#3 ━━ Díselo a las ranas.

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━ ━━ chapter three: Tell it to the frogs.

Era de noche y todos estaban durmiendo, excepto yo. Primero que no tenia donde dormir y segundo que no confiaba un carajo en estas personas.

Estaba sentada afuera de un remolque esperando al amanecer hasta que vi una sombra a lo lejos, parecía una mujer alta y delgada, tal vez es la que estaba cuando llegue.

Poco a poco se iba acercando más y más a mi, ¿Qué es lo que quiere?

─── ¿Qué haces aquí afuera sola y despierta? ───me pregunto la mujer un tanto preocupada a lo que solo le di una mala mirada y la ignore. ─── ¿Quiénes son tus padres y porque no estas en una carpa como los demás?

Que mujer insoportable, que se preocupe por su hijo y que me deje en paz, dios. ─── Mi papa es Merle, el hombre que tu esposo dejo esposado y no estoy en carpa porque no tengo una donde dormir. Daryl duerme en otro lado pero me obligo a quedarme aquí, dice que es mas seguro. Ya te dije todo, ¿feliz? ─── rodeé los ojos y suspire levantándome del piso.

─── ¿Adónde vas? ───me pregunto al ver que me iba.

─── Preocúpese por su hijo y deje de meterse en mi vida. ───dije molesta sin voltear, dejando a aquella mujer parada sola al frente de aquel remolque.

Me dirigí hacia la carpa de Glenn, el me había explicado donde estaba por si necesitaba algo.

─── Glenn... ───susurre desde afuera.

─── ¿Qué paso?... ───dijo con una voz un poco cansada.

─── ¿Puedo dormir contigo?... ───dije un poco tímida mientras entraba a la carpa del chino.

El sonrió y asintió con la cabeza mientras me hacia un espacio en su colchón. Me hizo señas para que me acostara y eso hice.

Luego de unos minutos finalmente pude dormirme, mañana intentare causar una buena impresión, ayudare a las mujeres y probablemente insulte a uno que otro tipo que se me haga el loco.

[...]

Ya era de día y yo recién me despertaba.

Al abrir mis ojos pude notar que Glenn ya no estaba a mi lado pero también pude notar a la mujer de anoche, a Carl y Sophia sentado a un lado mío.

Los dos niños estaban jugando con unos autitos y unas muñecas mientras que la mujer solo estaba sentada en una silla haciendo algo.

─── ¿Usted de nuevo? ───le dije a la señora mientras me sentaba en el colchón. Apenas me senté sentí un dolor en mi brazo y pude ver que tenia una venda. Es la herida que me hice cuando intente abrir la puerta trasera del supermercado, la señorita la había desinfectado y la había vendado. ─── Gracias... ───dije viéndola.

Puedo ser una grosera, una agresiva o lo que quieran pero nunca una mal agradecida.

─── Gracias por intentar cuidarme, es que estoy acostumbrada a hacerlo sola y nunca me dejo ayudar. ───dije un poco apenada.

─── Entonces ahora me dejaras ayu-...

─── Ni lo sueñes. ───la interrumpí antes de que siguiera hablando y ambas empezamos a reír.

"𝙅𝙎𝙎"|| 𝑪𝒂𝒓𝒍 𝑮𝒓𝒊𝒎𝒆𝒔Where stories live. Discover now