• Libro extra de Exótico.
JooHee ha conseguido lo que siempre quiso tener en su vida, estabilidad para ella y su familia. Dicha estabilidad parece tambalearse cuando HeeRan descubre que su madre fue dama de compañía en el pasado, esto creará un pequ...
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HeeJin apoyó sus brazos de la encimera colocándose de puntitas viendo a su madre quien preparaba huevos revueltos en el desayuno. JooHee sabía que quería algo, siempre lo hacía cuando quería algo. A donde se moviera, HeeJin la seguía por la cocina.
—¿Qué tanto me ves, cielo?
—¿Te sientes mejor?—quiso saber un poco preocupada—Unnie te hizo llorar anoche y estoy molesta con ella por eso.
—No tienes que enojarte con HeeRan.
—Pero, omma...
—Estaba muy cansada ayer, a veces cuando nos sentimos muy cansados podemos llorar.
Eso no la convenció para nada. La niña de once años hizo una mueca, su cabello caía liso como el de su madre por su espalda, con el crecimiento tenía parecido tanto a JooHee como a Sehun.
—¿Sabes que tengo once años y no puedes mentirme como a JunHee?
JooHee sorprendida la miró.
—A ver, jovencita. ¿Desde cuándo creciste tanto para exigir explicaciones?
HeeJin sonrió angelicalmente.
—No lo sé, pero quiero respuestas.
—¡Omma!—JunHee fue corriendo a ambas—Appa llegó con unnie.
Las tres fueron al recibidor viéndolos entrar por la puerta. El rostro de HeeRan se veía un poco hinchado, su nariz tenía un color rojizo, JooHee sintió su instinto maternal gritarle que la abrazara, si lo hacía, era probable que la rechazara.
—Iba a comenzar a servir el desayuno—comentó—Debes tener hambre, cielo.
—No lo tengo. Iré a mi cuarto—antes de poder moverse, JungKook la detuvo de la muñeca indicándole con la mirada que hiciera lo que acordaron, JunHee y HeeJin intercambiaron una mirada sin saber que ocurría.
Su hermana mayor nunca se comportaba así.
—Lamento las cosas que dije—mantuvo la vista en el suelo—Iré a mi cuarto para hacer mis deberes.
—No has comido nada, cielo, deja que te suba el desayuno...—al hacer el intento de acercarse. HeeRan retrocedió soltándose de su padre, fue a las escaleras subiendo sin decir nada más.
JooHee aclaró su garganta callando el sollozo que quería salir. Parpadeó varias veces ocultando las ganas de llorar, JungKook le sonrió un poco indicándole que estaba bien.
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Unos toques a la puerta sacaron a HeeRan de sus deberes de matemática. Tenía algo de música suave en su laptop para calmar las cosas que tenía en la cabeza, hacer las tareas estaba ayudando para distraer su mente, luego de tomar un baño se encerró en su habitación para evitar ser molestada. Había intentado llamar a BongDae sin obtener respuesta, ni siquiera respondía sus mensajes. ¿Qué le había dicho su padre exactamente?
