XC. Quejas

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Jin miró a Kakashi y Sakumo regresar enojados, la frustración era evidente en sus rostros de ceños fruncidas y el aura malhumorada que los rodeaba, por lo que una suave sonrisa surgió en su rostro y sus mejillas se sonrojaron ligeramente al pensar en cómo Obito debió hacer escapado de estos dos tontos albinos sobreprotectores.

Señorita... —la sonrisa de Jin rápidamente se vio borrada cuando vio la mirada de Sakumo y se escondió detrás de su papá con una mirada de chihuahua aterrorizada mientras temblaba intensamente— Cariño —saludó cálidamente el albino y Jin suspiró aliviada—. ¿Sabes lo que hizo tu hija en tu ausencia?

—¿Qué hizo? —preguntó Banri mirando a su hijita temblar y ser adorable detrás de su espalda.

—Se consiguió un canalla —Sakumo se cruzó de brazos mientras tenía una mirada de desaprobación en su rostro y Banri alzó una de sus cejas mirando intrigado a su pareja.

Hum, ¿Puede créelo, Banri-san? ¡Se consiguió un novio! —se unió Kakashi en sus quejas como su padre, mirando decepcionado a Jin como si hubiera pecado e ido en contra de la aldea en un ataque genocida o algo por el estilo.

—Oh... ¿Se refieren a Obito-san? —preguntó Banri ladeando ligeramente la cabeza confundido e intrigado mirando a su esposo e hijastro con auras asesinas juguetonas.

Si utilizaran sus auras asesinas, él sin duda caería K.O al instante, lo mismo sucedía con el aura de su hija, por lo que los tres shinobis han acordado tácitamente a utilizar versiones simplificadas y juguetonas de aspectos más violentos de su rubro shinobis a su alrededor para no lastimarlo inconscientemente al no controlar su fuerza.

Eso no quiere decir que cuando Kakashi, en sus escasas veces que trae amigos a su casa, no le lance Kunais y shurikens de manera juguetona a sus camaradas y estos se lo devuelvan, lo mismo sucede con Sakumo o con Jin, la cual traería a sus amigas a menos, lo que llevaría a algunas peleas entre ellas que puede o no destrozar algunas paredes.

O cuando traer a su grupito para hacer sellos, Kushina-san era la que más rápido se frustraba si no salía como quería y destrozaba algunas cosas por accidente con su ira. Lo único bueno es que sabe que jamás lastimarían conscientemente a su hija, por lo que hace oídos y ojos sordos a las atrocidades que se hacen de vez en cuando en una de sus habitaciones que designaron para crear sellos de vez en cuando en una especie de laboratorio extraño.

Su esposo era el más discreto, usualmente solo traería a los tres Sannin y Dan a alguna noche de copas, con los cuales se desarrollarían ciertos juegos de azar y ocio, la única manera en que Tsunade no pierda dinero real jugando fue en el juego "Monopoly" que Jin diseñó, pero también evidenció que la mujer tenía una suerte horrible, porque siempre caería en las penalizaciones como si el juego estuviera arreglado para hacerla caer.

En serio, era ridícula su suerte, ¿Cómo seguía viva? Las probabilidades eran demasiado bajas como para que Tsunade le saliera todo lo malo, pero así sucedía y Banri podía entender su furia asesina, lo que no podía comprender es qué le hicieron sus pobres muebles para recibir tanto odio.

Al menos es menos destrucción porque Dan-san sabía como controlar a su mujer cuando está enojada, de lo contrario, Banri teme que derriben su casa incluso con todos los sellos de protección que puso Jin para asegurar su seguridad.

Y Jiraiya... bueno, era bastante normal y sencillo, con alguna que otra broma acertada por aquí y por allá, podía entender porque era amigo de su esposo... hasta que empezó a soltar alguna que otra obscenidad y decía ser orgullosamente un pervertido. En ese momento, Banri quiso echarlo de la casa, ¡Si este hombre era capaz de espirar baños públicos y aguas termales, Banri no lo quería en su casa! Él tenía a una preciosa hija a la que cuidar, ¿Cómo podría hacer que compartiera techo con un pedazo de mierda como esa?

So Simp [Yandere! Uchiha Obito]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang