1 - El Comienzo

303 23 7
                                    

Voy a comenzar contándoles un poco sobre mí, soy Tn, soy mexicana, pero desde hace muchos años vivo en Corea por el trabajo de mi papá, específicamente vivo en Busan, actualmente tengo 26 años, la misma edad de Jungkook.

A él lo conocí cuando teníamos 12 años, fue una cuestión del destino que sinceramente en este punto me gustaría haber evitado, o bueno, no lo sé, quizá sólo estoy dolida.

Sobre nosotros, nos conocimos en la escuela, éramos compañeros, él era tímido y yo era un poco más extrovertida, aunque no lo suficiente, ya que logré hacerme su amiga, pero no conseguí más amigos, cosa que me costó limitar mi convivencia a estar con él, en fin.

Cuando casi cumplíamos medio año de conocernos él me pidió ser su novia y yo acepté porque era un hombre muy lindo, me trataba bien, me cuidaba y además de verdad me gustaba, lamentablemente tuvimos que ocultar nuestra relación ya que ni sus padres ni los míos nos permitían tener "pareja", si es que se le puede llamar así a una relación de adolescentes, pero no fue difícil aparentar ya que ante sus ojos éramos amigos y podíamos salir a todos lados sin que sospecharan, era nuestro plan perfecto.

Todo iba bien en nuestro amor adolescente, al menos hasta que decidió debutar como idol y no es que me molestara, al contrario, yo sabía la ilusión que le hacía ser cantante y bailarín y además es el maldito rey midas de cualquier cosa, todo lo que toca se convierte en oro, bueno, es un decir, claro, pero es que todo lo que quiere lo consigue y lo hace de maravilla.

Me estoy desviando, la situación es que nuestra relación ahora además de ser secreta para nuestros padres también debía serlo para su empresa, cosa que no causó problemas, sino hasta un tiempo después.

Pero regresemos al principio, el cómo comenzó nuestra relación, un día yo estaba sentada cerca de nuestras casas, porque además éramos vecinos, y él llegó a acostarse junto a mí con su cabeza sobre mis piernas y no hubo gran conversación, o al menos no la recuerdo, pero después de un rato se levantó y se sentó a mi lado y en ese momento comenzó a tocar mi pierna, yo me puse nerviosa, porque nunca nadie había llegado a ese acercamiento conmigo.

Días después lo acompañé a su casa y por torpe casi me caigo y ¡cómo no! El super héroe me salvó de partirme la columna en muchos pedacitos, pero eso hizo que su mano quedara en mis pompis y no la quitó de ahí, como pudo me ayudó a pararme bien nuevamente y como estábamos solos, eligió comenzar a tocarme y yo adolescente con las hormonas vueltas locas no se lo impedí, pero digamos que no pasó de eso, sólo disfrutamos un buen rato.

Pasados los días las cosas seguían siendo así, me tocaba en cada oportunidad que tenía, pero ninguno decía nada posterior a eso, hasta que un día por fin decidió hablar.

Jk: Tn me gustas - yo no me lo esperaba, es decir, me había manoseado cual fruta de mercado, pero no creí que en verdad le gustara.

Tn: tú a mí también me gustas Jungkook - no me iba a andar con rodeos cuando el chico más guapo de la escuela me acababa de decir que le gustaba.

Jk: quiero que tengamos algo, pero no sé qué opines - nuestra conversación no fue lo más coherente.

Tn: ¿cuáles son las opciones? - ahí venía una de las primeras red flags que no quise ver.

Jk: no lo sé, podemos ser amigos con derechos, novios, lo que se te ocurra.

Tn: el plan de amigos con derechos no va conmigo, me parece mejor idea ser novios.

Jk: entonces seamos novios - así de simple comenzó todo.

Tn: ¿y cómo se supone que te debo decir ahora?

Jk: yo estaba pensando en eso mismo, qué te parece si yo te digo "mi niña" - el apodo cursi será importante más adelante, así que espero que no lo olviden - y tú puedes elegir cómo decirme.

Tn: me gusta, mmm no voy a usar algo cursi, quizá kookie sea bueno.

Jk: muy bien, entonces así será.

Luego de eso acordamos los términos y condiciones donde analizamos nuestra relación a escondidas y cosas que a este punto ya saben.

No hay mucho que decir de ese comienzo torpe que un par de adolescentes estúpidos acababan de tener, sin darse cuenta que sería la perdición de los dos.

Nuestra "relación" duró hasta el momento en que el individuo debutó y un día de la nada me mandó un mensaje para decirme que debíamos terminar, en ese momento se me hizo muy bajo que lo hiciera por ese medio, pero ahora que lo pienso era la única forma de terminarme, él estaba en Seúl, yo en Busan y no había gran cosa por hacer, aunque después también me llamó.

Jk: hola mi niña, necesito hablar contigo.

Tn: ¿qué pasa?

Jk: creo que debemos terminar - eso no lo esperaba - creo que es lo mejor, porque no quiero hacerte daño, nos vemos a penas unos días al año - y es que era cierto, desde que se fue a Seúl sólo lo veía unos cuantos días en fin de año - y no mereces esto, mereces a alguien a quien puedas tener cerca y yo no soy esa persona, no puedo dedicarte el tiempo que te mereces.

Tn: ¿estás enojado conmigo y por eso lo haces? ¿O es una broma?

Jk: no mi niña, no es un a broma, estoy hablando en serio.

Luego de eso me dediqué a rogarle que no me dejara, que haría lo que fuera porque estuviéramos bien y que no me importaba que estuviéramos lejos, pero al final su decisión fue tomada y no hubo nada que pudiera hacerlo cambiar de opinión.

Tristemente para mi dolido corazón, no recuerdo si al día siguiente o varios días después, en su cuenta de Facebook publicó que tenía una relación, con una chica que era básicamente lo mismo que yo, pero más blanca, también era mexicana y al parecer tenían un tiempo juntos.

No pude decir mucho porque se supone que ante los demás no éramos nada y preferí callar y llorar en silencio el hecho de que quizá estuvo con ambas desde hace tiempo y ahora prefería dejarme a mí para presumirla a ella.

Ahora que lo pienso tal vez sí fui yo con quien le fue infiel a esa chica, pero no voy a hacer el papel de víctima, cuando actualmente sé todos los errores que cometí.

Además quiero dejar claro que no cuento esto para que él quede mal, como dije, yo también cometí errores y sólo quiero contarles mi versión de la historia, porque seguramente él tendrá la suya, después de todo, bien dicen por ahí que toda historia tiene al menos dos versiones y ésta está sujeta a mi percepción y el dolor por el que pasé.

Aparentemente correspondidaWhere stories live. Discover now