Siguiendo tu sombra..

Primer contacto

Había pasado un tiempo desde que los ninjas de Konoha llegaron al área de batalla, sin duda fueron de gran ayuda ya que en poco tiempo pudieron acabar con cada uno de los soldados de piedra a los cuales se enfrentaban. Sin embargo varios de esos ninjas salieron con lesiones, nada grave pero si era algo por lo cual preocuparse, uno de ellos era Shikamaru el cual se encontraba con un hombro lastimado.

— Es un fastidio, por fin terminamos con todos. — Dijo entre quejas el de coleta mientras se encontraba sentado en la rama de un árbol siendo atendido por Temari.

La rubia que se encontraba a su lado al escucharlo simplemente le dio un golpe en el mismo hombro lastimado. — ¡Idiota deja de pensar en tus fastidios y mejor dime cómo está tu hombro! — Gritó con frustración mientras apretaba su puño.

El de coleta solo se quejó mientras sobo su hombro. — ¡Eso fue cruel! No me dolía mucho hasta ahora. — Respondió con dolor.

Ella solo miró a otro lado algo arrepentida por su acción. — Bueno, igual te lo merecías, al menos hizo que te dejaras de quejar por flojera.

— Si que eres problemática, ¿Cómo sigues teniendo tanta energía como para golpearme con tanta fuerza? — Como respuesta solo consiguió una risa de aquella chica.

Después de unos minutos mientras caminaban por el área encontraron a Kankurō el cual los estaba buscando. — ¿Ustedes dos en donde estaban? En fin, se a decidido que dormiremos aquí, las tiendas de campaña están listas, vamos.

Los dos asintieron y bajaron del árbol para acompañar a Kankurō. El nombrado no tardó mucho en sentir un ambiente diferente entre aquellos dos. — Hermanita, así que no estuviste perdiendo el tiempo mientras estuviste en Konoha, ¿Verdad? — Dijo mientras recargaba su brazo en la rubia con una grande sonrisa.

— ¿De qué hablas idiota? — Respondió antes de ver la cara del titiritero la cual mostraba todas sus insinuaciones. Esa cara no duró mucho ya que rápidamente la rubia apretó su puño y con fuerza le dio un golpe en la cabeza. — ¡Fíjate con quien hablas Kankurō!

Shikamaru se quedó helado, si antes temía por la fuerza de su enamorada ahora lo hacía más, para ella dar golpes era tan sencillo como respirar.

— ¡Auch, Auch! — Exclamo entre quejas su víctima, al parecer ese tema ponía más sensible a Temari.

Después de unas quejas y regaños los tres llegaron al lugar donde pasarían la noche, Kankurō se adelantó por lo que los opuestos tuvieron unos minutos para despedirse.

— Duerme bien, no quiero que ese hombro siga siendo una molestia mañana. — Dijo la rubia mientras le daba la espalda.

El sonrió a medias, el que se preocupara por el a su forma se le hacía adorable. — Está bien, nos veremos mañana, descansa, Temari.

Está asintió y se separó de él para dirigirse a su casa de campaña, el hizo lo mismo, pero, estando acostado y listo para dormir simplemente no pudo hacerlo, no dejaba de pensar en ella, volverla a ver hizo que recordara por qué estaba enamorado de ella.

Después de un rato este decidió salir de su casa de campaña y empezó a caminar sin un rumbo específico, necesitaba algo de aire fresco, pensó que eso lo ayudaría a dormir.

Después de unos minutos de caminar este se encontraba lo suficientemente lejos de los demás, había encontrado un lago silencioso ideal para sentarse y pensar, sin embargo escuchó un ruido que venía de su punto ciego, se apresuró a voltear y se encontró con aquella culpable de su insomnio, ella se sorprendió al darse cuenta que era el, ya tenía su kunai en su cuello.

— ¿¡Idiota que haces fuera de tu cabaña!? Estuve a punto de matarte pensando que eras un infiltrado. — Dijo en modo de regaño Temari.

El de coleta se limitó a solo dar un suspiro, lo tomó por sorpresa. — Deja de llamarme así. — Respondió mientras posaba su brazo derecho en su bolsillo. — No podía dormir y quise dar un paseo, tranquila.

La rubia solo suspiró. — Esta bien, te acompañaré.

El sonrio ante sus palabras y asintió, ambos se encontraban sentados en la orilla del lago, era un ambiente tranquilo y relajante para ambos.

— ¿Como sigue tu hombro? — Preguntó Temari con algo de preocupación.

— Bueno, después de ese golpe que recibió creo que está considerablemente bien, no duele mucho.

Ella solo río un poco con algo de timidez. — Lo siento por eso, creo que no controle bien mi fuerza. — Respondió mientras se acercaba más a él para después recargar su cabeza en su hombro sano.

Shikamaru solo se encargó de disfrutar el momento, puede que no sea muy parecido al sueño que tuvo el otro día pero de igual forma se sentía en las nubes, el la rodeo con su brazo.

También estuvo en su mente la idea de avanzar otro paso, quería darse su primer beso con la rubia, tiempo atrás estaba muy decidido de hacerlo pero ahora viendo como es su temperamento cuando está sensible no podía dejar de pensar en la posibilidad de que cuando intentará dar el siguiente paso este saliera volando por los aires.

— Estrañaba tu presencia, no sabía cuándo volvería a verte pero ahora estoy feliz por eso. — Agregó el de coleta.

La rubia se ruborizó por tales palabras. — Yo también esperaba verte pero nunca pensé que lo haría de esta forma.

El verla con las mejillas de un tono rojo flechó su corazón, se veía hermosa con esa actitud tímida, no pasaron ni dos minutos cuando el por fin tomó una decisión, temía que no fuera la correcta pero tomaría el riesgo.. Sin más pensarlo tomó con la mano el mentón de la rubia para dirigir su cara a donde se encontraba la suya, la tenía a milímetros de distancia y solo podía ver como la chica se ruborizaba completamente, finalmente dejó un beso en sus labios..

Ese tacto entre los dos formó una reacción cálida la cual lo impulsó a continuar el momento con demás besos románticos los cuales se alargaban en tiempo y cantidad, sin duda se sentía como estar en el paraíso, sus labios suaves y con un sabor dulce lo volvió adicto.. Después de unos minutos de acción terminaron con el contacto y se miraron por unos minutos para después seguir con un abrazo aún más cálido. Ahora la realidad había superado su sueño.

— Ya es tarde, regresemos a descansar un poco. — Agregó al momento el de coleta.

...

A la mañana siguiente todos se encontraban guardando sus cosas y preparándose para el camino de devuelta a sus aldeas, Shikamaru se encontraba cargando algunos grandes pergaminos los cuales le entregaría al encargado del mando de los ninjas de Sunagakure, en el camino se encontró con Temari.

— Veo que tu hombro ya se encuentra bien, solo necesitabas descansar. — Dijo con una sonrisa.

— Si, ya me siento como nuevo, solo entregaré esto para después dirigirnos a Konoha. — Respondio con una cara de fastidio, se veía en su cara que solo quería dormir todo el día.

Ella solo soltó unas carcajadas. — Bien, entonces no te molesto, también tengo que irme, no te quejes mucho de las cosas y cuídate en todas tus misiones, nos veremos en los exámenes chūnin.

Este asintió y solo sintió algo cálido en su mejilla, había dejado un beso en ella para después empezar a alejarse. — Nos vemos, Nara. — Agregó la rubia mientras se despedía con su mano arriba.

El se quedó con una sonrisa en su cara el resto del día, la flojera desapareció, ella hacía que su energía nunca se acabara.

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Algo largo pero lindo, espero les haya gustado este siguiente paso en la relación, en la siguiente parte se encontrarán 3 meses después de esto, abra mucho que añadir por lo que al igual que esta será algo largo 💪