el guardia del dragón

Capítulo 13[ Las Penurias Se Superan Con Comida]

- espere Ryuko-san! - alcanzó a tomarla de la mano aumentando el enojo de la rubia

Ryuko- ya ah hablado mucho no le parece? Tengo cosas que hacer- dijo lo más calmada que podía en esos momentos a pesar de querer golpear al tipo

- en verdad yo creo que debería reconsiderar la idea de que salgamos más a menos que quiera que algo malo suceda con su empresa- sonrió creyendo tener a la rubia en mala posición

Ryuko- vaya... Usará el hecho de ser un inversionista simplemente para que sea algo suyo? Lo siento pero no me importa si es mi inversionista, el actor más famoso del mundo o incluso el ser más perfecto de la creación, no me interesa- el tipo se sorprendió, cosa que aprovechó la rubia para salir de su agarre- ahora si me disculpa tengo que conseguir a otro inversor... - sin más comenzó a caminar asumiendo este caos cómo si nada

- en verdad cree que puede rechazarme?! - gritó con rabia, ninguna mujer antes le había rechazado- sabe que puedo hundir a su empresa verdad?!

Ryuko- haga cualquier cosa, estoy segura de que quien terminará mal parado será usted- miró por sobre su hombro con bastante superioridad- no crea que no se los rumores que están tras de usted... Y si desea mantener su fortuna recomiendo calmarse... - el tipo le miró asombrado antes de enfurecer

- usted no sabe nada de mi- la mujer sonrió de lado dándose vuelta

Ryuko- se que está en problemas por ciertos tratos con ciertas chicas que exactamente no eran muy legales- dejó a la imaginación del sujeto la idea

- eso es una acusación falsa y ya lo demostré- se defendió con arrogancia

Ryuko- si pero ya hay miradas sobre usted y yo estoy totalmente limpia lo que significa que si algo llegara a pasar la justicia dudaría de usted y estaría más de mi lado no? - el hombre sudó frío ante lo que mencionaba la rubia- que pasaría entonces... Cuantas empresas le darían la espalda simplemente por dicho escándalo...- actuó con bastante inocencia, cómo si fuera natural el hacer esto

- tsk... - apretó los puños con rabia, estaba acorralado- que es lo que quiere? - habló aceptando lo que decía la mujer

Ryuko- esto es lo que sucederá, usted dejará de ser inversionista de mi empresa inmediatamente, no hablaré de absolutamente nada de lo que se ah dicho hoy y ambos seguiremos nuestros caminos- el tipo asintió, era algo bastante simple- pero si llega a cruzarse conmigo de alguna manera, me aseguraré que la gente sepa con que clase de persona se están metiendo

-entendido... - murmuró con rabia contenida

Ryuko- bien... Me alegro aclarar las cosas- con una sonrisa astuta se retiró dejando al tipo irritado en medio de la calle

Su día había sido arruinado y eso se dejó ver fácilmente a cualquiera que se le cruzara, su mirada de hielo podía paralizar a cualquiera que estuviera frente a ella.

Fue el día bastante más largo de lo que esperaba pero por fin había terminado y estaba frente a casa, cansada y bastante irritada por todo, lo peor era que aún tenía que hacer la cena y hacer que Ryuta se duerma antes de preparar todo para el día de mañana, ni siquiera quería pensar en mañana dado que quería enseñarle a Ryuta y eso tomaría bastante.

Soltó un suspiro abrió la puerta de casa, al instante a su nariz llegó un olor bastante bueno que casi le relaja. Sorprendida caminó tras dejar sus cosas en la sala hacia la cocina admirando a su niña comer en el comedor un plato de Katsudon mientras el niñero tarareaba algo en la cocina.

Ryuko- que está sucediendo? - habló aturdida llamando la atención de ambos allí

Ryuta- mami! - la niña bajó de la silla y abrazó las piernas de su madre

Ryuko- hola Ryuta - sonrió acariciando el cabello de su niña

Izuku- bienvenida a casa Ryuko-san- sonrió con un cucharón en mano- me alegro que haya llegado bien

Ryuko- que está haciendo Midoriya-san? - el pecoso sonrió dejando el cucharón a un lado, tomando una olla y caminando con ella a la mesa

Izuku- supuse que llegaría agotada tras un día de trabajo así que con ayuda de Ryuta-chan decidimos hacer una cena perfecta para usted puso delicadamente la olla en la mesa sonriendo a la mujer- me hubiera gustado preparar algo mucho más sofisticado pero lo único que se preparar es Katsudon lo siento por eso

Ryuko- no descuide, agradezco el gesto- sonrió aturdida de esta muestra de agradecimiento

Ryuta- yo ayude a hacerlo! - habló orgullosa de si misma

Ryuko- en serio?! Entonces más vale comerlo- tomó a su niña y se sentó con ella oliendo la comida- huele exquisito...

Ryuta- prueba mamá! - la mujer tomó un poco en un plato, mirando con cariño lo preparado

Ryuko- provecho... - dio un sólo mordisco sintiendo que sus problemas se esfumaban- esh ricoh- habló con la boca llena

Izuku- gusta algo de tomar? - la mujer asintió con alegría

Ryuko- en la alacena hay un vino, me gustaría una copa- el peliverde asintió yendo a la cocina- acompañame a comer Ryuta- la niña asintió sentándose nuevamente y comiendo lo quw había dejado en el plato

Izuku- aquí tiene- puso la copa frente a la mujer quien sonrió dando un sorbo- y esto para Ryuta-chan- puso un vaso al lado del de su madre

Ryuta- gracias! - sin más siguió comiendo haciendo sonreir al pecoso

Ryuko- pero no se quede allí Midoriya-san, coma también- el pecoso se avergonzó un poco

Izuku- no creo que sea lo correcto, es una cena familiar entre ambas, yo estoy bien- sonrió complacido de ayudar

Ryuko- de que hablas? Vamos come tu también, me harás sentir mal si no lo haces- el pecoso soltó un suspiro negando antes de sentarse frente a madre e hija

Izuku- provecho... - sin más sirvió en su plato comenzando a comer junto a madre e hija pareciendo una familia bastante alegre