Enamorando A La Escoria

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Sus manos acariciaban suavemente su vientre, sus lágrimas caían por sus mejillas, estaba feliz, había logrado salir de ese lugar y asegurar la seguridad de sus hijos.

__Yibo, ¿Cuando vendrás por nosotros? Esto es una horrible pesadilla, tengo miedo de que nos encuentren y que está vez no pueda hacer nada por proteger a nuestros hijos__ sollozo Xiao __quiero que toda esta pesadilla termine, quiero ser feliz con nuestros hijos y...contigo, además aún no te e perdonado, no puedes morir en batalla, tienes que venir por nosotros, tienes que pedirme perdón... Tienes...tienes que estar para el nacimiento de nuestro bebé__ Sus lágrimas caían en silencio para no despertar a A-Yuan.

El miedo lo mantenía despierto, temía que si cerraba sus ojos esos hombres volverían por ellos, que está vez lograrán lastimar a sus hijos.

__Yibo... ¿Que crees que sea nuestro bebé? ¿Un fuerte y hermoso niño? O ¿Una pequeña y hermosa princesa? Dime... Por favor; ven por nosotros pronto, nuestros hijos esperan por tu regreso, yo también lo espero...quiero que nos lleves a casa__ La mano derecha de Xiao acariciaba con cariño la mejilla de A-Yuan y su mano libre protegía su vientre __sabes nuestro bebé es muy fuerte, a pesar de casi tener un aborto se aferró a mi, no importa cuánta sangre perdí se mantuvo fuerte, y nuestro A-Yuan...el fue nuestro salvador, cuando caí inconsciente corrió a buscar ayuda, lograron salvarnos a tiempo, nuestros hijos son valientes y fuertes como tú, el valiente emperador__ la mirada de Xiao mostraba su tristeza.

Las cosas entre él y Yibo no habían estado bien cuando todo esto inicio, no pido despedirse de la persona que amaba, tampoco pudo decirle que se cuidara, que saliera victorioso en batalla.

__sabes, las personas que nos ayudaron son muy buenas, gracias a ellos pudimos salvar a nuestro bebé, cuando desperté A-Yuan estaba con ellos, me contaron que ellos perdieron a su hijo antes de que naciera, todo por un ataque que Pei había hecho hace mucho tiempo aquí mediante tus ordenes, si el bebé no moría tendría la edad de A-Yuan, a pesar de saber que somos tu familia nos ayudaron, por qué ellos no guardan rencor hacia ti, por qué no soportarían que una persona perdiera a su bebé, no como ellos lo habían hecho, cuando vuelvas por nosotros te traeré de las orejas aquí y haré que pidas perdón a estás amables personas, que por tu sed de venganza habían perdido a su hijo, ten en cuenta eso__ Xiao seco sus lágrimas.

Una pequeña sonrisa se formó en su rostro mientras acariciaba su vientre, su bebé se movía intentando calmarlo, su corazón dolía al saber que Yibo no pudo sentir a su bebé moverse o dar pataditas cuando el bebé se sentía feliz, cuando le hablaba de él o cuando A-Yuan le hablaba.

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La sangre adornaba el suelo junto a los cuerpos de cada traidor que se atravesó en su camino, su espada atravesaba y cortaba a sus enemigos de manera lenta y dolorosa.

__piedad! Por favor piedad su majestad__ lloraban algunos hombres callendo de rodillas.

Una risa escapó de los labios de Yibo mientras levantaba su espada y mataba a los hombres que había acorralado.

__piedad? Valla así que conocen esa palabra, pero por qué no tuvieron piedad con las personas inocentes que murieron en sus manos díganme! O ¿cuando se atrevieron a quemar el lugar donde se encontraba mi consorte junto a mi hijo? ¿Acaso tuvieron piedad con ellos en algún momento? No ¿Verdad? Entonces por qué debería tener piedad con ustedes, no es lo mismo? Jaja__ Reía Yibo blandiendo su espada.

__seguiamos órdenes majestad, lo sentimos mucho, tenga piedad, tenemos una familia a la cual proteger__ Lloro un hombre.

La mirada de Yibo termino sobre ese hombre en especial, conocía exactamente de quién se trataba y volvió a reír ante esas palabras cuan loco.

__familia? Me vienes tú a hablar de la palabra familia! ¿Cuando tú maltratas a tu esposa? ¿Cuando golpeabas y dejabas sin comer a tus hijos? Eso es proteger a tu familia? Jaja pero me preguntó ¿A qué familia piensas proteger? Ya no te queda nada, tu familia murió en el ataque donde se encontraba mi familia señor Li, yo perdí lo que más amaba y tu también así que solo acabaré con la escoria en este mundo, así que nos veremos en el infierno__ Grito Yibo lleno de furia.

Su espada atravesó cada cuerpo, la sangre brotaba manchando el suelo, formando charcos de sangre, su furia crecía más, solo buscaba una cosa matar a Pei y por fin reunirse con su familia.

__A-Zhan falta poco para ir con ustedes, pronto estaré a su lado, estaremos juntos por siempre__ Yibo miro el cielo y dió una pequeña sonrisa antes de seguir en su masacre.

Todo aquel que se atravesaba en su camino era asesinado sin piedad alguna, sin importar las suplicas de piedad, si ellos no habían tenido piedad con su familia, ¿Por qué tenía que piedad contra sus enemigos?.

__por favor, perdone mi vida, le diré dónde está el general Pei__ Hablo un hombre completamente herido y sin un brazo.

__dime ¿Dónde está ese perro traidor ahora? Habla__ Grito Yibo

__èl escapó anoche, fue hacia un pueblo pequeño a unas cuantas horas de la mansión que incendiamos en busca de su consorte, él está herido y fue a refugiarse ahi__ hablo el hombre entre temblores.

La mirada de Yibo brillo y le cortó la cabeza al hombre, con todo descaro ese bastardo le había dicho que el había estado en el ataque de su familia.

__Pei, ya te llegó la hora de ir al infierno__ Gruño Yibo y se dió la vuelta para ir con sus tropas al lugar donde se encontraba Pei, el lugar donde acabaría todo.

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Un extraño ruido proveniente del patio lo hicieron ponerse alerta, se levantó con cuidado para no hacer ruido, a pasos lentos y silenciosos se acero a la ventana donde observo a su némesis.

__valla, valla, te atreviste a venir a mi, no te dejare lastimar a mi familia y a los que me ayudaron__ Xiao tomo un palo que encontró en la cocina y decidido camino a la puerta.

El destino estaba a su favor al traer al traidor del imperio a la puerta de sus salvadores.

Holii, espero que les guste este capítulo, nos vemos el jueves besitos 💕, tomen agüita y cuidense mucho.