~ 𝙇𝙖 𝙥𝙧𝙤𝙥𝙪𝙚𝙨𝙩𝙖 𝙀𝙦𝙪𝙞𝙫𝙤𝙘𝙖𝙙𝙖 ~ / Tom Holland

- Capítulo 5 -

Laia Ross

Sam esperaba a mí respuesta, yo seguía pensando que esto está mal, que esto no era una buena idea. Esos ojos avellana que me miraba con súplica seguían puestos en mis ojos, no puedo resistir a su mirada, no puedo resistir a esto. Suspiré rendida y lo miré fijamente . 

— ¿Estás seguro de esto?.— levanté ambas cejas.

— Si, como te dije, confío en él y confío en ti. solo será un día, ¿Que puede salir mal?. 

— tardé unos segundos para hablar— está bien. Hagámoslo. Pero, ¿qué ganaré yo?. 

—Mmm… ¿Qué quieres?— me agarra de la cintura y me da besos por todas partes de la cara, yo sonreía. 

— Dejamelo pensar — me hago la pensativa.— ya sé, podrías dejar que te enseñe a patinar— el odia hacer eso, varias veces le quise enseñar pero no quería, ya dos veces lo había intentado pero se caía — 

— Me volveré a caer — me hace puchero y yo me río. 

— Yo estaré a tu lado para que no caigas. — pongo mis brazos alrededor de su cuello— 

— Bueno, si así será, entonces aceptaré— se acerca a mí lentamente y me besa, me encanta cuando me besa, es muy dulce conmigo—

—me separé de él y lo miré, una sonrisa de enamorada se hizo notar en mis labios— eres muy lindo 

— sonríe— Tú lo eres más. 

Vuelve a besarme, estábamos tan en lo nuestro que escuchamos un ¡iugh!, al girar para ver nos encontramos con Liam, que nos miraba estando parado en el marco de mí puerta. 

— ¿No se cansan de pasarse saliva? — decía con asco. 

— Cuando tengas nuestra edad no dirás lo mismo— le dije divertida, mientras que Sam seguía agarrando de mí cintura. 

— ¡Vamos!, alguna niña debe gustarte— habla Sam sonriendo. 

— ¡Iugh!, no estaré con una jamás. Apuesto a que Paddy piensa lo mismo que yo. — se pone ambas manos en su cintura y levanta su barbilla. 

— Tienes un punto, él dice lo mismo— negaba con su cabeza mientras reía. 

— Niños inocentes— dije burlona. 

Mí hermano Liam desaparece y volvemos a estar juntos Sam y yo, una vez que la puerta está cerrada me besa y me lleva hacia atrás hasta llegar a mí cama, me acuesta delicadamente mientras se pone encima de mí, me besó con más intensidad, mete su mano por debajo de mí blusa, acaricia mí espalda, mí cintura y cuando está por llegar a mí pecho suena su celular, dice “mierda” a lo que yo me río y sale de encima de mí, atiende su celular y yo lo miro mientras muerdo mí labio inferior. 

— Si Paddy, ahora voy, quédate ahí… no le abras a nadie, ya voy, tranquilo. Adiós—fruncía el ceño y se guardaba el celular en su bolsillo. 

— ¿Todo está bien?— pregunté 

— Harry salió de urgencia, mis padres aún no llegaron y Tom salió, está solo en casa, así que ya debo irme—vuelve agarrar de mí cintura y me da un corto beso— nos vemos mañana cariño 

— Claro nos vemos, ve con cuidado—

— Lo haré— besa mí frente y se va. 

Vi desaparecer a mí novio de mí habitación, me asomé a la venta, vi como lanzaba las llaves hacia arriba y las agarraba, siempre hacia eso es un tic que tiene, yo lo veía con una sonrisa, él sintió mí mirada, me sonríe, me tira un beso al aire y yo lo atrapo, se mete al auto y se va.