- Harper - 1

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No puedo creer que voy llegando tarde a mi primer día en despacho, tal vez si no me hubiera quedado hasta tarde viendo esa serie de vampiros no estuviera corriendo.

Hace unas semanas me dieron la increíble noticia de que me quedé con el empleo en el despacho Dubois, no creí que de verdad fuera a quedar, no por que dudara de mis capacidades sino por que es la mejor en la ciudad y la competencia estaba muy reñida, en la última entrevista estábamos 2 de los mil que aplicamos al trabajo.

Me he estado esforzando al doble desde aquel accidente, todavía tengo secuelas como desmayos o esos dolores de cabeza intensos cuando veo algo "familiar", tal vez fui una mala persona y por eso nadie me buscó; cuando desperté en esa cama de hospital creí que estaba naciendo, no sabía quién era y el accidente me había lastimado al grado que tuve que estar meses en recuperación, durante esta etapa se descubrió que la persona que estuvo conmigo en el accidente murió, tenía el apellido Collins, también encontraron en el coche un anillo.

Supongo que era mi pareja, no tengo recuerdos de él, pero tengo esa sensación de que lo quería mucho. Nunca encontraron mi identificación o pertenencias, en su honor adopté su apellido y pedí que me llamaran Harper ya que la enfermera que me cuidó y apoyó en esos años siempre quiso una hija que se llamara Harper y yo llegué a apreciarla mucho.

Al llegar al edificio siento una mirada intensa sobre mi pero no logro ver quien era..., tal vez fue mi imaginación.

-Primer día y llegas tarde eh, no es la mejor primera impresión Collins- volteo asustada a la mujer rubia de ojos miel, intento sonreírle, pero me mira demasiado seria – Te lo dejaré pasar por que me pasó a mi y creo en las segundas oportunidades, te espero en la oficina-creí que estaba molesta hasta que vi que me guiñó cuando se cerró el elevador.

Genial, mi compañera va a pensar que soy impuntual, debo ver la forma de que mi trabajo hable por mi. Cuando llego al piso me recibe una castaña de ojos azules con una hermosa sonrisa.

-¡Hola! Soy la Licenciada Hale, pero me puedes llamar Gigi- siento como toma mi brazo y me lleva a un recorrido por las oficinas- soy del área de Administración pero me encargaron darte el recorrido por las oficinas.

-Muchas gracias por tomarte el tiempo- extiendo mi mano- Soy la abogada Collins pero me puedes decir Harper- me estrecha la mano y seguimos caminando- Me dijeron que me tengo que presentar con mi jefa directa la Lic. Müller y voy tarde, ¿te importa si me llevas con ella y más tarde seguimos platicando?

-Claro, te llevo, aunque déjame advertirte que ella es muy estricta y no tolera los retrasos, así que reza por que des una muy buena impresión – llegamos a la oficina y me vuelve a sonreír- Aquí estamos, te busco al rato en la hora de la comida y continuamos con el recorrido- se va dejándome rezando un padre nuestro para que mi jefa no me mate por llegar tarde.

Gigi se ve buena persona, espero nos podamos llevar bien.

Tomo valor y toco la puerta hasta que escucho un Adelante, cuando creí que nada podía seguir saliendo mal en este día hasta que me doy cuenta que la mujer que hace rato me guiñó el ojo resultó ser mi jefa y en estos momentos no se ve con el mejor humor.

-Vaya, hasta que llega Collins, creo que no me presenté hace rato. Soy Stella Müller y estarás en mi equipo- intento sonreírle, pero termina en mueca- ¿Hay problema con eso?

Dios, que vergüenza.

-¡No!- grito y ella levanta las cejas – Disculpe la demora y no tengo problema en trabajar de la mano con usted – una sonrisa arrogante aparece en su hermoso rostro.

- Bien, lo de hoy se lo dejo pasar ya que es el primer día, pero debo decirle que en mi equipo no hay errores ni retrasos, duda que tengas duda que me tendrás que consultar – siento que eso último lo quiso decir con otra intención al sonreír de lado- El día de hoy trabajarás con el abogado Smith y al final de cada día vendrás con reportes de los casos que se te asignen.

Mi estrella perdidaDove le storie prendono vita. Scoprilo ora