9. La diosa tailandesa

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POV Lisa.

Estabamos New Jersey, desperté con el cabello de Rosé haciéndome cosquillas en la nariz, me estire lentamente para alcanzar mi reloj y ver la hora, tenía un concierto a las seis de la tarde, pero teníamos que estar cuatro horas antes en el estadio para las pruebas del audio y en la pruebas de maquillaje y vestuario, eran las ocho de la mañana, el aroma familiar de Park me hacía sonreír, el calor de su cuerpo, era lo que me aterraba, ella es una exitosa cantante, usando las mejores marcas, se que ella tiene millones en su cuenta, yo solo tenía unos miles, que pensaba usa para fundar mi propia compañía de escoltas, acariciaba la espalda desnuda de Rosé, era tan extraño decir Rosé, es decir, cogemos todos los días, y cada vez que tenemos oportunidad, la mejor parte era ya no dormir en los sofás, bromeó, lo mejor es estar con esta hermosa rubia, pero sigue siendo mi jefa.

-Buenos días Lili.-Amaba que me llamara así.

-Buenos días preciosa.-Le dije besando sus labios.
-Ya deberíamos levantarnos.-Le avise estirándome, ella respondió pegándose más contra mi y contra mi miembro medio despierto.

-Solo si nos bañamos juntas.-Me respondió.

-Suena bien, será más rápido.-Ella se levantó y admire su desnudez, lo que terminó de despertar mi miembro, y volvió su rostro a mi.

-No, no será en absoluto rápido.-Me dijo sonriendo, me levante casi corriendo tras ella y entre a la ducha, teníamos meses haciéndolo, y ya se volvía tan natural que olvidaba lo que ella era, y lo que yo era, que ella era mi trabajo.
Comencé a besarla y bajar mis besos hacia sus pechos, y cada vez más abajo no dejaba de repartir besos por todo su cuerpo, cuando llegue a su centro, su piel tersa y suave me recibió junto al aroma y sabor que solo ella tenía, ese aroma que me dejaba en blanco, pase mi lengua entre sus labios, llegando a su botón, empuje y me agradeció empujándose más contra mi, levante su pierna izquierda y la coloqué sobre mi hombro, casi enterraba mis labios y nariz contra ella, los espasmos y fluidos me dijeron que había llegado al clímax, me incorporé y comencé a besarla, para luego enterarme en ella, se aferró a mis hombros clavando sus uñas en ellos, un ardor que me gustaba empujaba más duro provocando gemidos cuando sentí cercas el clímax aumente la intensidad de mis movimientos cuando me corrí dentro de ella, Rosé beso mi cuello y yo busqué sus labios.

-Deberíamos salir ya del baño.-Le avise besándola más.

-Lo se, ya deberíamos tomar camino.-Me dijo haciendo un puchero.
Salimos de la regadera y nos vestimos, inspeccione mi traje en el espejo y peine mi cabello, Rosé metió sus brazos dentro de mi saco abrazándome del torso levantó la mirada para verme a los ojos, y yo sonreía al ver ese hermoso rostro frente a mi, incline mi cabeza para alcanzar sus labios.

-¿Todo bien?-Pregunte, no éramos una pareja, pero su manera de actuar, me hacía olvidar que trabajaba para ella, hasta que se volvía una niña berrinchuda y me volvía a tratar como su empleada, pero en momentos así, era mi chica.

-No quiero ir a trabajar, quiero quedarme aquí contigo.-Me respondió, yo la rodee con mis brazos y descanse mis palmas en su trasero.

-Ya casi termina el tour, cuando eso pase, podemos irnos de vacaciones un rato.-Le respondí.

-¿Enserio?-Pregunto y yo alce los hombros.

-Por supuesto, de hecho, tenemos que hablar.-Le dije soltando una mano de su trasero y llevarla a mi cuello, ella me miró preocupada.

-Estoy por dejar a Yang, Jisoo y yo, estamos trabajando en nuestra propia compañía de escoltas.-Le dije y sentí como poco a poco perdíamos el contacto, lo evite pegándola a mi nuevamente.

-¿Ya no me cuidarás?-Me pregunto con ojos tristes.

-Si quieres, puedes contratarme.-Le dije besando sus labios.
-Pero podré decidir si ya no quiero trabajar para ti.-Bromeé ganándome una palmada en el brazo.
-Bromeo, amo trabajar para ti, Park.

-¿Cuándo pasará?-Pregunto recargando su cabeza en mi pecho.

-Para cuando termine el tour, mi contrato con el terminara, y hablaré con Yang, hablaremos.-Le explique de mis planes y como me estaba asociando con Jisoo, para luego darle unas palmaditas.

-Es hora de irnos.-avisé tomando sus cosas, a pesar de lo que hacíamos, seguía siendo su guardaespaldas, me coloqué el auricular y comencé a organizar al equipo, salimos y Rosé tomó mi mano, por un momento me aturdió esa intimidad, no parecía su guardaespaldas, parecía su pareja que la cuidaba, ¿y si eso afectaba mi compañía antes de iniciarla? Mi credibilidad y profesionalismo podría verse  afectada.
Cuando entramos al auto encendí mi móvil, tenía notificaciones cada que se publicara algo de Rosé, me sorprendió ver mis fotos, es decir ya había visto comentarios y algunos videos, pero en esta ocasión me llamaban "la diosa tailandesa" esa era buena publicidad.

-¿Que ves?-Pregunto Park recargándose en mi pierna, espiando mi móvil.

-Estoy trabajando.-Le respondí besando su cabeza.

-¿Te estás viendo? ¿Me estás viendo?-Me vio burlona.

-Por su puesto, es trabajo, necesito saber lo que están publicando de ti, así sabré si alguien publica o menciona que estarás en algún lugar.-Le explique, Rosé asentía y me veía sorprendida, ¿Acaso nunca lo había hecho alguno de su equipo de seguridad?

-Te llaman la diosa tailandesa.-Me dijo con una mirada intrigada.

-Si, lo acabo de ver.-Le respondí mientras continuaba deslizando la pantalla.

-Y eso que no saben los milagros qué haces.-Enarque una ceja al no entender a qué se refería, se acercó a mi oído.
-en la cama.-Susurro, yo sonreí, y de no ser por el chofer la habría besado, tome su muñeca y la lleve a mi miembro y ella lo acariciaba, sabía que estaba roja, pero no era rubor de vergüenza, era la sangre que estaba subiendo y bajando por todo mi cuerpo con su contacto.

-Hemos llegado.-Nos aviso el chofer sin moverse, quizás noto nuestra, situación.

-Gracias Charles.-Respondió Rosé, la rubia era tan atenta que recordaba el
nombre de las personas de su equipo, así no fuesen los mismos.
Como cada vez que llegábamos a nuestros destinos, cuidaba a Rosé, me aseguraba que estuviese cubierta, que nadie se le acercara y cuidar su espalda.
Estuve cuidando a mi chica cuando estaba en la prueba de audio, veía a Rosé y al público, asegurándome no hubiese algún loco intentando saltar la barandilla, su interacción con Jennie era adorable, y vi a Jisoo cuidando con recelo a Kim, por un momento parecía que la cuidaba como yo a Rosé, vi como varias veces Rosé se tropezó y estuve a punto de saltar al escenario para evitarlo, pero nunca pasó a mayores, el concierto fue asombroso, ella era otra persona en el escenario, una que podría observar, sus canciones ya la conocía, y aunque las canciones era las mismas el dueto se esforzaba en que cada concierto en hacer algo diferente.

Cuídare de ti Chaelisa (GIP)Where stories live. Discover now