Noppera bo (Itanaru)

Capítulo 11

-Vamos mocoso, une el músculo suavemente -el rubio apretó el ceño usando al cadáver para aprender, cuando vió un cadáver por primera vez sintió náuseas, había vomitado un poco, hasta que se armó de valor y comenzó su labor, no podía fallar si quería seguir avanzando, unió un tendón y suavemente el músculo a su lado entrelazando las fibras, respiraba hondo sin soltar el yrio ninjutsu, ni la concentración, sonrió al terminar, la rubia apretó su hombro, Naruto sintió lindo ese acto que había recibido, amaba cuando lo felicitaba -lo has hecho bien, mañana te asignan equipo, iré de viaje unos meses, dejé instrucciones para que puedes entrar y trabajar en esta área- el pequeño asintió viéndola salir, sus viajes constantes lo hacían sentir nuevamente solo, pero ya se había acostumbrado a esa vida, tenerla así era mejor que nada, debía enfocarse, sólo era su sensei, no lograría más, ese sueño retorcido de ser adoptado, no era para él, continuó su trabajo buscando otro cadáver para reparar.

Sacó de un cajón metálico a otro cadáver observando que era un gennin, mordió su mejilla, el chico compartió academia con él, hace dos años se había graduado, lo colocó en la plancha, comenzó a cerrar la herida en su pecho con habilidad desde los órganos, hasta los músculos y la piel, se preguntaba ¿si ese podía ser su destino?, no, él era distinto, no fracasaría, sería el hokage de esa aldea, un shinobi poderoso, respetado y temido, terminó casi treinta minutos después, usó un cuerpo más, su tarea era dejarlos como nuevos para entregarlos a sus familias e hicieran los funerales adecuados, usaba su chakra para transmitirlo al cadáver y repararlo, en un humano vivo necesitaba el chakra del sujeto y suyo para reparar el daño, suspiró con cansancio, gastaba mucho chakra en el iryou ninjutsu.

Al salir se dió una ducha en las regaderas del hospital, olía a cadáver, al salir caminó lentamente entre la avenida principal de la aldea -vaya, nuevamente hueles mal, ¿será algo normal en ti?- Naruto levantó su mirada viendo al pelirrojo que tanto lo fastidiaba frente a él, suspiró con fastidio conteniendo su molestia -bueno, es normal que huela así, vengo de la sala de autopsias donde estaba siendo capacitado -sabía que lo odiaba y demostrar que era superior, lo pateaba en las pelotas, Menma apretó el ceño con coraje- te crees superior, ¿no es así?- Naruto sonrió con burla sin responder, el pelirrojo corrió levantando su puño, el pequeño huérfano era astuto, afiló su mirada, se dejó golpear el rostro por Menma en medio de la aldea- para que sigas sintiéndote superior- 

El rubio sonrió ligeramente, le daría una lección, hizo aguados sus azules- ¿por qué me lastimas?, ¿por ser huérfano?, yo no he hecho nada- Menma abrió sus ojos bastante, giró su mirada viendo a la gente verlo con reproche y molestia, negó con miedo al escuchar los susurros, “es un abusivo” “debe sentirse más que el pequeño por ser hijo del hokage” “que vergüenza” -Oye, ¿qué te sucede?, hace un minuto… -Naruto limpiaba sus lágrimas sentado en el pavimento, se levantó y lo vió con dolor viéndose adorable al mundo, salió corriendo con una sonrisa interna llena de satisfacción y maldad, Menma corrió con miedo a la gente lejos de ahí hacia su casa, se había metido en problemas.

…..

Minato veía con molestia a su hijo, estaba bastante enojado -¿Qué demonios significa que golpeaste a un chico huérfano Menma?- Kushina veía a su marido preocupada, no lo había visto de esa forma antes, el pelirrojo bajó su rostro con miedo a su castigo -pa, no es cualquier huérfano, es Naruto el alumno de tía, el bastardo me tendió una trampa, se cree superior y quería darle una lección -el rubio kage apretó el ceño- ¿cuántas veces te he dicho que debes controlar tus impulsos?, piensa antes de actuar, ¿por qué querrías darle tú una lección?, ¿acaso es tu hijo para hacerlo?, no vengas con pretextos, si tienes envidia de su poder por ser alumno de Tsunade-san, entrena más, no quiero más espectáculos de este tipo, sólo dejaste ver que eres un abusivo ante toda konoha, te lo advierto Menma, ni una más, ahora mismo están castigadas las salidas por la tarde -Menma abrió sus ojos con molestia, asintió viendo a su padre salir de su habitación, Kushina suspiró con fastidio -Menma, los problemas no se solucionan así, no sé cuál sea su problema, pero al parecer el chico te dió una lección ttebane- negó con fastidio saliendo del lugar, Menma pataleó sobre su cama cabreado, era un desgraciado el hijo de puta huérfano.