Marbella: Porque los problemas nunca son suficientes

Preparativos

A la mañana siguiente Toni se levanta temprano para preparar el desayuno mientras el aroma del café recién hecho llena la cocina. Mientras está ocupado con los huevos revueltos y las tostadas, escucha a Carlo entrar en la habitación con una energía característica.

-¡Antonioo! -exclama Carlo, saludando con entusiasmo.

-¿Como que Antonio? -dice Toni confundido por el cambio de nombre.

-Sí, Antonio de Toni, ¿no? He escuchado a los españoles dicen: "¡Antonio!" -explica Carlo, con una sonrisa traviesa.

-No, no yo soy Toni, bueno pues yo te voy a llamar Carlos -responde Toni, jugando junto a la broma.

Ambos hermanos comienzan a bromear, disfrutando de su complicidad matutina.

-¿Cómo estás, Carlos? -pregunta Toni, manteniendo la broma.

-Todo bien, Antonio. Me ha contado José que ahora mismo eres una sugar baby -dice Carlo entre risas.

-¿Una sugar baby? ¿Porque? Porque tengo dinero? -pregunta Toni, confundido.

-No, porque tienes un sugar daddy, ¿no? El chino que te da dinero es tu sugar daddy y tú eres su sugar baby -explica Carlo, riendose con la idea.

-No, no me regaló nada, simplemente le gané en el billar -aclara Toni, riendo ante la absurda conversación.

En ese momento, el teléfono de Carlo suena con una llamada entrante, mostrando el nombre "chino misiones" en la pantalla.

-¿Quién es "chino misiones"? -pregunta Toni, intrigado por el apodo.

 Es Hai -responde Carlo, con una sonrisa pícara, mientras ambos estallan en risas ante la situación.

-¿Qué tal, Hai? -dice Carlo contestando la llamada.

-Hola, Carlo. Ayer le comente a tu hermano sobre un golpe que podemos hacer en estos días, necesitamos tus habilidades y las suyas para hacerlo posible. Reunámonos y organicemos todo.

 -Entiendo. ¿Dónde y cuándo será la reunión?

-Vamos a encontrarnos en un bar más tarde. Avisa a Jose y asegúrate de que esté allí.

-Entendido. Llamo a Jose ahora mismo y lo pondré al tanto. 

-Perfecto. Nos vemos allí.

Un rato después de avisar a Jose, Hai les mando una ubicación. Los hermanos Gambino llegaron al lugar indicado y vieron a Jose llegando. Al entrar vieron a Hai e Igor, ellos los guiaron a una sala reservada en la parte trasera del establecimiento. La sala estaba iluminada por una tenue luz que creaba un ambiente misterioso y clandestino.

En el centro de la habitación había una mesa rectangular de madera oscura, rodeada de sillas dispuestas estratégicamente. En una de las paredes, una pizarra mostraba algunos diagramas y notas escritas a mano, indicando una planificación meticulosa.

Los hermanos Gambino se sentaron uno al lado del otro, con expresiones serias. Hai ocupó el lugar al frente de la mesa, mientras Igor se mantenía en pie cerca de él, emanando una presencia imponente.

Jose se acomodó en su asiento, observando con curiosidad el entorno y a las personas que lo rodeaban. La atmósfera estaba cargada de anticipación y tensión, sabiendo que estaban a punto de abordar un tema serio y peligroso.

Hai comenzó la reunión con una voz calmada pero firme, delineando los detalles de la operación planificada. Explicó el objetivo, la logística y los posibles riesgos involucrados, mientras todos escuchaban con atención y concentración.

-Bien, aquí está el plan. Saldremos de aquí con unos bolsos donde esta todo lo que necesitamos. -Señala unos bolsos negros de los que sobresalía la punta de unas armas grandes. -Nos dirigiremos a la playa donde una lancha estará lista para llevarnos al yate. Una vez allí, apagaremos el sistema de luces para desactivar las cámaras de seguridad. Pero hay que estar muy atento, los guardias no tardarán en reaccionar. Son seis en total, así que manteneros alerta. 

-Cuando estemos dentro, Igor desde aquí nos ayudara abrir la puerta acorazada donde esta la caja fuerte. -explica señalando un plano del yate que estaba en la pizarra. -Después con un taladro percutor abriremos la caja fuerte, robamos todo y salimos lo mas rápido que podamos hacia la lancha, Mientras Igor ya estará en la playa esperando para recogernos y huir.

-Recordad -dice en tono serio. -En esta misión es probable que tengan que tomar decisiones difíciles. Los guardias no dudarán en disparar.

-Si...Nosotros al dedicarnos a esto, sabemos a lo que nos enfrentamos, somos conscientes que hay una alta probabilidad de que mi hermano y yo acabemos muertos. Estamos preparados para eso. -Dijo Toni mirando las armas que sobresalían de los bolsos.

-Antes de eso nos llevaremos a algunos por delante si es necesario -Añade Carlo. -Es algo que con lo que vivimos y aceptamos

-En este negocio, a veces hay que tomar decisiones difíciles, decisiones en las que no tienes tiempo de pensar, hay ocasiones en las que la solución es o matas o te matan... No os preocupéis, todo va a salir bien. -Dice Hai sentándose en la mesa.

 -Eso espero. ¿Y qué opináis de Salinas, el abogado? -Pregunta Carlo en tono serio.

-Hombre complicado, le gusta el juego, las mujeres y el dinero .Es astuto, pero como todos los abogados, su lealtad se inclina hacia el dinero. No esperéis que arriesgue su cuello por vosotros si las cosas se ponen feas. -Explica Hai.

-Las personas así no son de confianza pero estáis destinados a trabajar con él así que id con cuidado -Aconseja Igor.

-Yo sé como son las persona' así, quiere dinero y despué' le va a dar igual defenderte o no -Opina Jose. -He conocido a varias personas como él.

-En resumen, en el abogado hay que confiar lo justo porque si es para salvarse no va a dudar en venderos. Pero tranquilos, si eso pasa, nos encargaremos de él -Igor señala una de las armas largas que había en la sala.

Después de concluir la reunión con Hai e Igor, los hermanos se despiden con un apretón de manos firme y determinado. Hai les proporciona la fecha definitiva para el robo, lo que marca el inicio de una cuenta regresiva para la misión.

-El robo será dentro de dos días. Prepararos y aseguraros de estar listos para lo que pase. -Hai le da una palmada en la espalda a los dos.

Los hermanos Gambino asienten en señal de entendimiento y se marchan, con la mente ya inmersa en los preparativos para la operación que se avecina.

Al salir Toni revisa su teléfono y ve el mensaje en el Darkchat. Levanta la mirada y les enseña a Carlo y Jose el mensaje: "El dinero esta listo, pasen por mi despacho, R"