La Chica Suicida (Rubius y tu)

Capítulo 5

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Rubén y yo nos páramos de los asientos para pasar a que me checaran el estupido ojo de mierda que mi padre lo habia puesto de ese modo, llegamos a un pequeño cuarto con cortinas azules, una cama y unos monitores.

-______ si quieres sientate en la cama -dijo la enfermera y le hice caso. -Dejenme hablarle al doctor para que te cheque el ojo -dijo la enfermera y salio del cuarto.
-Si quieres.... Espera -dijo Rubén y se acercó a mi, puso el mechón que cubría mi moretón detrás de mi oreja. -Listo -dijo con una pequeña sonrisa.
-Gracias -dije y en eso entro el doctor.
-Hola _______, cuanto tiempo sin verte -dice el doctor con una sonrisas de las más falsas que he visto en mi vida.
-Hola Alberto -dije seca, el fue el que me opero de las muñecas cuando me las corte con la navaja.
-¿Como están tus cicatrices? -preguntó y volteé a ver a Rubén y me dedico una sonrisa.
-Bien
-¿Las puedo ver? -preguntó y levante mis mangas de mi sudadera, dejando todas mis cortadas y cicatrices descubiertas.
-Ay Dios mío -dijo Rubén al verlas. -¿Tu te hiciste eso ______? -preguntó Rubén y agache mi cabeza y asentí y se creo un silencio incomodo.
-Bueno... -dijo el doctor destrozando ese silencio. -Vamos a checarte ese ojo -dijo y me volví a recojer el mechón de pelo. -¿Cómo te hiciste esto en el ojo? -preguntó el doctor y no dije nada. -_____, por favor contesta -dijo el doctor y no dije nada. Otra vez. -¿Fue tu padre? -preguntó el doctor cruzando los brazos y asentí. Yo ya estaba al borde de las lágrimas pero tenia que ser fuerte. No lo logre. Mis lágrimas salieron y Rubén vino y me abrazo. -Ire a buscar algo para tu ojo, por mientras los dejare solos -dijo el doctor y salió.
-Shh... Todo va a estar bien -dijo Rubén y me abrazo y aparte me dio unas palmaditas en la cabeza. -Ya no puedo Rubén... He dejado de ser fuerte -dije llorando.
-No digas eso, yo me encargaré que no sea así -dijo y fue la primera vez que sentí que por lo menos le importaba a alguien.
-¿Lo prometes? -pregunté. Aún seguía abrazandome.
-Lo prometo -dijo y me abrazo mas fuerte.

Rubén y yo nos separamos y me limpió las lágrimas que estaban en mis mejillas con su dedo pulgar, me miro y me dijo "Todo va a estar bien pequeña". Volvió el doctor con una crema rara, unas gotas y una bolsa de hielos.
Me pusieron la bolsa de hielos en el ojo, luego las gotas y al final la crema rara que me pusieron alrededor del ojo.

Al salir de la sala esa, Rubén me dejo en la sala de espera por que quería hablar con su mamá. No supe de que estaban hablando ya que veía a Rubén que estaba rogando pero su mamá negaba con la cabeza. Mientras veía a Rubén rogándole a su madre quien sabe que, recibí un mensaje y me di cuenta que era de James. Mierda.

James: "¿En donde coño estás? No te he visto en toda la maldita mañana"
_______: "Estoy con Rubén en el hospital, perdón por no haberte avisado"
James: "Esta bien, no te preocupes, pero... ¿Porque éstas con Rubén en el hospital?"
_______: "Se dio cuenta del moretón que me hizo mi padre"
James: "Bueno, ¿Pero éstas bien?"
_______: "Si tranquilo, estoy bien, no tienes de que preocuparte"
James: "Esta bien. Te dejo que ya voy a entrar a clase, así que bye niña, te quiero"
______: "Yo también te quiero"

Voltee a ver a Rubén y lo vi abrazando a su mamá y sonreí. Hace mucho que no abrazaba mi mamá, mi mamá había estado estos días trabajando todo el día y llegaba muy noche a la casa, y se despertaba antes que yo para ir a su trabajo. Casi nunca la veía. Rubén vino hacia a mi y me sonrió.

-¿Nos vamos? -pregunto Rubén y asentí. Me sentí un poco mal por todo lo que hizo Rubén por mi, aunque solo han sido dos días, ha hecho mucho por mi. Me detuve y Ruben me miro extraño. -¿Que tienes? -pregunto.
-Gracias... -dije y el solo sonrió y vino hacia mi. -Gracias por lo que has hecho por mi -dije y el solo me abrazo.
-No tienes nada que agradecerme pequeña -dijo y me abrazo más fuerte. Después de unos segundos nos separamos.
-¿Vamos a volver a la escuela? -pregunté y comenzamos a caminar.
-No, iremos a mi casa -dijo y salimos del hospital.

No se si pueda ir a la casa de Rubén, soy su vecina y mi padre me puede ver. Si mi papá me escuchó el otro día hablar con Rubén, si me ve con el me va a ir peor de como me fue la vez pasada. Aparte mi papá normalmente esta todo el día en la casa, así que no tengo otra opción que ir a la casa de Rubén.

Rubén y yo caminamos a una tienda ya que a Rubén le dio hambre por que no había comido nada; llegamos a la tienda y el se fue directo a donde vendían chocolates y dulces.

-¿Kit-Kat o Hershey's? -me pregunto Rubén y no supe que contestarle, hace mucho que no comía chocolate o algo que me hiciera engordar.
-No sé... -dije y el me miro confundio. -Es que hace mucho que no como chocolate -dije y Rubén abrió los ojos como plato.
-No puede ser verdad, pero si el chocolate mueve al mundo -dijo y me reí. Este tipo estaba loco. No comía chocolate por que tenía miedo a engordar. -Me llevo... Los dos -dijo y tomo los dos. -¿Tu no quieres llevar algo? preguntó y encogí los hombros.
-No sé -dije y me sonrió.
-Escoje lo que quieras, anda -dijo y mire a mi alrededor, no se me antojaba nada la verdad, pero mis estúpidas tripas decían otra cosa. -Esas tripas dicen que tienen hambre -dijo y baje mi cabeza. Rubén me miro y tomo a mi mano y me llevo a otro pasillo de la tienda donde había galletas y pan. Tomo un pan de pipas y me dejo escoger algo más, como no sabia que tomar, tome unas galletas que antes comía y que eras mis favoritas; Rubén vio lo que tome y me sonrió. -Esas eran mis favoritas de pequeño -dijo y sonreí.
-Las... Mías igual
-Ven, vamos a que nos paguen esto -dijo sonriendo y fuimos a la caja.

Salimos de la tienda y nos fuimos hacia su casa. Antes de entrar a su casa me fije si en mi casa había alguien y al paracer no había ninguna persona.

Estuve en la casa de Rubén todo el día. Estuvimos jugando videojuegos en su cuarto, comimos (yo comí muy poco), vimos unas películas, etc. Lo peor de todo fue que me quede dormida en su habiatación, ya que Rubén iba a jugar a un juego raro y yo no quería jugar, y mientras veía el juego me quede dormida. Al despertar siento un brazo en mi cintura, abrí mis ojos como plato y veo quien es... Y se trata de Rubén.

Ya cuando Rubén despertó ya era de noches y pues me tenía que ir a mi casa; salimos de la casa de Rubén y no evite abrazarlo por todo lo que hizo por mi en este día. Nos separamos del abrazo y me fui a mi casa, entro a mi casa y no me creo lo que estaba viendo.