Capítulo 3: Destino

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—Es por qué la tengo.— dijo Ally.

(...)

Saliendo de la joyería Lauren sé puso en marcha directo a su departamento, una vez que llegó ahí marco el número de Verónica para agradecerle el hecho de haberle recomendado aquel lugar.

Lauren había quedado satisfecha con el anillo que le había comprado a su amiga.

—Lauren.— se escuchó la voz de Verónica a través del celular de Lauren.

—Hola,— dijo Lauren un poco entusiasmada.— En verdad ese lugar es maravilloso, tenían muchas cosas, Verónica me has salvado la vida.

—Te lo dije Jauregui, nunca dudes de mis habilidades.

—¿Te veo en la fiesta de Keana?.— preguntó la empresaria.

—Claro, iré con Aaron, te juro que no se como quitarmelo de encima, es muy aaaaaagh ¿me entiendes?— dijo Verónica.— No se como decirle que ya no quiero estar con él, siento que rompere su corazón, no es que no lo quiera más bien es que ya no siento esa chispa ¿sabes? no es lo mismo, me aburre. Pero basta de mi, ¿con quien irás tu?

—Creo que llevaré a Matty.— bromeó Lauren.

Matty era la mascota de Lauren, aunque para ser su perrito lo tenía muy bien cuidado, de hecho era la única compañía que Lauren tenía cuando se iba todas las noches a dormir.

—¿Que hay de la chica que conociste en la boda de tú tía?— preguntó Verónica.

—No supe más nada de ella. — dijo Lauren en tono serio.

—¿No te dio su número?

—Si pero...— Lauren fue interrumpida brutalmente por su amiga, quien casi le gritó.

—¡Pero nada Lauren!— empezó a decir Verónica.— Colgando esta llamada, marcaras su maldito número y la invitaras a la fiesta ¿entendido?

—No puedo hacer eso, por dos razones.— dijo Lauren.— Si ella hubiera querido hablar conmigo lo habría hecho, ¿tiene mi número no?, y la otra razón es que tu sabes lo que Keana siente por mi y llegar así a su fiesta no creo que...

—Lauren quizá asustaste a esa pobre chica con tu actitud de egocéntrica,— interrumpió Verónica.— ¿Cuantas veces te he dicho que así no harás amigos?

—Tampoco es como si quisiera hacerlos.— dijo Lauren rodando los ojos.

—Promete que la vas a invitar ¿si?— suplico Verónica.— Y sobre lo de Keana, Lauren ¡s-u-p-e-r-a-l-o! ella ya lo hizo, no te claves.

—No prometo nada. Sería muy extraño Vero, apenas y la conocí, me vería muy acosadora.

—Es mejor que conozca ese lado tuyo desde un principio.— dijo Verónica entre risas.

—Como digas, te voy a colgar porque, Matty me está pidiendo de comer, besos.

—Esta bien, te veo en la fiesta Lauren.

Lauren colgó la llamada, pensando en lo que Verónica le había dicho anteriormente, tal vez si sería una buena idea después de todo.

Después de servirle croquetas a Matty, Lauren fue a ponerse su ropa de dormír.

No dejaba de pensar en la posibilidad de invitar a Camila, su mente daba vueltas alrededor de eso.

Bloqueaba y desbloqueaba su celular, pensaba que si se lo pedía, obtendría un rotundo no como respuesta.

Pero eso era algo que nunca sabría si no lo intentaba. Como todas las decisiones que Lauren tomaba en su vida debían ser debidamente calculadas, decidió que sí, si iba a pedirle a Camila ir con ella, lo que no sabía era como pedírselo, pensaba mil maneras de pedirlo. Pero sin duda tenía que ser de una forma en la cual Camila no se negará.

Lauren sabía bien que no podía chantajearla con lo que ella había hecho, eso iba contra su ética.

Entonces ahí se encontraba lauren, en su cama, mirando hacia la nada, pensando miles de opciones, pero ninguna complacia sus expectativas.

Decidió irse por lo simple y lo común, algo que Lauren nunca hacia. Comenzó a escribir un mensaje de texto.

«Lauren: ¿Estas ocupada el jueves por la noche?»

Mientras que del otro lado de Nueva York, Camila se encontraba bajo la regadera, disfrutando de todo lo que un baño pudiera darle, Camila se estaba relajando. Prácticamente fuera de si, no media el tiempo.
Pasaron 15 minutos y Camila seguía disfrutando del agua caliente pasar por su cuerpo.

Lauren ya estaba maldiciendose a sí misma, en ese momento se odiaba, ¿Porque le hizo caso a Verónica? de todos modos, ¿Que estaba pensando cuando envió el mensaje?

Camila salió de la regadera, y aún con sus manos chorreando de agua, tomó su teléfono para ver sus notificaciones.

1 Mensaje de Lauren.
2 Llamdas perdidas de Sandra.

Abrió primero el mensaje, decidió que después le devolvería la llamada a Sandra o en el mejor de los casos, esta le volvería a llamar.

«Camila: Ver  "iZombie" durante toda la noche ¿cuenta?»

«Lauren: Quería invitarte a una fiesta, pero ya veo que tienes cosas que hacer :(»

«Camila: ¿Me estas invitando? ¿Porque a mi?»

«Lauren: Sí, y no se Camila sólo paso por mi mente ¿quieres ir?»

«Camila: Checo mi agenda y te confirmo...estas de suerte, tengo día libre :p»

«Lauren: ¿Eso significa...?»

«Camila: Eso significa que no Lauren, lo siento tengo el día libre, y no haré nada, por eso no podré ir, ¡Obvio que si Lauren!»

«Lauren: Paso a las 8 el jueves ¿te parece?»

«Camila: Sip»

Camila estaba tratando de digerir lo que había pasado, en realidad no podía creerlo. Después Camila se dio cuenta que aún estaba en el baño, así que empezó a secar su cuerpo, y se puso su ropa.

Se dio cuenta de que estaba sola, pues Dinah no había llegado aún, lo cual era raro porque ya era tarde. Pero no se preocupó tanto, sabía como era esa chica, seguramente estaba en un bar o algo así, nada de que preocuparse.

Se metió bajo las sábanas lista para irse a dormir, pero fue imposible, su celular sonó de nuevo, anunciando la llegada de un nuevo mensaje de texto, era de Lauren.

«Lauren: Camila dime algo ¿lo estás haciendo por compromiso? porque si es así no tienes que hacer, de verdad, Camila.»

Camila lo reflexionó antes de contestar, lo cierto era que una parte de ella le decía que debía hacerlo por agradecimiento, pero la otra parte le gritaba '¡tienes que conocerla más!', Camila sentía esas ganas indescriptibles de querer saber más de Lauren Jauregui, quería saber porque era como era.

El idioma de las estrellas (Camren)Where stories live. Discover now