremeció. En los dos días que tenia en la casa no había tratado con las hijas del señor Li.
—Es bueno ver que estas despierto. Debes darte un baño. —El tono de la chica era tranquilo, a pesar de estar algo seria.
Wei Ying solo asintió bajando la cabeza. La pequeña Li Qiang dejo la bandeja en la mesa y se acercó a Wei Ying.
—Vamos, te ayudare a bañarte.
Wei Ying la miro tímido. Lo tomo la mano y lo llevo hasta la bañera, lo ayudo a desvestir y lo tomo en brazos para meterlo en la bañera de madera, Wei Ying solo se sentó como le ordeno.
Li Qiang fue por el cubo de agua y con una pequeña bandeja comenzó a tomar el agua para tirarla encima de Wei Ying. Wei Ying solo se quedo quieto, la única persona aparte de sus padres, que lo habían bañado había sido la señora Li.
— ¿Por qué me ayuda Li Guniang?
—Porque ahora eres mi hermano—La niña contesto con una leve sonrisa.
— ¿Hermano?
—Mmm, mamá y papá han dicho que ahora eres parte de la familia, lo que te hace mi hermano. Una hermana mayor siempre cuida a sus hermanos—Dijo mientras con un poco de jabón lavaba los brazos del niño.
— Pero mis padres.
—Sé lo que paso con tus padres y lamento saber eso, pero ahora estas con nosotros, así que espero que podamos llevarnos bien, de esa manera todo será mejor.
—Sí Li Guniang.
—JieJie.
— ¿ah?
—Puedes decirme JieJie, no Li Guniang. Recuérdalo Wei Ying, ahora soy tu hermana mayor, así que si tienes algún problema acude a mi.
Wei Ying sintió una calidez en su corazón.
Wei Changze y Cangse Sanren que estaban en la habitación sonrieron al ver a la niña tratar de incluir a Wei Ying en su familia.
